El suceso se produjo la madrugada del domingo, cuando varios agentes de la oficina del sheriff del condado de Douglas, situado al sur de Denver, acudieron a un edificio de apartamentos en la localidad de Highlands Ranch para responder a una llamada que denunciaba una disputa doméstica.
«Durante la investigación, hubo disparos y múltiples agentes resultaron heridos», señaló la oficina del sheriff en un tuit.
Poco después, la oficina concretó que fueron 5 los agentes que recibieron disparos del sospechoso, y confirmó la muerte de uno de ellos.
El presidente estadounidense, Donald Trump, envió en un tuit sus «más profundas condolencias a las víctimas del terrible tiroteo en el condado de Douglas» y «a sus familias».
Durante varias horas de la mañana, las autoridades advirtieron de que la escena del crimen seguía en activo, y urgieron a los residentes de la localidad a evitar la zona del edificio de apartamentos.
La oficina del sheriff emitió una alerta roja que instruía a los habitantes de un perímetro señalado de Highlands Ranch a «quedarse donde están, evitar las ventanas y mantenerse alejados de los muros exteriores».
Además, se estableció un refugio de emergencia para acoger a los ciudadanos de esa localidad de casi 100.000 habitantes que pudieran haberse quedado fuera de su hogar debido al tiroteo.
Con información de EFE.]]>