El Honda que vuela
Decidida a repetir en los cielos el éxito que han tenido sus autos de calle, la firma japonesa comenzó a despachar las primeras unidades de su nuevo Honda jet fabricado en fibra de carbono
Decidida a repetir en los cielos el éxito que han tenido sus autos de calle, la firma japonesa comenzó a despachar las primeras unidades de su nuevo Honda jet fabricado en fibra de carbono
Tras varios años de espera, el permiso de aeronavegación llegó y ahora sí se puede decir que Honda conquistará los cielos con su Jet, el primer avión desarrollado por la productora japonesa de motos, carros y motores fuera de borda, que ya puede volar en Estados Unidos y México, los primeros países donde comenzó a comerciar su nueva y revolucionaria aeronave.
Y anoten estas siglas HA-420, porque el nuevo miembro de la familia Honda llegó para revolucionar el mercado de aviones de pequeño formato, gracias a un diseño de avanzada que el permite reducir de manera considerable el consumo de combustible, razón que le ganará muchos adeptos por la economía de vuelo que ello representa.
Décadas de investigación y pruebas en sociedad con los fabricantes más reputados de aviones particulares permitieron a Honda poner a punto un proyecto que nació en 2006 y que solo hasta este año pudo materializarse, cuando varios de los aviones que ya se han construido comenzaron a surcar los cielos norteamericanos.
Como en muchos de los vehículos que fabrica Honda, lo más destacable de su jet es el diseño. Dos décadas de trabajo concluyeron en avión compacto de cuerpo muy ligero cuyo fuselaje de una sola pieza está conformado por capas de fibra de carbono puestas tipo panal, que además de reducir el peso y minimizar el consumo, ofrece más rigidez estructural.
La angulosa y pronunciada nariz no es un capricho estético sino que está diseña para reducir la resistencia al aire, con lo cual además de evitar las vibraciones y redundar en mayor comodidad para los pasajeros, permite alcanzar la velocidad de crucero con mayor rapidez que se traducen en ahorro de combustible.
Otra de las grandes innovaciones del Honda Jet es la posición de las alas y el motor. Las primeras están colocadas más debajo de lo convencional y tiene taloneras que ayuda a reducir la fricción y sirven de soporte a los motores, una ingeniosa solución que, entre otras cosas, ayuda en el ahorro de gasolina, permite aumentar el espacio interno y evita a los pasajeros el molesto ruido de los propulsores adosados al fuselaje de los aviones tradicionales.
Honda ha querido hacer de éste un producto integral y por ello creó sus propios motores para su HA-420: dos turboventilados desarrollados conjuntamente con GE de 2.005 libras/pie de empuje cada uno capaces de llevar el aparato a 44.000 pies de altura a 420 nudos (778 kilómetro por hora), con una tasa de ascenso de 3.900 pies/min. En ella se podría ir de Caracas a San Cristóbal en poco más de una hora.
Con un peso total de despegue de 4,173 kilos y una autonomía que supera los 2.000 kilómetros, Honda asegura que su jet ofrece una eficiencia de consumo 40% superior a aviones similares.
-Lujo y comodidad-
Honda ha querido replicar en su jet el confort que se disfruta en sus autos de calle y por ello no ha escatimado en ofrecer un interior espacioso y cómodo.
Con nueve metros de largo, la cabina del HA-420 puede ser configurada para cinco o seis pasajeros más dos tripulantes, quienes de acuerdo a los requerimientos del cliente disfrutan de amplias butacas, minicocina y un pequeño pero cómodo baño.
Los dos tripulante también disfrutarán en su mundo, pues el panel de control repleto de instrumento de avanzada, como las tres pantallas táctiles de 14 pulgadas que revelan toda la información que antes era medida por infinidad de relojes, a lo que se suma la aviónica Garmin G3000, lo más avanzado en programas aeronáuticos.
Fabricado en la planta de Honda Aircraft en Carolina del Norte, solo se despacharán 70 unidades al año contra pedido previo acuerdo para cancelar los 4,5 millones de dólares que cuesta el nuevo deportivo de lujo y aéreo de Honda.