Según reporta el periódico The Gleaner en su versión digital, la medida fue anunciada en la víspera por la ministra de Relaciones Exteriores y Comercio Exterior, la también Senadora Kamina Johnson Smith, y será ejecutada a través de una legislación especial en el Parlamento.
«No será una legislación general, permitirá la adquisición de derechos de propiedad, aparte de la tierra, más allá del alcance de la transferencia de la propiedad del 49 por ciento de las acciones en PetroJam, que actualmente posee PDV Caribe», dijo Johnson Smith, citada por The Gleaner.
PDV Caribe, una filial de Petróleos de Venezuela S.A. y la Petroleum Corporation of Jamaica (PCJ) firmaron acuerdos para crear de empresa conjunta en agosto de 2006. El entonces presidente Hugo Chávez además se comprometió a entregar a Jamaica 23.000 barriles por día de petróleo en condiciones preferenciales.
En febrero de 2007 ambos gobiernos alcanzaron otro acuerdo para la venta del 49% de las acciones de PetroJam a la estatal venezolana por $63,5 millones.
Sobre el papel, el acuerdo se proponía modernizar y expandir la capacidad de la refinería para hacerla más competitiva y atender la demanda del mercado local jamaiquino, a la vez de generar excedentes para la exportación.
Johnson Smith dijo que estos objetivos no se han cumplido, lo que representa un riesgo para la economía de la isla.
En junio pasado el ministro de Energía, Andrew Wheatley, dijo que su país está ansioso por finalizar con la propiedad PDVSA en la firma jamaiquina.
Explicó que la compañía ha tenido dificultades de negocios debido a la propiedad parcial de Venezuela, porque el país gobernado por los chavistas enfrenta las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos a Nicolás Maduro y su entorno más cercano.
“¡No! no le hemos dado la espalda a Venezuela. Es lo que respecta a nuestra propia seguridad energética, donde tenemos una responsabilidad para con nuestros ciudadanos. La situación geopolítica actual nos pone en peligro. Estamos sintiendo los efectos de las sanciones impuestas al gobierno de Venezuela el año pasado, porque nos ha causado dificultades para realizar transacciones comerciales“, dijo Wheatley a The Gleaner.
En mayo de 2016 el primer ministro Andrew Holness y los miembros de su gabinete se reunieron con el venezolano Nicolás Maduro, y el presidente venezolano se comprometió a mejorar Petrojam.
La ministra y senadora Johnson Smith dijo en una conferencia de prensa este martes 8 que el gabinete había determinado que el Parlamento tomará las medidas decisivas, en breve, “para asegurar la propiedad de la participación de PDV Caribe en la refinería de petróleo estatal”, explica The Gleaner.
Pero el portavoz de la oposición sobre temas de Energía, Phillip Paulwell, dejó en claro que ellos están está en contra de lo que han calificado como una «adquisición hostil» de las acciones de Pdvsa en PetroJam.
Paulwell argumentó que la medida fue particularmente apresurada, dado que un comité designado en julio del año pasado para analizar el futuro de Petrojam tiene hasta mayo de 2019 para informar sus conclusiones y recomendaciones.
«La expropiación causará efectos dominantes en la comunidad de inversionistas locales e internacionales durante algún tiempo», afirmó Paulwell.
«Este enfoque hostil no es característico de Jamaica y, de hecho, puede ser perjudicial para nuestra capacidad futura de negociación con otros inversores extranjeros», dijo.
«La expropiación de la propiedad del inversionista siempre debe ser un último recurso, justificable demostrablemente en una sociedad libre y democrática, y solo después de haber agotado todas las vías razonables para una solución amistosa», agregó.
Johnson Smith había señalado anteriormente que se habían hecho ofertas al gobierno venezolano por sus acciones de Petrojam, la última de ellas en Caracas en marzo de 2018. Señaló que esta oferta aún no se había aceptado.
Aclaró que la decisión de recuperar las acciones de Petrojam no era de ninguna manera política, sino «puramente económica».
«Ha quedado claro que la prioridad compartida y el interés en la seguridad energética de Jamaica, que impulsó a PCJ (Petroleum Corporation of Jamaica) y PDVSA a trabajar juntos para operar y mejorar Petrojam, ya no existe», dijo Johnson Smith.
«Creemos que es desafortunado que hayamos llegado a este punto, pero también tenemos bastante claro que para prosperar y elevar al pueblo jamaicano, debemos garantizar nuestra seguridad energética», agregó Johnson Smith.
Mientras tanto, un funcionario de la Embajada de Venezuela describió el asunto como «delicado», que se está discutiendo en Caracas.
La refinería de destilación-reformación de Petrojam tiene capacidad para procesar 35.000 barriles por día de petróleo y producir diésel, gasolina, querosén, asfalto y residuales.
El proyecto de modernización suponía aumentar su capacidad a 50.000 bpd, con una inversión de $1.000 millones. La obra fue otorgada a la empresa estatal china Sinohydro Corporation Limited, filial de Power Construction Corporation de China, según datos de la época.