Ciudadanía y moneda fronteriza: conoce las propuestas en la frontera colombo-venezolana
Que las personas en la frontera colombo venezolana cuenten con ciudadanía fronteriza, que usen la misma moneda y que la frontera esté abierta 24 horas son solo algunas de las propuestas iniciales de la Cátedra de Frontera, una iniciativa en la que participan universidades y organizaciones de ambos países
En septiembre se cumplen dos años de la reapertura de la frontera entre Colombia y Venezuela, sin embargo, su normalización aún no es completa. Ante esto, universidades de Colombia y Venezuela reactivaron formalmente la “Cátedra de la Frontera”, una iniciativa para propiciar encuentros que incentiven el estudio, la reactivación y la normalización fronteriza de los dos países.
Tras 10 sesiones de discusión, se plantearán propuestas para mejorar la calidad de vida de los habitantes de las zonas fronterizas. En agosto de este año, las propuestas se llevarán a los gobiernos de cada país para iniciar con su ejecución.
La firma de voluntades entre las universidades y gremios empresariales de los dos países, que forman parte de la Cátedra de Fronteras, ocurrió en la sede de la Universidad Francisco de Paula Santander el pasado martes 16 de abril.
Por Venezuela, hacen parte de esta iniciatica Fedecámaras Táchira, la Cámara Colombo Venezolana, la Universidad Bicentenaria de Aragua, la Universidad de Los Andes, la Universidad Pedagógica Experimental Libertador, la Universidad Nacional Experimental del Táchira, la Universidad del Zulia, UPT Agroindustrial del Táchira y Fundef.
Del lado colombiano, la cátedra está integrada por Uniminuto, Universidad Francisco de Paula Santander, Alianza Sies+ (Instituciones de Educación Superior Norte Santander) y Universidad de La Guajira.
Estas son las 5 propuestas que, hasta ahora, están sobre la mesa para su discusión.
1. Ciudadanía fronteriza: la propuesta del libre tránsito
El ex embajador de Venezuela en Colombia y presidente de la Fundación Escuela de Gobierno Mundo y Fronteras, Pavel Rondón, abrió el seminario y reflexionó sobre la importancia académica de comprender las raíces fronterizas que unen ambas regiones. Una de sus propuestas más importantes es retomar la discusión sobre la ciudadanía fronteriza.
En 2014 se propuso la ciudadanía fronteriza en el Táchira, lo cual permitiría a las personas de los municipios fronterizos, vivir, estudiar y trabajar en ambos países sin mayores inconvenientes. En ese momento, se implementaron carnets en la Gobernación del Táchira y en el tránsito fronterizo, con el objetivo de facilitar la movilidad y la identificación, sin embargo, a pesar de esta iniciativa, Venezuela aún no ha logrado resolver un asunto crucial: establecer la ciudadanía fronteriza.
“En contraste, países como Uruguay y Brasil adoptaron la propuesta de ciudadanía fronteriza, permitiendo el paso libre entre sus territorios. Es paradójico que una idea originada en Venezuela haya sido asumida por otros países, mientras seguimos sin implementarla en nuestra propia nación”, destacó el ex embajador.
2. Una misma moneda
Entre otras propuestas claves que se plantearon en la sesión inaugural de la Cátedra de Frontera fue la posibilidad de la creación de una moneda fronteriza o un sistema monetario que resuelva los problemas actuales con la moneda, que ha desaparecido en ambos lados de la frontera.
De hecho, el bolívar ya no es la moneda más utilizada en la frontera. Desde hace años, y ante la hiperinflación en Venezuela, el peso colombiano pasó a ser usado como moneda de cambio en el estado fronterizo. Un reporte de la consultora econoalítica estima que más del 90% de las transacciones en el estado Táchira se realizan en pesos.
3. Frontera abierta
A pesar que la frontera se abrió oficialmente en septiembre de 2022, el horario de esta frontera es de 5:00 horas a las 20:00 horas todos los días.
Otra de las propuestas claves que se plantean en la Cátedra de Frontera es solicitar que Venezuela se una a la Comunidad Andina (CAN). Venezuela fue país miembro desde 1973, pero se retiró en 2006 como protesta a los Tratados de Libre Comercio que firmarían Colombia y Perú con Estados Unidos.
La Comunidad Andina (CAN) es un organismo internacional de derecho, nacido para alcanzar un desarrollo integral, equilibrado y autónomo de los países y los pueblos andinos. Está compuesta actualmente por Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia.
5. Un diplomado sin costo
La iniciativa transfronteriza, también promueve un estudio más amplio a los interesados en la dinámica de frontera: el Diplomado en Asuntos Fronterizos, sin costo y certificado por universidades de ambos países.
El mismo tendrá un contenido programático especializado en seguridad, paz, migración, salud, ambiente, economía, transporte, comercio y turismo; educación y cultura, ordenamiento territorial y finanzas, entre otros.
Un esfuerzo conjunto
Si bien el acuerdo se ha firmado con varias instituciones de educación superior y con organizaciones empresariales, comerciales y asociaciones de ambos países, todos los interesados en contribuir al mejoramiento y dinamismo fronterizo pueden participar, desde instituciones públicas hasta sociedad civil y universidades (estudiantes), precisó Fabiola García Herreros directora de la Universidad Minuto de Dios (Uniminuto).
Las sesiones que se extienden hasta el mes de julio serán transmitidas por el canal de YouTube de la Cátedra de Fronteras y las propuestas o trabajr puedes ser enviados a través de su página web catedradefrontera.com o por correo electrónico a [email protected].
La cátedra se compromete a compilar todas las investigaciones y estudios recibidos, no solo que provengan de Norte de Santander y Táchira, sino de todas las fronteras a lo largo de los 2.219 kilómetros que separan a Colombia y Venezuela.
En agosto, en un foro que se llevará a cabo, se entregarán estos documentos a los gobiernos de ambos países para su consideración. Aunque la implementación depende de los gobiernos, los ciudadanos están comprometidos en hacer oír sus voces y trabajar por un futuro mejor en la frontera, destacó Pavel Rondón.
El decreto ejecutivo 188, que entra en vigor inmediatamente y se mantendrá por seis meses, permite que los venezolanos en Panamá utilicen su pasaporte vencido para una variedad de trámites