Vecinos del populoso sector el 23 de Enero, en el oeste de Caracas, denuncian que algunos grupos de la zona se están lucrando con la reventa de productos básicos que el gobierno trata de llevar a precios subsidiados a la población de menores recursos.
“Que si he sido beneficiado por la bolsa solidaria de comida que distribuyen los CLAP, solo en dos oportunidades, pero aquí en el 23 de Enero, hay algunos lugares como Cristo Rey y Sierra Maestra en donde venden la bolsa con sobreprecio a las personas interesadas, cuya irregularidad compete a los integrantes de algunos consejos comunales y comunas, así como algunas personas que tienen relaciones con los CLAP”.
La denuncia fue realizada por un vecino que solicitó mantener su nombre en el anonimato. Señaló que el bloque donde reside la bolsa solidaria de alimentos ha sido entregada en dos oportunidades “pero con muy pocos productos. La primera vez nos vendieron un kilo de leche, un kilo de pasta, un kilo de arroz, un litro de aceite y una mantequilla. En la segunda entrega solo nos dieron un kilo de arroz, una pasta y una harina de maíz, no entiendo cómo las autoridades pueden pensar que con estos productos se mantendrá mi familia por un mes”.
Otra de las vecinas del bloque en la zona F, aseguró que le han ofrecido productos de primera necesidad con sobreprecio. “La bolsa que hemos recibido no tiene suficientes productos, nuestros vecinos han realizado un gran esfuerzo para organizar el CLAP, pero nos advierten que no llegan muchos productos, nunca nos ofrecen leche, café, azúcar, pero en algunos sectores de la parroquia ofrecen estos productos a precios de bachaqueo (reventa en el mercado negro)”.
Estas no son las únicas denuncias que se tienen de reventa de productos en la parroquia 23 de Enero, muchas señalan a los integrantes de los colectivos como aliados de las mafias de bachaqueros.
– Cero bachaqueo –
Armando Otaiza es el coordinador del Colectivo Tres Raíces que hace vida en el 23 de Enero. Asegura que no han permitido la instalación de bachaqueros en ninguna zona de la parroquia.
Señaló que este colectivo se formó en el seno del poder popular, articulado con la comunidad, en apoyo al plan de la patria presentado por el fallecido presidente Hugo Chávez. Desde hace tres años se han enfocado en desarrollar programas socioproductivos y ahora con la guerra económica, ayudan a distribuir los alimentos, dice Otaiza.
“Le hemos hecho frente a los bachaqueros, junto a los funcionarios de la policía y Guardia Nacional, así como con nuestras brigadas internas de seguridad, no permitimos la reventa de productos, aquí nunca verán un puesto callejero comercializando los alimentos de primera necesidad. Nos mantenemos en contacto con los CLAP y supervisamos la distribución de las bolsas de alimentos, de forma equitativa”, aseguró Otaiza.
Señaló que en cada una de las comunidades en donde se llevan a cabo los operativos de distribución, los líderes vecinales levantan un acta, la cual es firmada por cada una de las personas beneficiada.
Informó que en el ámbito territorial en el cual trabaja el Colectivo Tres Raíces, existen dos mercales tipo A, así como tres bodegas solidarias y tres centros de acopio.
“Actualmente logramos un acuerdo con la distribuidora de alimentos Doña Concha, ubicada en Catia y en combinación con los CLAP, estamos supervisando la entrega de las bolsas solidarias, pero hay grupos interesados en distorsionar nuestro trabajo”, dijo Otaiza.
Señaló que además de supervisar la distribución de comida, también han instalado dos casas de cultivos, han iniciado la cría de pollos para luego venderlos en su comunidad a precios solidarios y que actualmente instalan una fábrica de masa de maíz pilado, para sustituir el uso de la harina de maíz comercial.
"Usted me garantiza, en el transcurso de las semanas y meses por venir, la mayor estabilidad para el abastecimiento y precios equilibrados y razonables en el mercado nacional para el pueblo de Venezuela", dijo Maduro a la ministra de Comercio Nacional, Eneida Laya
Empresarios conectados con el gobierno de Nicolás Maduro comenzaron a exportar ganado vivo en barcos, para mataderos del Oriente Medio. Mientras, el consumo interno de carnes y otras proteínas se derrumba estrepitosamente porque la familia promedio venezolana no tiene como comprar estos alimentos y aumentan el hambre y la desnutrición. Son más contradicciones del socialismo chavista.
En un solo fin de semana, los precios de los productos del kit de higiene escalaron 78% en dólares. Esta es una situación esperada, pero muy dura para el bolsillo ya golpeado del venezolano
