Internacionales

Kristallnacht: La memoria y el recuerdo contra la banalización y el negacionismo

No olvidar, evitar la banalización, el racismo y la injusticia fueron los mensajes comunes del acto celebrado el lunes por la comunidad judía de Venezuela en el 80 aniversario de la “Noche de los cristales rotos” acontecimiento que marcó el inicio de las tribulaciones que sufrieron durante el nazismo.

Kristallnacht acto en memoria del primer ataque nazi contra los judíos
Foto:AFP
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En la jornada en memoria de las víctimas los ponentes señalaron como vital el fortalecimiento de la memoria como ejercicio colectivo como impedir que se repitan los crímenes atroces del holocausto.

El orador de orden David Bittan Obadía, ex presidente de la Confederación de Asociaciones Israelitas de Venezuela, alertó sobre la manipulación del lenguaje y la política como espectáculo que vivimos en la actualidad es algo que calificó una herencia del nazismo.

“El siglo XX fue una etapa de oscurantismo a pesar de los avances técnicos, no fue una época medieval, esta etapa fue posible gracias a la ciencia más avanzada y a la organización racional y burocrática de una sociedad industrial que proporcionaron los medios para cometer el genocidio y ofrecieron una nueva moral moderna”.

Bittan afirmó que Hitler fue un canal para canalizar la aberración pues las personas buenas no hicieron nada, voltearon su mirada, por eso cree que la memoria es de vital importancia.

Agregó que hay que luchar contra el estado extraño en que las líneas entre la luz y la oscuridad, el crimen y el castigo, la crueldad y la compasión y el bien y el mal se funden como si fueran una.

“Ser indiferente es lo que convierte al ser humano en inhumano, después de todo es más peligroso que la ira y el odio. La indiferencia es amigo del agresor y siempre se beneficia el perpetrador nunca su víctima, cuyo dolor es magnificado cuando él o ella se sienten olvidados”.

Afirmó que solo a través del conocimiento, la educación y la sensibilización permanente es que se puede evitar el descarrilamiento de la conciencia y que vuelva la barbarie. “Abandonar la educación es suicidarse, dejarla al azar no es bueno y a la larga se paga”.

Cristales rotos

Elías Farache, miembro de la comunidad judía en Venezuela, expresó en su discurso su preocupación por las pérdidas de sobrevivientes como testimonio vivo contra crímenes atroces realizados durante la II Guerra Mundial y la indiferencia que demuestran los jóvenes por el tema. Se refirió a como las deportaciones, asesinatos en masa, odio y muerte ha dado paso en nuestra sociedad actual a la banalización de los hechos y al negacionismo.

Alertó: “Si en 1938 se hubiera tomado en serio los cristales rotos tal vez todo hubiera sido distinto. En 2018 siguen habiendo cristales rotos”.

El embajador de Alemania en Venezuela, Daniel Kriener, dio una mirada a la sociedad alemana postguerra en la que los alemanes cuestionaron lo acontecido previamente. “Comenzamos a hablar de ellos en el seno de nuestras familias. Preguntábamos a nuestros padres.”

El diplomático recordó que su padre siendo un joven de 14 años de edad fue intimidado por sus compañeros de clase cuando intentó defender a un niño judío que fue empujado por la escalera la mañana siguiente de Kristallnacht. “!Cállate o te lanzamos también por la escalera¡”

“Mi padre se quedó callado y como él muchos alemanes callaron, por miedo, por inercia, por vergüenza. Después de la guerra muchos callaron por vergüenza o por falta de voluntad de ser escuchados. La experiencia de mi padre me enseñó mucho, debemos combatir el antisemitismo, la xenofobia y no tolerar que se vuelvan violentos.”

Intolerancia

Por su parte, el Rabino Isaac Cohen habló de la importancia de la memoria y manifestó que el testimonio de hoy es la semilla de la historia. El religioso rememoró lo que ocurrió esa noche del 8 al 9 de noviembre de 1938 y dijo: “Los cristales son más resistente que cualquier acero si impera la ley y la justicia, pero es vulnerable e impunemente quebradizo si se altera la ley y la justicia se pervierte”.

Añadió: “Los cristales rotos evidencian que se rompió la decencia y moral de una sociedad, significa que la convivencia y el raciocinio han cedido su lugar a la intolerancia y la violencia. La sociedad se ha degradado al punto de la más infame y abyecta brutalidad”.

Destacó que solo con el esfuerzo, la verdad y el amor es que se puede respetar el frágil límite que impone un cristal aun seremos capaces de encaminarnos en la búsqueda de la justicia y la paz.

Se va la memoria

Tomás Osers, director de Yad Vashem, dijo que lo que aprendieron lo que le sucedió a sus parientes y amigos. “Hoy estamos en una carrera de relevos, que se puede palpar y tocar. En el caso de la Shoá el ‘testigo’ no es físico es la memoria”.

El directivo de la organización que se encarga de recordar a las víctimas y mártires dijo que la comunidad judía está en una carrera de relevo para transmitir el legado de los sobrevivientes que son cada vez menos y muchos ya tienen edades muy avanzadas.

“Nuestra razón de ser aparte de transmitir los testimonios de primera mano es el de enseñar, divulgar, combatir a los negacionistas, es estar alerta ante un nuevo Kristallnacht. Es nuestra responsabilidad no pasar dos veces por el mismo episodio”.

Osers se encargó de recordar la memoria de un sobrevivente del holocausto,  David Yisrael que siempre recordaba los nombres de los seis campos de exterminio de judíos. “Lo haré yo para recordar su memoria Chelmno, Belzec, Sobibor, Maijdanek, Treblinka, Auschwitz-Birkenau. Somos la generación de relevo”.

Contó las vicisitudes vividas por Yisrael quien perdió en los campos de exterminio a su mamá y hermana, y lo recordó con una de sus frases. «No debemos dejarnos llevar por el olvido ya que es una forma de rendirse ante el mal».

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