Cerca de un centenar de cohetes fueron lanzados el sábado por la mañana desde la Franja de Gaza a Israel. En represalia, Israel llevó a cabo ataques aéreos y recurrió a disparos de tanques contra posiciones de Hamás en el enclave palestino, señaló el ejército.
El ministerio de Salud de Gaza anunció que los bombardeos israelíes causaron un muerto y varios heridos. Una fuente de seguridad de Gaza dijo que los ataques israelíes alcanzaron tres zonas separadas de la Franja de Gaza y que tres combatientes de la resistencia resultaron heridos.
El ejército israelí dijo que los palestinos dispararon 90 cohetes desde la Franja de Gaza y que decenas de ellos fueron interceptados por el sistema israelí de defensa antimisiles.
Según los servicios de emergencia israelíes, los cohetes no causaron víctimas.
El ejército precisó que bombardeó dos plataformas lanzacohetes palestinas y que los tanques habían atacado varios puestos militares de Hamás.
Esta escalada, la más importantes desde hace varias semanas, se produce tras violentas manifestaciones el viernes en la frontera de Gaza.
Cuatro palestinos, incluyendo dos miembros del brazo armado de Hamás, murieron el viernes en un ataque israelí en la Franja de Gaza, después de que dos soldados israelíes fueran heridos en los enfrentamientos en el sector de frontera.
El movimiento islamista Hamás, en el poder en la Franja de Gaza, prometió el viernes responder a la agresión israelí.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, indicó el sábado que se iba a reunir con los responsables de seguridad del país, informó uno de sus portavoces.
Israel y Hamás se han enfrentado en tres guerras desde 2008 y, cuando la tensión sube entre ambos bandos, hace temer un cuarto conflicto.
Mantener la tregua
A finales de marzo, bajo el auspicio de Egipto y la Organización de las Naciones Unidas (ONU), se negoció un alto el fuego, anunciado por Hamás pero nunca confirmado por Israel. Esto permitió mantener una relativa tranquilidad durante las elecciones legislativas israelíes del 9 de abril.
Pero el martes Israel redujo la zona de pesca autorizada frente a las costas de Gaza, después de que unos militantes palestinos lanzaran un cohete hacia su territorio.
El cohete cayó en el Mediterráneo. El ejército israelí acusó a la Yihad islámica, grupo aliado de Hamás.
Una delegación de Hamás encabezada por su líder en Gaza, Yahya Sinwar, dejó el enclave el jueves rumbo a El Cairo para abordar con responsables egipcios los medios para preservar la tregua.
Estos últimos meses, Israel aceptó que Catar suministrara una ayuda de varios millones de dólares a Gaza para pagar los salarios y financiar la compra de carburante y hacer frente así a la escasez de electricidad.
Desde marzo de 2018, los palestinos se manifiestan en la frontera entre la Franja de Gaza e Israel contra el bloqueo en el enclave y para el retorno de los refugiados palestinos que fueron expulsados o tuvieron que abandonar sus tierras tras la creación de Israel en 1948.
Al menos 270 palestinos murieron desde el inicio de la movilización, en las manifestaciones o en los ataques israelíes como represalia. En el bando israelí, dos soldados fallecieron.
Los organizadores de las manifestaciones y Hamás aseguran que el movimiento de la «Gran marcha del retorno» es independiente. Israel en cambio acusa a Hamás de orquestar estas manifestaciones.