A juicio del economista jefe del banco de inversión Torino Capital, Francisco Rodríguez, alrededor del 70% de los tenedores de bonos participarán en el canje voluntario de bonos de Pdvsa. Resalta que de no ser así o que tan solo un tercio de ellos aceptara la oferta «sería un fracaso».
Sostiene que de lo que se conoce hasta ahora sobre las condiciones del canje de bonos de los Pdvsa 2016 y 2017, resulta atractivo para los inversionistas.
«En este tipo de operación es razonable esperar que haya una participación de más de 70%. Como estos bonos ofrecen un rendimiento atractivo y los inversionistas tienen la certeza de que será exitosa, creen que no habrá riesgo de default y decidirán participar. También por ser un canje voluntario algunos van a decidir mantener sus papeles hasta el vencimiento».
Varios analistas han criticado la decisión de Petróleos de Venezuela de ofrecer como garantía colateral, un paquete de acciones de la refinería Citgo ubicada en Estados Unidos; sobre este tema, Rodríguez considera que fue una «decisión más que razonable, de una compañía que decidió no caer en default. Utilizar las acciones de Citgo es una manera de bajar el costo del endeudamiento».
Explica que esta idea ofrece seguridad a los inversionistas porque es un activo muy importante y en el caso de alguna quiebra de la empresa, siempre los acreedores serán los primeros en ser compensados con la venta de los activos.
«Habrán muchas preguntas sobre cuál es el valor de Citgo y efectivamente se deben valorar sus activos y pasivos. Debemos recordar que es una empresa que tiene muchas deudas, pero que es posible que parte de ellas sean canceladas antes de la operación de canje. Hay estimaciones sobre la valoración de Citgo que van desde los 2.000 millones a 8.000 millones de dólares y sería más que suficiente para garantizar este nuevo endeudamiento».
Rodríguez indicó que alrededor de 30% de los bonos de Pdvsa se encuentra en manos de instituciones públicas venezolanas. Resalta que si sólo participara en el canje un poco más de este porcentaje «sería un fracaso», por lo que el país tendría que utilizar otros de sus activos menos líquidos para financiar lo que no logre canjear.
Calcula que para los próximos 15 meses Venezuela obtendría un ahorro de unos $5.250 millones, de lograr ser exitoso el canje; de lo contrario con una participación de 33% deberá honrar un monto aproximado de $4.000 millones.
«En caso de no lograrse canjear todos los bonos, el compromiso restante de pago podrá financiarse con reservas internacionales y con dinero de Pdvsa, tengo entendido que ha acumulado fondos para atender algunos de estos vencimientos. La petrolera sigue vendiendo, ha generado 2.000 millones de dólares en exportaciones mensuales y tiene capacidad para dirigir una parte de estas exportaciones al servicio de deuda».