En una comparecencia no anunciada en la Casa Blanca junto al presidente Donald Trump, Acosta señaló que llamó al mandatario esta mañana tras considerar que «lo correcto era hacerse a un lado».
Por su parte, el presidente destacó que Acosta ha sido «un gran secretario» y alabó su «muy buen trabajo» al frente del Departamento de Trabajo.
«Fue su decisión, no la mía», agregó Trump.
La renuncia se produce apenas dos días después de que Acosta defendiese en rueda de prensa su actuación como fiscal hace ahora una década, cuando alcanzó un controvertido acuerdo judicial con Epstein, acusado ahora por segunda vez de abuso de menores.
El multimillonario, detenido a comienzos de mes, ya se enfrentó a acusaciones de este calibre en Florida, pero en 2008 alcanzó un acuerdo extraoficial con la Fiscalía, dirigida entonces por Acosta, para cerrar una investigación que lo podía haber enfrentado a la cadena perpetua.
El acuerdo pactado entonces, no obstante, contemplaba que el magnate neoyorquino cumpliera una condena de apenas 18 meses de prisión y pasara a formar parte de dicho registro.
A pesar de esta sentencia, la Fiscalía de Nueva York ha podido volver a acusar a Epstein, sin caer en un doble procesamiento, gracias a las nuevas pruebas y testimonios obtenidos en los últimos años.
Acosta, único latino en el gabinete presidencial de Trump, asumió el cargo de secretario de Trabajo en abril de 2017