Aunque la declaración de emergencia se hizo en julio pasado, los doctores aseguraron que no se ha tomado ninguna medida para frenar la crisis de la salud, lo que ha desencadenado la aparición de enfermedades como la difteria y el paludismo. De malaria ya han registrado más de 100 casos y no hay medicinas para tratarla.
Enrique Hernández, vicepresidente de la Sociedad Médica de Especialistas, indicó que es casi imposible conseguir el tratamiento contra la malaria, pues estos medicamentos son manejados por Corposalud, ente gubernamental que no cuenta con los insumos para cubrir las necesidades que hay en el estado por la cantidad de casos que existen de esta patología.
Dijo que solamente están tratando los episodios febriles, es decir, que únicamente se le administra el tratamiento al paciente con malaria cuando tiene fiebre, para racionar los medicamentos para el resto de la población. “Es muy grave y tampoco se ha instalado un cerco epidemiológico para frenar la propagación de la enfermedad”.
La Sociedad Venezolana de Salud Pública estima que el año cerrará con 1 millón de infectados con paludismo en todo el país.
El secretario de Información y Difusión de la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría, Germán Rojas Loyola, afirmó que es indispensable que se abra un canal humanitario para recibir ayuda nacional e internacional que permita ayudar a la población socialmente más vulnerable, que no cuenta con los recursos necesarios para adquirir estos productos que se están vendiendo con precios dolarizados.
Consideró que la población ha mostrado conciencia por la situación que existe en la entidad y que fuera del país hay muchas organizaciones y médicos dispuestos a colaborar, mientras que las autoridades no están surtiendo los hospitales.
Reseñó que ya se presentó un caso de difteria y actualmente existe también una epidemia de leishmaniasis visceral, que hace muchos años no se veía. Adicionalmente, hasta el 16 de septiembre tienen un reporte de 198 niños menores de cinco años fallecidos, 145 de ellos neonatos, y que esas cifras revelan un gran incremento en la tasa de la mortalidad infantil con respecto a la del 2016.
“Todo esto responde a las fallas en las políticas de prevención referidas a la salud en la región. El Plan Nacional de Vacunación adolece de dos vacunas muy importantes: rotavirus, que este año no se ha colocado, y neumococo, sin colocarse desde hace más de un año. Estas vacunas previenen patologías que causan la mayor mortalidad en los niños pequeños neumonías complicadas y diarreas virales por rotavirus. Estas enfermedades han aumentado, vemos muchos más casos, aunada a la desnutrición que están padeciendo. De cada 10 niños que hospitalizamos 4 tienen algún grado de desnutrición y esto los hace más susceptibles a estas enfermedades para los cuales no están protegidos”, explicó.
Jornada humanitaria
El presidente de la sociedad médica, Franklin Cortés, informó que el sábado pasado lograron concretar una jornada de recolección de medicamentos e insumos para los pacientes del centro hospitalario y que este inventario podría alcanzar para cubrir unas dos o tres semanas.
“El Parqueton fue una actividad que logramos coordinar con la asamblea permanente del hospital y la ayuda de la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría. Fue excelente, se mostró mucha unión de colegas del hospital y otras instituciones. Lo más importante son las donaciones de la sociedad margariteña, con la cual estamos muy agradecidos. Tuvimos un total de 35 donantes entre asociaciones y particulares. La cantidad es bastante grande. Recibimos antibióticos, anticonvulsionantes, antipiréticos, analgésicos, juguetes, ropa. Todo se entregó al hospital”, comentó.
Dijo que las autoridades no les han dado ningún tipo de respuestas ni cuando hicieron la declaración de emergencia ni cuando dieron la alerta por las condiciones del hospital. Tampoco ahora. “No han puesto resistencia a que ingresemos los medicamentos. Esto lo controla la sociedad. Se recibe récipe y se entrega el medicamento, se descuenta del inventario. No hemos recibido dinero, no queremos hacerlo».
Cortés reiteró que esta jornada no es una solución a la gran crisis que existe en Nueva Esparta y que se hizo para tratar de apoyar un poco a los pacientes que se están muriendo por la incapacidad de acceder a los medicamentos, por la escasez y por el precio tan elevado que tiene. Próximamente estarán organizando una nueva actividad de recolección de insumos.
]]>