Biden viaja a Arabia Saudita buscando petróleo
Durante su campaña calificó a Arabia Saudita como "país paria" pero ahora trata de convencerlo de producir más crudo para poder bajar los precios
Durante su campaña calificó a Arabia Saudita como "país paria" pero ahora trata de convencerlo de producir más crudo para poder bajar los precios
Joe Biden hará el viernes 15 de julio, su primera visita a Arabia Saudita como presidente estadounidense, con la esperanza de convencer a Riad de producir más petróleo para bajar los precios del crudo que impulsan la inflación más alta en décadas.
Biden dijo antes de su elección que Arabia Saudita debía ser un país «paria» tras el asesinato en 2018 del periodista disidente Jamal Khashoggi y prometió que iba a «recalibrar» las relaciones con ese socio estratégico de Estados Unidos.
Sin embargo, desde que Rusia invadió Ucrania, provocando un fuerte aumento del precio del petróleo, que llegó a niveles que no se veían desde la crisis financiera de 2008, la situación es diferente.
La inflación en Estados Unidos alcanzó su tasa más alta en cuatro décadas, lo que incitaría a Biden a de dejar de lado las preocupaciones por los derechos humanos y bajar la tensión con su aliado.
La visita deja en «evidencia la desesperación de Biden en vistas a las elecciones de medio mandato de dar por lo menos la impresión de que intenta rebajar la tensión en el mercado y hacer bajar los precios», dijo a la AFP Craig Erlam, analista de Oanda.
Las posibilidades de Biden se verían reforzadas por el cercano vencimiento de un acuerdo del grupo OPEP+ que regula el levantamiento de su producción.
Ese grupo -13 países de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), encabezados por Arabia Saudita, más 10 países encabezados por Rusia- recortó la producción en 2020, cuando la demanda se vio golpeada por los cierres pandémicos en el mundo.
Pero desde el año pasado han aumentado gradualmente la producción al repuntar las economías.
OPEP+ acordó mantener los aumentos previamente decididos, descartando los llamados a aumentar la producción para contener la subida de los precios.
Dicho acuerdo vence a fines de agosto y en septiembre OPEP+ volverá a su nivel de producción previa a la pandemia.
«El vencimiento del acuerdo OPEP+ en septiembre crea una oportunidad y tal vez (Biden) no haría esto si no estuviera seguro de que es posible alcanzar algo», agregó Erlam.
El grupo celebrará en agosto su próxima cita para discutir la producción.
Pero la esperanza de Biden de contar con más oro negro podría verse frustrada debido a los elevados precios, que han apuntalado los ingresos y las economías de los países de Oriente Medio.
«Sería una sorpresa enorme si Arabia Saudita produjera más petróleo», señaló el analista independiente Stephen Innes.
La economía de Arabia Saudita creció 9,6% en el primer trimestre, su mayor expansión en una década.
Existe un «incentivo económico significativo para no aumentar la producción», explicó el analista Walid Koudmani de XTB.
De hecho Riad está produciendo a cerca de su capacidad máxima.
El ministro saudita de Relaciones Exteriores, príncipe Faisal bin Farhan, afirmó en mayo que el reino había «hecho lo que podía» para el mercado petrolero.
Agregó que la industria necesita aumentar su capacidad de refinamiento en lugar de extraer más barriles de crudo.
Irán es otro foco de contención entre Washington y Riad.
Arabia Saudita encabeza la lucha contra los rebeldes hutíes en Yemen, apoyados por Teherán, mientras Estados Unidos busca revivir el acuerdo nuclear iraní, abandonado en 2018 por el antecesor de Biden, Donald Trump.
El acuerdo podría conducir al levantamiento de las sanciones estadounidenses contra Irán y cimentar su regreso como miembro de la OPEP con plena capacidad de exportación.
Los negociadores estadounidenses sostuvieron conversaciones indirectas con Irán en junio en Catar en busca de revivir el acuerdo nuclear.
El acuerdo nuclear «pareció ser alcanzable en el pasado reciente, en especial luego del inicio del conflicto Rusia-Ucrania», acotó Koudmani.
«Pero no ha logrado avanzar y podría ser abandonado por Estados Unidos si obtiene garantías (de una mayor producción de petróleo) de Arabia Saudita después de esta visita del presidente Biden», agregó.