Para financiar los $10.500 millones que canceló el año pasado por intereses y vencimientos de títulos soberanos y de Pdvsa, el país recortó importaciones, redujo en un tercio sus ahorros en el Fondo Monetario Internacional (FMI) y concretó varios canjes de sus reservas en oro, reseñó Reuters.
Según la agencia de noticias, el gobierno debe cancelar $1.500 millones el próximo viernes y para cumplir con esta obligación profundizó desde diciembre aún más los recortes de dólares que inyecta a la economía local, sin importarle el deterioro de las industrias y la escasez de productos esenciales.
Analistas y fuentes del Estado, creen que el sacrificio tendrá un breve efecto porque las arcas públicas se están secando: solo en 2015 la cantidad de divisas que entró a Venezuela se desplomó 66%.
«El problema no es febrero. Preocupan los pagos de octubre, noviembre», dijo a Reuters una fuente al tanto de las conversaciones del equipo económico de Maduro que pidió el anonimato.
Para leer el texto original, haga click aquí.