Cultura

Alejandro Hidalgo: "Por soñar, me gustaría dirigir a Sandra Bullock o Charlize Theron"

En 2013, los venezolanos aficionados al cine de terror celebrámos la llegada a las salas de La casa del fin de los tiempos, primer filme de este género realizado en el país. Seis años después, su director se prepara para un remake en suelo norteamericano. Es como si en su debut, un boxeador ganara el campeonato mundial. Alejandro Hidalgo conversa con El Estímulo sobre cómo va el proceso de esta versión.

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Es difícil conseguir que Hidalgo, de 31 años y graduado en la Universidad Santa María, se emocione. Al menos eso parece por el tono de voz que mantiene durante toda la entrevista. Nos atiende desde Los Ángeles. A diferencia de él, sí me excedo en la introducción de mi presentación, en la que lleno de adjetivos positivos su ópera prima. «Mi búsqueda con la película fue simplemente innovar dentro del género», responde rápidamente sin detenerse en los cumplidos.  «Quería profundizar porque al terror le cuesta desarrollar personajes, que tengan empatía con los espectadores. Entiendo que es un formato comercial, para vender el horror, sin embargo mi deseo era contar una historia con conexiones, con emociones y por eso creo que  New Line (Cinema, productora de El Conjuro, Apaga la Luz, El Señor de Los Anillos, entre otras ) se interesó en realizar el remake».

– ¿Por qué cree que las críticas de su película fueron tan positivas?

Eso se logra cuando haces un producto de calidad. La película se hizo con amor, técnica y un toque humano. La gente puede aterrarse, pero también conmoverse. Es una historia de género, claro, y por es por eso que genera interés de Hollywood. Sin embargo también es venezolana y toca sentimientos universales, como el amor familiar.

– ¿Cuándo recibió la noticia sobre el interés de New Line Cinema?

Fue hace un par de años. Recibí un correo electrónico, que me rebotaron desde el CNAC (Centro Nacional Autónomo de Cinematografía). Supongo que fue lo que vieron cuando revisaron la ficha en IMDB (Base de datos de películas). Entiendo que un productor vio la película en un festival y se interesó. Pasamos un año negociando con los productores, y luego un año más con el estudio. Luego hace poco se les presentó el proyecto y se cerró todo.

– ¿Qué sintió al saber la noticia?

Era una oportunidad de explorar. Cuando supe la noticia no sabía qué esperar. No sabía qué tipo de estudio era. Entonces me abrí a la posibilidad. Vine a Los Ángeles, pude ver el background de los diferentes interesados y me emocionó.

– ¿Cuando terminó la película en Venezuela, pensó que era posible una versión para el público norteamericano?

Era un sueño muy lejano. Pero creo que hice todo el trabajo para que ello sucediera. Empezó desde la escritura de guión.

– ¿Cómo se negocia con una productora gringa? ¿Cuánto te exigen entregar y cuánto puedes mantener de tu idea original?

El estudio es básicamente una gran corporación de entretenimiento. Entonces ellos quieren apostar a que la película conecte con la mayor cantidad de audiencia, que sea universal. Eso requiere y demanda que haya una adaptación del guión al publico norteamericano. Yo solicité estar en el proceso de negociaciones para que se mantenga de alguna forma esta historia independiente, que nació en Venezuela pero que puede traspasar fronteras y contarse en otros lugares.

– Llegado este punto, ¿cuál es su mayor preocupación?

Estoy tratando de no preocuparme porque eso crea prejuicios. Confío en los ejecutvos de New Line y en sus creativos. Es un trabajo de equipo y queremos hacer una película de alto impacto, que pase lo mismo que con La casa del fin de los tiempos pero a nivel universal.

– Además de usted, ¿hay otro venezolano involucrado en el remake?

No. Solo estoy yo como productor y director. El guionista será Harry Gayden (Tierra a Eco, Zombie Roadkill)

 – ¿Ya tiene un plan de trabajo?

No, eso viene después que Gayden termine el primer borrador del guión y eso todavía no ha empezado. Obviamente va a tener una atmósfera distinta, por ser una adaptación con más recursos. Como director quiero probar nuevas técnicas, que las escenas de suspenso sean más ricas. Es decir, que técnicamente y visualmente sea más sofisticada.

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La casa del fin de los tiempos tiene como elementos a una casa misteriosa, en la que han sucedido extraños acontecimientos y una mujer (Ruddy Rodríguez), que guarda un gran secreto. Esos tópicos, trabajados históricamente en el cine, son tomados por Hidalgo para llevar al espectador a un sitio conocido y después sorprenderlo con un espectacular giro argumental, convirtiendo la historia inicialmente de terror en una obra mixta, en la que también tiene cabida la fantasía.

– El giro que usted le da a su película es lo que, a mi juicio, la encumbra. ¿Me puede decir si hay alguna influencia directa de la ciencia ficción o la fantasía que le haya llevado a escribir ese guion?

Las influencias están pero diría que no de manera consciente. Para mí fue importante ver películas de Mario Bava (director de cine de terror, uno de los padres del llamado cine giallo, autoría que comparte con Daríoi Argento), filmes como Los Inocentes, El Orfanato, las cintas de (Alejandro) Almenabar, que son unas bellezas y tienen grandes twists (giros inesperados en la trama) o Los Cronocrimenes. Pero ya en cuanto a La casa del fin de los tiempos, me basé en mis vivencias de niño. Había una casa que nos producía mucho miedo. Así que empecé a recrear toda la historia y luego le agregué lo del viaje del tiempo y otros elementos.

Dada la historia y el boom del terror, un género que antes era para un selecto grupo de freakis y hoy es más amplio, es lógico que quieran hacer un remake en Estados Unidos, pero fue arriesgado que en Venezuela usted eligiera que su primera película tuviera ese toque.

De hecho eso era un atractivo y un prejuicio a la vez, porque muchos decían «ah una película de terror venezolana, seguro da risa». Pero gustó. Yo creo que pegó porque porque conecta con la audiencia, por las emociones que tiene. No es solo algo de asustar y ya.

– Soñemos. Digamos que usted puede elegir a la actriz que va a tomar el papel de Ruddy Rodríguez, ¿a quién le gustaría dirigir?

Por contrato no puedo adelantar, así que sí, debemos recalcar que es simplemente eso de soñar. En ese sentido me gustarían poder tener opciones como Sandra Bullock, Charlize Theron. Pero la verdad es que primero debe aprobarse el guión y mucho después se revisa quién podría ser la actriz.

– Debutar, pegar y abrir camino a otros directores de cine venezolanos, a usted le llegó eso de un sopetón, ¿algún consejo a los muchachos que sueñan con hacer películas?.

Que crean en ellos, que se cultiven, que se formen. No basta con la escuela, hay que ver cine, cometer errores, grabar un corto con lo que tengas. Y si algo sale mal, saber que eso es que estás en el camino adecuado.

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