Este Miss Universo tuvo de todo (y no nos "robaron" la corona)
La representante de Venezuela, Diana Silva, quedó en el Top 10 y la corona de Miss Universo hoy la lleva por primera vez una nicaragüense
La representante de Venezuela, Diana Silva, quedó en el Top 10 y la corona de Miss Universo hoy la lleva por primera vez una nicaragüense
Gusten o no estos concursos, hay que reconocer que esta edición del Miss Universo plantó cara en más de un sentido -para horror de transfóbicos y gordofóbicos- y hasta agitó aguas políticas: una candidata de talla grande, dos mujeres transgénero, una declaración de bancarrota, un presidente que sube al escenario a dar un discurso de autocelebración y hasta la ironía de que en la patria de Bukele triunfe la miss de la tierra del macabro dúo Ortega-Murillo.
Y todo, con John Legend estirando canciones al piano…
En un país atribulado por un régimen opresor, el triunfo de Sheynnis Palacios en el Miss Universo fue recibido como un destello de alegría: Palacios, modelo, activista por la salud mental y comunicadora social de 23 años, es la primera nicaragüense en obtener la corona del mayor concurso de belleza internacional.
Sheynnis Palacios fue Miss Teen Nicaragua en 2016, Miss Mundo Nicaragua en 2021 y Miss Nicaragua en el 2023. La nueva Miss Universo también es conductora de “Entiende tu mente”, un programa de televisión en el que participan especialistas en salud mental y que se transmite en el Canal 11 de su país. Junto a su madre, en 2018 creó el emprendimiento Buñuelos La Guadalupana.
La edición número 72 del certamen Miss Universo se celebró en El Salvador, en una prolongada ceremonia durante la noche del sábado 18 de noviembre en la que participaron 84 concursantes.
Esta es la segunda ocasión en la que el certamen se lleva a cabo en ese país –la primera fue en 1975- y el presidente Nayib Bukele –quien obviamente busca la reelección el año próximo- no desperdició la oportunidad de aprovechar la vitrina mediática: no sólo se destacó su presencia en el Gimnasio Nacional “Adolfo Pineda”, sino que subió al escenario micrófono en mano: “El Salvador ha cambiado para siempre y lo hemos demostrado una vez más… Gracias por elegir ser parte del renacimiento de El Salvador, pero esto apenas comienza”.
Hace rato que los certámenes internacionales de belleza comenzaron a introducir cambios, a expandir sus criterios. Y esta edición de Miss Universo –una franquicia que hoy está en manos de la empresaria transgénero Anne Jakkaphong- fue un buen ejemplo.
En 2018 concursó la primera aspirante transgénero, la española Ángela Ponce. Esta vez, participaron dos candidatas transgénero: la Miss Portugal, Marina Machete; y la Miss Países Bajos, Rikkie Valerie Kolle.
Fue la primera vez en la que concursó una aspirante de talla “plus size”: Jane Garret, Miss Nepal.
Dos de las aspirantes latinas tienen hijos, algo impensable hace apenas algunos años atrás: la colombiana María Camila Avella –quien avanzó hasta el Top 5- y la Miss Guatemala, Michelle Cohn.
JKN Global Group es la empresa a través de la cual, la empresaria tailandesa Anne Jakkaphong en octubre de 2022 compró la Organización Miss Universo por 20 millones de dólares. En el marco de los eventos previos a la ceremonia y con las misses ya haciendo múltiples actividades en El Salvador, una noticia sorprendió a los involucrados: JKN Global Group se declaró en quiebra el 9 de noviembre en Tailandia.
Sin embargo, se trata más bien de una estrategia legal para resolver problemas de liquidez, retrasar pagos de deuda y hasta disminuir los intereses. Es decir, se acogió a la figura de la bancarrota para ganar tiempo y reestructurarse. En ese contexto, la empresa también aclaró que la Organización Miss Universo es una de sus muchas líneas de negocios y que sus cuentas y su administración no serían afectadas por la medida. De hecho, la noche del sábado 18 se anunció que México será la próxima sede.