Frecuentes ruedas de negocios con empresarios privados y gremios, encuentros con funcionarios del gobierno de Venezuela, estudios de mercado y acceso a la información, son parte de la estrategia de promoción comercial que lleva a cabo la diplomacia de India en Venezuela, en busca de inversiones bilaterales en varios sectores.
India, una de las grandes potencias emergentes del mundo, tiene especial interés en repotenciar sus relaciones económicas, comerciales y culturales con Venezuela, más allá del petróleo, por lo que está promoviendo nuevas alianzas con empresarios privados y entes del Estado.
Es lo que manifiestan sus autoridades diplomáticas, que en los últimos meses han redoblado sus esfuerzos por divulgar más la oferta exportable india, inversiones potenciales, y las posibles áreas de oportunidad para los negocios complementarios.
En los nueve meses transcurridos entre abril de 2022 y enero de 2023 el comercio total entre los dos países sumó $355 millones, de los cuales $202 millones correspondieron a importaciones indias desde Venezuela, básicamente hidrocarburos, y $152 millones a ventas de India a este país que es después de Brasil su segundo socio más importante en América del Sur, destacó este martes 28 de marzo en una rueda de negocios el embajador de India en Caracas, Abhishek Singh, en el cargo desde el 3 de agosto de 2020.
Singh menciona algunas de mayor interés: energía y petróleo, farmacéutica, agricultura, infraestructura, vehículos ligeros, alimentos y hasta productos de medicina ayurvédica.
Parte de la estrategia es promocionar la exportación de alimentos desde India, dice el diplomático. Recuerda que poco después de su independencia el país estaba sumido en una gran pobreza y graciasa las decisiones acertadas en las políticas de Estado, tomadas por sus líderes nacionales, pudo solventar esa situación y convertirse en uno de los principales exportadores de bienes agrícolas de talla mundial.
El embajador explica que visitó los estados venezolanos de Portuguesa, Guárico y Barinas y también pudo constatar el gran potencial de Venezuela para producir sus propios productos.
También visitó los puertos de Cabello, Guanta, y La Guairá, he identifica oportunidades de negocios y asociaciones potenciales en infraestructura y electricidad, áreas en las que se destacan empresas de India.
«Ningún país puede desarrollarse sin una infraestructura adecuada», dijo en su intervención ante los empresarios locales, al ofrecer la ayuda y colaboración de empresas indias especializadas en el manejo de puertos y otras instalaciones cruciales.
India también quiere ofrecer sus motonetas «tuk tuk», vehículos ligeros baratos, ecoamigables y diseñados para un público de recursos limitados, pero que son muy versátiles para transporte de mercancías y personas.
La embajada ha encargado varios estudios acerca del mercado venezolano de vehículos, de agricultura, de petróleo y energía, hierro y acero, textil, farmacéutico y maquinarias, entre otros. Todos están disponibles de manera gratuita en la página de la Embajada de India en Venezuela, destacó Singh.
Las importaciones venezolanas de productos farmacéuticos de India totalizaron $90,43 millones en el año fiscal 2022/2023, hasta enero pasado, con un crecimiento de 7,65% respecto al año anterior, destacó el embajador en su intervención.
En hierro y acero para la construcción las exportaciones han crecido en 37,52%, hasta un total de $62,21 millones en el período, destacó.
«La agricultura es uno de los potenciales que pueden explotarse entre ambas naciones, con la exportación de granos cosechados en Venezuela y viceversa».
Embajador Singh
El intercambio comercial entre India y Venezuela está muy lejos de los $6.396 millones negociados entre 2019 y 2020, de los cuales $6.057 millones fueron petróleo crudo venezolano enviado a refinerías del gigante asiático.
«La estrategia es diversificar la canasta de productos entre ambos países», dijo el embajador al mencionar también la posibilidad de importar más productos de Venezuela como café y cacao hacia India, donde hay 550 millones de personas en clase media.
Las ventas venezolanas se desplomaron hasta $714 millones entre 2020 y 21, para caer aún más a tan solo $89 millones entre 2021-2022.
La razón fundamental de esa bajada fue el cumplimiento por parte de empresas indias de las restricciones internacionales al petróleo venezolano, derivadas de las sanciones aplicadas por el gobierno de Estados Unidos al régimen que encabeza Nicolás Maduro.
Otras fuentes con conocimiento del tema mencionaron a El Estímulo que India ha estado negociando y haciendo lobby frente al gobierno de Joe Biden para lograr licencias similares a la concedida a la trasnacional Chevron y así volver a llevar petróleo venezolano a su territorio.
En el sector energético, la principal empresa india que opera en Venezuela es NGC Videsh Ltd. (OVL), que maneja dos proyectos en la Faja Petrolífera del Orinoco, área de Zuata, a través de la compañía mixta «Petrolera Indovenezolana SA».
Esa firma está bajo el control administrativo del ministerio de Petróleo y Gas Natural y es subsidiaria de propiedad total y el brazo internacional de Oil and Natural gas Corporation Limited (ONGC), la compañía nacional de petróleo de la India.
Al abogar por nuevas nuevas estrategias, el embajador destacó que «el sector petrolero sigue siendo importante pero es importante diversificarse».
«El comercio es un proceso de dos vías, y no puede depender solo de un producto», dijo Singh, al destacar cómo esta relación comercial ha estado dominada por el petróleo.
Las cifras reales, «son como un análisis de sangre que refleja la salud de las personas», dijo al recalcar la amplia posibilidad de mejorar las relaciones comerciales bilaterales y exportar más productos de origen agrícola y farmacéuticos hacia Venezuela.
«La idea es mejor, y superar los retos que hay en este momento en el país», dijo.
«La india es considerada como la farmacia del mundo», dijo sobre el vigor de la industria farmacéutica de su país, capaz de vender fórmulas sofisticadas para combatir enfermedades críticas como el cáncer. En Venezuela, un tercio de las medicinas en el mercado ya provienen de India, destacó.
El diplomático y su equipo han sido constantes y sistemáticos en esta promoción de los negocios bilaterales.
«El comercio es siempre un proceso bidireccional.Mientras estamos poniendo especial énfasis en aumentar las exportaciones indias a Venezuela, también estamos deseando recibir productos venezolanos únicos en la India. La Embajada de la India y su Ala Comercial está dispuesta a facilitar estos procesos y ayudar a aquellos que quieran contribuir en este importante aspecto de nuestras relaciones bilaterales», dijo en enero pasado, en una recepción en Caracas para celebrar el 74 aniversario de la república India.
India es un país complejo. Según la data del Banco Mundial, su Producto Interno Bruto total (suma del tamaño de la economía medida por su producción de bienes y servicios) ya es de 3,4 billones de dólares (billones en español, es decir, 3,4 millones de millones), lo que la ubica como la sexta economía más grande del mundo.
En términos relativos, hay que decir que el PIB de la economía venezolana con suerte este año llegará a unos $86.000 millones, según proyecciones del FMI.
Es decir, la economía de India es unas 40 veces más grande que la venezolana.
Pero India es un país de enormes contrastes y desigualdades sociales (algo en común con Venezuela, según analistas). Con su vasto territorio de 3,287 millones de kilómetros cuadrados, es el séptimo mayor del mundo en superficie. Pese a que en su milenaria historia ha vivido episodios de hambruna (incluyendo varias en el siglo 19 y 20, bajo el Imperio Británico) hoy es una potencia agrícola.
«En los últimos 50años, la India ha pasado de depender de la ayuda alimentaria a convertirse en un constante exportador neto de alimentos», destaca por su parte el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA).
«Los cereales comestibles y las semillas oleaginosas siguen representando cerca del 80% de la superficie cultivada, aunque la India ha diversificado su producción con productos básicos de alto valor y se ha convertido en el mayor productor mundial de leche, legumbres, productos hortícolas y ganado, y en el principal exportador de camarones y especias del mundo», agrega FIDA en un informe.
Aunque su esperanza de vida al nacer es de apenas 70 años, en India la tasa de pobreza absoluta por ingreso es de 10% de la población total, (según los datos más recientes del Banco Mundial, de 2019, antes de que la pandemia de covid también devastara muchos logros de ése y de otros países en ese terreno).
La referencia de 1,90 dólares de ingreso diario por habitante traza la línea de pobreza extrema, según la convención del Banco Mundial.
Esa tasa de pobreza era de 32,9% una década antes, en 2009.
«En India, unos415 millones de personas abandonaron la pobreza multidimensional en un período de 15 años«, señala un informe de la ONU. Pero aún así hay todavía 270 millones de personas pobres en el país, el mayor número en un solo país o zona en el mundo.
Según el más reciente informe de perspectivas de la economía mundial (World Economic Outlook) del Fondo Monetario Internacional, en India el ritmo del crecimiento disminuyó desde 6,8% en 2022 a 6,1% en 2023, para se espera que repuntará a 6,8% en 2024, «con una demanda interna resiliente pese a que soplan vientos externos en contra».
Con su población de 1.400 millones de habitantes, se estima que este mes de abril India ya haya desplazado a China como el país más populoso del mundo, y de hecho es desde hace décadas la democracia más populosa.
Con el propósito de promover el potencial económico de su país, Singh y su equipo han organizado en los últimos meses unos 100 acercamientos y encuentros de negocios con empresarios y gremios, así como reuniones técnicas de alto y medio nivel con influyentes autoridades del gobierno de Nicolás Maduro y de algunos estados, como Miranda.
El diplomático destacó los logros culturales, económicos, políticos y científicos y tecnológicos de India, que en 2022 celebró los 75 años de su independencia respecto al imperio británico y ya prepara la celebración de sus cien años como país libre.
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En enero, Washington prohibió el uso del dólar para pagar ventas de petróleo hechas por la estatal venezolana Pdvsa o sus subsidiarias, una medida que busca cortar los flujos de efectivo y aumentar la presión sobre Nicolás Maduro, cuya reelección en 2018 fue considerada una farsa por Estados Unidos y su permanencia en el cargo supone una “usurpación del poder”.
La principal refinería de petróleo privada de India, Reliance Industries, reanudó sus importaciones de crudo de Venezuela en estos días y las pagará con exportaciones de diésel, en una especie de trueque que respeta las sanciones estadounidenses contra el país sudamericano.
