La empresa automotriz habría no solamente paralizado el servicio de comedor, el seguro de Hospitalización, Cirugía y Maternidad (HCM) y hasta el servicio funerario, sino que además no ha convocado al personal del área de mantenimiento al que llamaban eventualmente para trabajar, indicaron empleados que avizoran la situación como un mal presagio.
Henry Ospina, secretario de reclamos del sindicato de Fiat Chrysler Automobile (FCA), dijo que a los trabajadores de nómina diaria «se les ha negado” prácticamente el servicio de comedor y agregó que la empresa ha venido incumpliendo cláusulas del contrato colectivo de manera “sistemática y reiterada”.
Ospina indicó que el presidente de la compañía, Jhonny Wilfredo Trejo, tiene un doble discurso, pues por una parte expresa a instancias del gobierno que la ensambladora de vehículos va a continuar en Venezuela produciendo, “pero por otra parte aplica política de asfixia a los trabajadores”.
Asimismo lamentó el dirigente sindical que el salario que reciben semanalmente equivale a menos de un dólar lo que es insuficiente para asumir los gastos de la vida cotidiana en medio de una economía hiperinflacionaria.
“Nuevamente ha vuelto a FCA el pago de las prestaciones sociales o cajita feliz, volvieron a surgir los cauchos como parte de la cancelación. Ahora se le está ofreciendo a los trabajadores sus prestaciones más dos cauchos, del modelo de la camioneta Grand Cherokee y muchos de estos neumáticos ya están próximos a vencerse”, agregó el vocero sindical.
– Advierten a los concesionarios –
Ospina también consideró oportuno advertir a los concesionarios de vehículos sobre la situación por la que atraviesan y que ha plasmado el sindicato en una carta.
“Por eso para los directores de FCA es rentable que se produzca aunque sea una muy pequeña cantidad de unidades que venderán en miles de dólares y pagarán menos de un dólar semanalmente a los empleados”, dijo.
Rechazó de igual manera que la firma insista en señalar al sindicato como responsable de que no puedan dar cumplimiento al ensamblaje de carros previstos para los concesionarios.
“Esperamos que el día de mañana no se diga que los trabajadores son los que promueven la clausura de la empresa, por el contrario, somos los más preocupados de que la empresa pueda cerrar. No queremos que esto ocurra”, acotó.
En la correspondencia enviada a la Asociación de Concesionarios de Chrysler en el país, aseguran que la directiva de la compañía utiliza al sindicato “como justificación a sus incumplimientos con sus clientes directos”.
En este sentido consideran “que el presidente de esta empresa prefiere mentirles a explicarles las verdaderas razones” por las que no han podido ensamblar unidades que ya los concesionarios pagaron con la adquisición de los CKD que utilizan para armar los vehículos.
“El sindicato muy responsablemente y en el marco de la justicia, decidió presentar un petitorio para reclamar un conjunto de cláusulas de la convención colectiva incumplidas de forma continuada por la empresa, desde hace varias semanas”, refiere la carta a los concesionarios.
Aseveran además que tales peticiones han sido convertidas por la empresa en una confrontación “de desgaste, manipulación y chantaje”.
En varias ocasiones representantes del sindicato de la planta han señalado que no hay un cronograma oficial de producción para este año 2018, aunque tienen información de que el plan consiste en armar 30 carros modelo Forza y 35 camionetas Grand Cherokee. Durante el 2017, se ensamblaron 195 vehículos en la planta de Valencia.]]>