Espectáculos

Yordano ratificó su compromiso de vivir para cantarlo en un concierto memorable

Ante una audiencia multitudinaria y devota que plenó el Teatro Teresa Carreño, el cantautor venezolano alternó sus canciones de siempre con sus más recientes creaciones en un espectáculo sin desperdicio

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Yordano

Después de doce años sin presentarse en el Teresa Carreño, Yordano regresó al emblemático teatro capitalino para hacer un espectáculo que a lo largo de sus más de tres horas de duración, y ante una nutrida y entusiasta audiencia, estuvo lleno de buenos momentos, algunos ciertamente emotivos y todos provistos de la mejor música.

Un concierto en el cual hizo un vibrante repaso por su celebrada trayectoria de 40 años en la música, con sus canciones de siempre, aquellas que le dieron fama y popularidad, así como otras más recientes, que no hicieron más que ratificar su categoría de eminente cantautor.

La Sala Ríos Reyna, la misma en la cual debutó en 1987 con los temas de sus dos primeros discos, aquellos que marcarían su brillante y consistente camino a seguir profesionalmente, fue el escenario más que adecuado para que, tal y como lo destaca el escritor Héctor Torres en su nota del programa de mano, Yordano confirmara “su compromiso de vivir”.
De “Vivir para cantarlo”, como muy apropiadamente se denomina la gira que ahora realiza por varias ciudades de Venezuela y que comenzó en España y continuará en 2023 por otros países.

Concierto sin fisuras

La excelencia fue la tónica predominante en este concierto, que contó con el muy notable y poderoso respaldo de una banda, dirigida por el bajista Anderson Cordero y que incluyó dos guitarras, teclados, percusión y batería, que en ningún momento dejó de estar a la altura del compromiso asumido en esta velada, donde la buena música tuvo un rol estelar, remarcado además por los cuatro coristas y la sección de cuerdas de músicos de El Sistema, cuya participación puso de manifiesto uno de los segmentos más aplaudidos y aclamados de la noche.

Yordano
Memorable fue el espectáculo del cantautor. Foto cortesía César Chiquito

Y como si todo esto fuese poco, Yordano tuvo como invitados especialísimos a dos figuras que han sido fundamentales en su recorrido de cuatro décadas en los escenarios: la cantante Trina Medina y Carlos “Nené” Quintero, quien como percusionista sencillamente no tiene parangón en Venezuela. Con este cartel de estrellas no podía salir sino un espectáculo sin desperdicio y de un nivel supremo.

Compendio de momentos mágicos

En una entrevista que publicamos en El Estímulo en septiembre de 2019, Yordano rememoró, vía telefónica desde Nueva York (donde reside sometido al proceso de recuperación del trasplante de médula ósea que le practicaron hace siete años), el suceso de su primer disco, aquél que lo lanzó a la fama hace casi 40 años y dejó huella indeleble en el pop venezolano.

Allí aparecían canciones como “Manantial de corazón”, “Otra cara bonita”, “Aquel lugar secreto”, “Bailando tan cerca”, “Hoy vamos a salir” y “Ella se fue”, entre otras. Y también aludió a las del segundo álbum, títulos como “Perla negra”, “Triste historia” y “Días de junio”. Todas ellas, aparte de lo musical, ostentan una calidad indiscutible en sus letras, otro de sus sellos característicos.

Pero lo que le da relevancia y notoriedad a la carrera de este cantautor es que esto no se quedó allí, solo en un puñado de éxitos iniciales. Todo lo contrario, pues en las grabaciones que le siguieron estableció una coherente continuidad. “Siempre he estado, y continúo haciéndolo, en una búsqueda constante”, expresó entonces el cantautor, nacido en Roma pero con profundas raíces venezolanas.

Un público devoto y entusiasta plenó la Sala Ríos Reyna. Foto cortesía César Chiquito

“Es como tener una forma de vida, además de un oficio. No sabría hacer otra cosa, porque lo que me dio la universidad en arquitectura (su otra profesión) está también en los términos que yo uso en la estructura de mis canciones. Creo que hay un desarrollo, una continuidad. Es como un río, que está en el mismo sitio pero el agua que pasa nunca es la misma”.

Con la vista en los Grammy

Muestra de ello lo acabamos de ver en su más reciente concierto, con un armónico y ajustado balance de su obra conocida y la más reciente, provista de un personalísimo y reconocible estilo. Pero además vuelve también sobre lo ya andado, al indagar en la reinterpretación de sus canciones. Como lo ha hecho recientemente con “Besos en la lluvia”, que cantó en la parte final de su aclamada presentación, con una fervorosa respuesta del público que plenó la Sala Ríos Reyna.

“Es una canción que quería volver a grabar, para darle una segunda oportunidad y refrescarla”, manifestó en una conversación que sostuvimos con él, después de la rueda de prensa que ofreció en Caracas dos días antes de su espectáculo. Y nos dio lo que podría ser una primicia:

“En los Grammy, si grabo todas mis canciones nuevamente, pueden volver a ser consideradas, pues las toman como grabaciones nuevas. Muchas de mis canciones las he grabado en vivo. Y puedo hacer otro álbum así si el espectáculo del Teresa Carreño queda bien en sonido”, remarcó.

Yordano con la sección de cuerdas de músicos del Sistema. Foto cortesía César Chiquito

Galardonado el pasado 16 de noviembre en Las Vegas con el Grammy Latino a la excelencia musical, es evidente su intención de continuar dándole impulso a su carrera internacional, después del largo paréntesis que por motivos de salud tuvo que hacer.

-¿Cómo sigue tu recuperación?

-Todo ha ido bien. Debo acudir cada tres meses a control, pero han bajado las dosis de los medicamentos.

-¿Otros proyectos en lo inmediato?

-En 2023 grabaré un disco de canciones de otros autores, canciones que originalmente son en inglés y he versionado en español, como ya lo he hecho antes con los Rolling Stones y también con “No toques esa canción” (de Ahmet Ertegun y Betty Nelson, popularizada por Aretha Franklin). Tengo muchas canciones adaptadas por estrenar, versiones que he hecho toda mi vida de autores como Bob Dylan.

-¿A dónde seguirá internacionalmente tu gira “Vivir para cantarlo”?

-Cuando llegó la pandemia, yo tenía catorce fechas en Suramérica, que están pendientes: Panamá, Colombia, Ecuador, Perú, Chile y Argentina. Estamos intentando retomarlas y en eso andamos.

En cuanto a Venezuela, estuvo girando por el país, presentándose en Valencia y Barquisimeto.

-Tengo cuatro fechas más en Venezuela que se pospusieron por los deslaves y que haré en enero.

Destellos de un espectáculo memorable

Volviendo al espectáculo de Yordano en el TTC, destacamos algunos de los momentos más aplaudidos de la noche:

-El segmento con Trina Medina cantando “En un beso la vida”, “Por estas calles” y “Robando azules”. Y luego en “Manantial de corazón”, “Madera fina” y “Locos de amor”.

-La brillante, contundente y memorable descarga de percusión en “Bailando tan cerca”, donde se lucieron Denis Vilera, el baterista José Luis González y muy especialmente el Nené Quintero, quien una vez más dejó sentada su categoría como el mejor entre los mejores de Venezuela, con un lucimiento y dominio de su arte de esos que no se olvidan.

-La sección de cuerdas de El Sistema, exquisitamente lírica, acompañando a Yordano en “Todo el amor”, “Y así te vas” y “Azul”.

-El contagioso fin de fiesta con “Otra cara bonita” y todos los artistas en escena.

-Una frase: Yordano agradeciendo a los productores del concierto: José Luis Ventura y Jorge Redondo, así como a Yuri Bastidas: “Mi esposa, mi mánager y mi ángel de la guarda”.

Poética radiografía

“Desde aquel joven que escribió que ‘todavía me asombra un rayo de sol’ hasta este hombre maduro que confiesa que después de todo ‘ya no cargo mi andadura, la dejé con la amargura’, la poesía de Yordano pregona que en los pliegues del dolor y el desconcierto siempre anidará la redención. Son las reflexiones de un hombre que vive su tiempo y lo impregna de luz y magia. Y vive para cantarlo”.
Héctor Torres/ Escritor

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