Yangel Herrera: “Estoy listo para asumir la responsabilidad que tengo en la Selección"

Desde que comenzara a vestir los colores de la selección nacional de Venezuela, con 15 años, quienes hemos seguido la trayectoria de Yangel Herrera coincidíamos en que su futuro sería el de un futbolista diferente en el rango de los habituales en nuestro país. Ha cumplido paso a paso cada objetivo, cada nivel, hasta llegar a consolidarse en el fútbol europeo.

Esa consolidación le ha costado más de lo esperado. Las continuas lesiones, los retardos en las cesiones que hacía el dueño de su ficha, el Manchester City, y mucha incertidumbre, han afectado la carrera de un futbolista del que muchos esperamos sea el primero en asentarse en un club élite mundial. Esa expectativa tan alta, parece haberse demorado. Sin embargo, a los 25 años, Yangel encontró la estabilidad que tanto necesitaba.

El Girona, su último club a préstamo, ha decidido comprarlo. Huesca, Granada y Espanyol fueron los españoles que lo tuvieron también a préstamo por el Manchester City y ha sido el equipo catalán quien se arriesgara en adquirirle en propiedad. Un contrato por cuatro años es un espaldarazo de confianza en su talento y el chamo nacido en La Guaira lo ve como algo sumamente positivo.

Esfuerzo por un venezolano

“Es un buen movimiento”, dice Herrera. “Aquí me puedo afianzar en un proyecto por largo tiempo, lo que me brinda la estabilidad que necesitaba. Nunca pude establecerme en el Manchester City durante siete años, siempre se demoraba mi futuro inmediato. Voy a poder comenzar una pretemporada desde cero, cosa que nunca había hecho”, revela el mediocampista que apenas pudo disputar 20 partidos la campaña pasada con el Girona por continuas lesiones.

El no haber podido consolidarse en el equipo inglés no es una desilusión para él. Al contrario, valora una enormidad su paso por el City Group: “Me trataron muy bien. Siempre han estado cerca, pendientes de mí. Con ellos he crecido como jugador y persona, no puedo estar sino agradecido con ellos”, revela quien fue adquirido desde Atlético Venezuela hace siete años, en uno de los fichajes más notables de la historia del fútbol venezolano. “No tengo ninguna espinita con ellos. Quiero sentar mis bases en el Girona y retomar mi nivel, sin descartar nunca volver al Manchester City”, remata.

Las continuas lesiones han sido el lunar en la carrera de Yangel y las que han afectado su desarrollo profesional. Cada vez que pasa por un gran momento, le aqueja una lesión que trunca su buena continuidad. La última campaña fue así, hasta tres veces tuvo que estar fuera de los terrenos por esa causa. ¿A qué atribuye él esa fragilidad? “He tenido muy poco tiempo libre desde muy joven”, revela el futbolista que no ha parado desde los 15 años, edad en la que inició su periplo por las selecciones nacional.

“El cúmulo de desgaste y el hecho que nunca pueda comenzar una pretemporada desde cero, me ha pasado factura”, razona. “Son pequeñas lesiones que te hacen perder el ritmo y cuando estoy en mi mejor forma, llegan y se me hace difícil retomar el nivel”, argumenta como causas el volante que ha tenido que ausentarse no solo de sus clubes, sino también de la Selección en reiterados momentos por las lesiones.

La confianza de los técnicos

Michel, su técnico en Girona, le valora una enormidad. Siempre que ha podido lo ha tomado en cuenta por su versatilidad tanto para recuperar balones como para acompañar le juego cerca del área rival. “Él ha hecho todo para que el club adquiera mi ficha. El equipo no escatimó esfuerzo para hacerme parte del proyecto y yo no puedo sino agradecer tanta confianza. No tuve una buena temporada y sin embargo confían en mí. Ahora debo retribuir esa confianza”, asegura.

Así como el técnico vallecano ha influido en que el Girona lo adquiera en propiedad por cuatro años, en la Selección de Venezuela el cuerpo técnico de Fernando “Bocha” Batista ha confiado a cercanos la importancia que tiene el mediocampista en los objetivos planteados de cara al próximo Mundial: está llamado a ser el líder del combinado nacional y así como se lo han dejado saber, él lo asume: “Ya estoy listo para asumir la responsabilidad que tengo en la Selección”, afirma.

“Tuve la oportunidad de hablar con Batista cuando estuvo aquí en Girona y en la concentración en Estados Unidos. Yo estoy para dar mi grano de arena”, revela Yangel, quien rehúsa considerarse el hombre que haga que ya Tomás Rincón no sea un indiscutible titular en el once de Venezuela: “Gracias a Tomás yo he crecido en la Selección. Él me ha mostrado cómo ser un líder natural. Yo siempre busco aprender cómo lo hace. Tomás sigue siendo indispensable, no tenemos un líder tan natural como él”, explica.

Llegó la calma en la Selección

Sobre la directiva de la FVF y el entorno generado alrededor de la Selección desde las acciones generadas por el cuerpo federativo, Yangel siente que se respira un clima de tranquilidad: “Hay muy buen ambiente, más tranquilidad. Hemos dejado atrás los momentos críticos que no eran deportivos en la Selección. La Federación está trabajando muy bien, nosotros nos damos cuenta. No habíamos tenido la oportunidad de comenzar una eliminatoria al mundial tranquilamente por todos los problemas que había y ahora arrancamos con esa tranquilidad necesaria. Ahora nos toca a nosotros responder”, dice.

En lo deportivo, cree que la abrupta salida de José Pékerman no ha modificado en nada lo que se venía trabajando: “Todo ha sido normal dentro en lo futbolístico. A Batista no le ha pesado la responsabilidad de hacerse cargo de la Selección porque él era el que hacía todos los trabajos, el que manejaba al grupo, el que estaba en el día a día”, asevera el volante.

Consultado sobre los casos relacionados a la indisciplina que han afectado la trayectoria profesional de algunos futbolistas venezolanos de su generación, Yangel atribuye a la disciplina el factor diferenciador para llegar a ser un futbolista consolidado. “La disciplina juega un papel fundamental en mi vida. Es un valor que te deja alcanzar grandes cosas, porque el talento no basta. Es la disciplina lo que te va a diferenciar del resto”, asegura, atribuyendo además a la familia esa tranquilidad y respaldo necesario para concentrarse en lo futbolístico: “Mi esposa y mi hija me han dado estabilidad, tranquilidad. He cambiado la forma de ver la vida”, finaliza Yangel Herrera.

Considerado como el futbolista prototipo del futuro venezolano, ha Yangel las lesiones le han privado de la continuidad necesaria para alcanzar el rango de ser indiscutible donde va. Sin embargo, las palabras de Batista y la confianza de Michel, hablan por sí solos del valor que conserva este grandioso profesional de 25 años. La Liga lo espera y el mundial de 2026 también.