Nueve personas murieron este sábado en los estados de Texas, Alabama y Luisiana a raíz de las graves tormentas que recorren el sureste de EEUU y el Golfo de México. Más de 200.000 personas están sin corriente eléctrica, informaron las autoridades locales.
Los vientos huracanados, el granizo y la nieve se extendieron también hacia el norte del país y provocaron la cancelación de 1.000 vuelos en los aeropuertos de Chicago.
En Luisiana, una pareja de ancianos murieron después de que la tormenta demoliera su caravana, y otro hombre murió de madrugada, cuando un árbol que empujo el viento cayó sobre su casa Oil City.
Otras tres personas murieron en Alabama, en el condado de Pickens, tras el paso de un tornado, informó el Servicio Meteorológico Nacional.
En Texas, un bombero y un policía murieron cuando un auto se deslizó y los impactó a toda velocidad por el hielo de la tormenta. Otra persona murió en Dallas al deslizarse su vehículo hasta un arroyo.