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Qatar 2022: ¿cuál es la experiencia de las seis mujeres árbitros de la Copa Mundial?

Qatar tendrá 36 árbitros oficiales y 69 árbitros asistentes a cargo de dirigir los partidos. De ese número, solo seis son mujeres. En esta nota, contamos sus historias y expectativas para el campeonato mundial

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Se sabe que en Qatar los derechos humanos de las mujeres son constantemente vulnerados. Por eso no deja de ser toda una ironía que en ese contexto, por primera vez seis mujeres árbitras regirán el destino de los hombres que están en la cancha durante la Copa del Mundo.

Stephanie Frappart (Francia), Yamashita Yoshimi (Japón), Salima Mukansanga (Ruanda), se encargarán del juego como juezas principales. Y Karen Díaz Medina (México), Neuza Back (Brasil) y Kathryn Nesbitt (Estados Unidos) serán asistentes.

¿Quiénes son estas mujeres? ¿Cuáles son sus logros en el arbitraje? ¿Cómo defienden su papel en el fútbol? En esta nota de El Estímulo vamos a saberlo.

Stéphanie Frappart: volver a ser la primera

El nombre de Stéphanie Frappart no es desconocido. Esta mujer francesa, de 38 años de edad, desde 2011 forma parte de los réferis oficiales de la FIFA.

Frappart es sinónimo de pionera en el arbitraje: fue la primera mujer en arbitrar un partido de la Champions League (diciembre de 2020) y de la Supercopa de Europa (Estambul, diciembre de 2019).

Su gusto por la profesión inició a los trece años de edad, luego de jugar tres años con el equipo de fútbol femenino de la comuna francesa de Herblay. Sin embargo, no fue sino a los 19 años que dirigió su primer partido y a partir de allí su vida cambió.

Amplió su experiencia como árbitra en competencias de equipos masculinos de Francia y en 2019 llegó a la Ligue 1, la primera categoría del fútbol francés.

En su historial también sumó experiencias con el Campeonato Europeo Femenino Sub-19 de la UEFA (Turquía), el Mundial Femenino de 2015 (Canadá) y el Mundial Femenino Sub-20 (Francia) de 2018.

El reconocimiento más grande llegó a Frappart en 2019 y se repitió en 2020, cuando obtuvo el título de mejor árbitra del mundo por parte de La Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol (IFFHS).

Aunque es una mujer admirada por muchos, Frappart se caracteriza por ser una persona reservada. No tiene cuenta en redes sociales y admite que se enfoca únicamente en las críticas técnicas de su trabajo.

Días antes de que se disputara la final de la Copa de Francia, donde iba a debutar, la árbitra dijo a la revista Marie Curie lo siguiente: «Generalmente me aferro a cualquier cosa relacionada con la parte técnica de la evaluación. Sabemos que el árbitro es una función muy criticada. Tomamos muchas buenas decisiones, pero generalmente solo recordamos las que ‘hacemos mal'».

«Soy cuestionada en los partidos, en los medios, pero tengo la impresión de que por parte de los jugadores o de los entrenadores hay un poco más de mesura», expresó cuando se le preguntó si sentía alguna diferencia sobre ser una mujer árbitra.

Eso no quita que no se haya enfrentado a situaciones sexistas: «Debe haber sucedido que escuché (algo) desde las gradas. Pero normalmente estoy centrada en el campo. Las personas que me acompañan, familiares, pudieron sufrir al escuchar estos ataques, del tipo ‘vuelve a lavar los platos'»

Hasta ahora, Stéphanie Frappart ha sido jueza de 317 partidos y se ha enfocado en formar a numerosos jóvenes en materia de arbitraje.

Yamashita Yoshimi, la principal árbitra de Japón

Yoshimi Yamashita también forma parte de las tres colegiadas que serán árbitros principales en Qatar 2022. A sus 36 años de edad, ha logrado ser jueza de campeonatos como el Mundial femenino de 2019, la Liga de Campeones Asiática y el torneo de fútbol de los Juegos Olímpicos de Tokio.

Su amor por el fútbol nació por la influencia de su hermano mayor. Durante su época universitaria, empezó a dirigir los partidos del equipo local y compartió la experiencia con Makoto Bozono, otra árbitra reconocida de Japón. No obstante, no fue hasta 2015 que su trabajo se internacionalizó.

Foto: Victor Fraile / Power Sport Images for The AFC

Yamashita habla con alegría sobre Qatar: «No me esperaba que saliera una oportunidad como esta. Siento una gran responsabilidad por participar como árbitra, y por representar a Japón y a Asia».

La árbitra japonesa admite no sentir un cambio brusco al ir al Mundial: «Es el mismo deporte de siempre». Sin embargo, sus esfuerzos para desempeñarse adecuadamente no paran: entrena dos horas al día durante seis días de la semana y también asiste a terapia psicológica.

Yamashita considera que no sufre discriminación por ser una mujer árbitro, pero al inicio llegó a escuchar de parte de los aficionados comentarios cargados de desaliento: «Ah, sale una mujer a arbitrar».

Aunque los percibió sin mala intención, es consciente de que el trato sexista y misógino existe: «En la actualidad ya no suelo oír ese tipo de palabras, así que creo que es una muestra de que algo ha cambiado a mejor y de la confianza que se han ganado mis compañeras árbitras».

En una entrevista con la Agencia EFE, la árbitra japonesa dijo que participar en Qatar 2022 se traducía en una oportunidad para que «haya más mujeres que persigan sus sueños».

Salima Mukansanga, la primera árbitra negra en un Mundial

Salima Mukansanga tiene 34 años y es la primera mujer negra que arbitrará un Mundial de Fútbol masculino. Su amor por los deportes siempre existió, especialmente por el baloncesto. Sin embargo, el difícil acceso a las canchas en su país, Ruanda, hizo que terminara de elegir el fútbol como la disciplina para desarrollarse.

Mukansanga quiso hacer un curso de arbitraje de la Federación Ruandesa de Fútbol durante su bachillerato, pero la rechazaron por ser menor de edad. Eso la llevó a estudiar las reglas del juego por su cuenta, y en 2008 obtuvo su primer certificado de arbitraje mientras se formaba como enfermera con especialidad en obstetricia en la Universidad de Gitwe de Ruanda.

Con su primer título, inició como árbitra de juegos masculinos de tercera división y en 2012 se convirtió en árbitro internacional de la FIFA. A partir de ese momento, su crecimiento no paró: en 2019 fue supervisora oficial de la Copa Mundial Femenina de la FIFA en Francia y también lideró partidos de los Juegos Olímpicos.

Su mayor logro en el continente africano llegó el 18 enero de 2022, pues junto a otras tres supervisoras asistentes, se convirtió en la jueza central de la Copa Africana de Naciones, algo que no había pasado en 65 años de historia de ese campeonato.

Si algo es cierto, es que Salima Mukansanga es consciente de por qué fue electa como árbitra oficial de Qatar 2022: «Estoy muy contenta de ir a la Copa del Mundo, porque trabajé duro para esto. Aquí estoy, y merezco estar aquí. Este es mi momento, y tengo que aprovechar este tiempo para hacerlo brillar»

«No es una oportunidad (para las mujeres árbitros ir al Mundial), hemos estado trabajando duro para esto, haciendo el trabajo, los entrenamientos, las pruebas de aptitud física, etc.», señaló la árbitra en una entrevista con Sports.

Para Mukansanga ser una árbitra se traduce en reconocer el esfuerzo de otras mujeres en el fútbol y una muestra de esperanza para las niñas del presente: «Este año en la Copa Mundial Masculina las niñas podrán ver a las árbitras en el campo por primera vez. En la Copa Mundial Femenina del próximo año, habrá otra oportunidad de ver fuertes modelos femeninos a seguir. Las niñas realmente necesitan seguir soñando y trabajar duro porque las puertas están abiertas».

«Vengas de donde vengas, no te sientas tímida. No te sientas deprimida. No dejes que nadie diga que nunca llegarás allí. Lo harás, porque es lo que quieres ser. Hoy, estoy aquí, y nunca pensé que lo haría. Significa que tú también puedes tener eso. Sigue trabajando duro, sigue tus sueños, concéntrate en lo que quieres ser, porque el futuro es brillante. Lo que quieras ser, lo serás», expresó a Sports cuando se le preguntó sobre su papel en Qatar.

Karen Díaz Medina: de México a Qatar 2022

A Karen Díaz Medina siempre le gustó el fútbol. Sin embargo, su primer encuentro con el arbitraje se dio de forma inesperada: mientras atendía la cafetería donde trabajaba, el administrador de una liga de fútbol seven le preguntó si quería arbitrar un partido porque el réferi no llegó: «(…) le dije que sí. Me gustó y (…) me pagaron por hacer algo que disfrutaba mucho. A partir de ese momento me asignaron más juegos cada semana y con el dinero ganado pude pagar la universidad».

Actualmente, Díaz Medina tiene 37 años, es ingeniera agronómica y árbitra asistente FIFA con 12 años de experiencia. En 2009 debutó como profesional, pero no fue sino hasta 2016 que llegó a la Liga Mexicana de Fútbol.

En la década de los 2000, cuando inició su proceso de formación como árbitra, Karen se enfrentó a la inexistencia de ligas de fútbol femenino profesional en México. Era complicado encontrar jugadoras y también árbitros mujeres, y eso la llevó a enfrentarse a comentarios machistas.

«Salí llorando de varios partidos amateur y, en el momento, decía: ‘¿Qué carajos estoy haciendo?’, pero a la hora pensaba que esto me tenía que dar gasolina para seguir adelante y después, a ese jugador que me estaba gritando, yo siempre le decía en mi mente: ‘Me va a ver en la televisión y se va a tragar lo que me está diciendo’», comentó al medio Columna Digital en 2017.

Entre sus logros internacionales cuenta haber sido réferi en los Juegos Centroamericanos Barranquilla 2018; en el Premundial Sub-20 de la Concacaf 2018 y en el Premundial Sub-17 de la Concacaf 2019.

Antes de que se supiera que sería parte de los árbitros asistentes de Qatar 2022, Díaz Medina consiguió el título de la primera mujer mexicana que participa en un Premundial varonil de la Concacaf.

En una entrevista con la Concacaf en 2020, Karen envió un mensaje a las niñas que aman este deporte y quieren ser árbitras: «Date el máximo en cada juego, en cada entrenamiento, en cada aula. Además, (mantente) abierta a las críticas y consejos de quienes te rodean y nunca te comparas con nadie más, cada mujer es única, cada árbitro tiene características únicas que la hacen especial. Confía en que tu camino siempre será diferente al de los demás porque hay momentos que tendrás que vivir para aprender de ellos».

Neuza Back, la brasilera vuelve a Qatar

Neuza Back es una árbitra brasilera de 37 años de edad que desde su niñez se interesó por los deportes. Sentía afinidad por todas las disciplinas y cuando le tocó elegir una carrera universitaria, Educación Física se convirtió en su primera opción. El fútbol fue parte de su entorno, jugaba con sus amigos y familiares, pero no fue hasta el año 2005 que el arbitraje se volvió su cotidianidad.

En 2008, Back hizo su debut en el fútbol profesional y en 2014 se convirtió en árbitro FIFA oficial. En distintas entrevistas, la brasilera ha dicho que su entrada al arbitraje fue un choque con un universo dominado por hombres, pero eso no la paralizó.

«Cuando paso por una situación más comprometedora, donde el prejuicio se presenta de una forma velada, con chistes de mal gusto o hasta miradas, solamente pienso conmigo misma que lo que alguien piensa o habla de mí no me define (…) no es que eso no me lastime, pero necesito encontrar una forma de (…) no quedarme sintiéndome una víctima», dijo a la agencia EFE.

Neuza Back ha sido árbitro de los partidos de fútbol de los Juegos Olímplicos de Río de Janeiro 2016; en 2018 arbitró partidos de la Copa América Femenina de Chile y la CONMEBOL Libertadores Femenina; en 2019 supervisó partidos de la Copa de Brasil y la Copa Mundial Femenina; en 2020 pitó la Copa Sudamerica; y en 2021 fue parte del trío de mujeres que dirigió partidos del Mundial de Clubes de Catar.

La experiencia ha hecho a Neuza Back confirmar una realidad: «El prejuicio está más presente en el fútbol aficionado, no tanto en el profesional, pero lo que necesitamos hacer es un buen trabajo, tomar las decisiones acertadas dentro de la cancha y todo sale bien».

Además es clara en algo: «No me gustan los rótulos, espero que todas las personas que tengan capacidad puedan desempeñar las funciones que quisiesen, independiente de clase, género, color y eso incluye que nosotras las mujeres podamos estar en el arbitraje en los partidos a los que nuestra capacidad nos pueda llevar (…) Que no sea por ser mujeres, pero sí por ser un árbitro con calidad para darle al fútbol el desarrollo que este gran deporte merece».

Kathryn Nesbitt, la química del arbitraje

Kathryn Nesbitt tiene 34 años, es analista química, profesora y una de las árbitras asistentes más importantes de su país, Estados Unidos. Se involucró con el arbitraje futbolístico a los 14 años, luego de asistir a un campamento de verano donde se dio cuenta de que ese papel la mantendría activa física y mentalmente.

«Claramente, eso era más un pasatiempo en ese momento (…) así que se ha convertido en una carrera en los últimos 20 años», dijo a la FIFA en una entrevista.

Debutó profesionalmente en el año 2013, en el partido inaugural de la National Women’s Soccer League (NWSL) y en 2020 alcanzó el título de «árbitro asistente del año» por parte de la Major League Soccer, el sistema de ligas de fútbol de Estados Unidos y Canadá.

Nesbitt se ha caracterizado por ser una árbitra analítica: «Estás constantemente tomando decisiones y no siempre son en blanco y negro (…) un escenario de fútbol no volverá a suceder exactamente de la misma manera. El juego siempre está cambiando. Mi función principal como árbitro asistente es la regla del fuera de juego, y eso no siempre es tan blanco o negro como a veces parece”.

La árbitra estadounidense ha participado en la Copa Mundial Femenina Sub-17 de la FIFA (2016); Campeonato Femenino Sub-20 de Concacaf y la Copa Mundial Femenina Sub-20 de la FIFA (2018), la Copa Mundial Femenina de la FIFA (2019), las clasificatorias Olímpicas Femeninas de Concacaf; Copa MLS, Final de la Liga Concacaf Scotiabank, y Copa de Oro Concacaf (2020).

Kathryn es sincera cuando se le pregunta sobre su aprendizaje como árbitra: «Lo más importante que me ha enseñado es cómo sacar lo positivo de una situación y aplicarlo en muchas áreas. Me desempeño mejor cuando estoy más feliz y más positivo y aprovecho las oportunidades increíbles y no tomo nada a cambio».

Nesbitt es tímida al hablar sobre el impacto de su papel en el arbitraje de fútbol: «Me gusta pensar que hay algunas árbitras que me admiran. Tengo muchas esperanzas de estar dando un buen ejemplo y emanando cualidades que otros oficiales esperan lograr algún día».

A pocos días del primer pitazo

El próximo 20 de noviembre inicia el Mundial y cada una de estas mujeres, junto a sus compañeros, ya están en Qatar para entrenar y dirigir sus partidos correspondientes. Todavía no hay información sobre cuáles les asignaron, pero la preparación ha sido intensa. Hasta hace pocas semanas, varias de ellas dirigieron otros campeonatos.

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