Carlos y Carluis, "los pavos" se van de gira

Carlos Jelambi y Carluis Medina comenzaron a trabajar juntos en 2021, pero se conocieron en un bar -o eso es lo que recuerdan- en 2019 en un circuito de comedia. Poco a poco comenzaron a coincidir en Pizpa, Teatro Bar, Acuarela, Tepeyac… A pesar de que todo comenzó como en una gran historia de amor de esas que nacen en una barra, “no fue amor a primera vista”.

Hasta que ya no hubo vuelta atrás.

Percibían que había un gran hueco en la comedia venezolana. Muchos comediantes emigraron, algunos se quedaron estancados y otros no tenían los mismos objetivos que ellos: llenar shows y crecer en redes, sino que lo veían más como un hobbie. Carluis y Carlos tenían hambre, querían esto como trabajo, querían ganar dinero haciendo reír.

Así que en algún momento decidieron juntar esfuerzo y talentos y de esa unión nació su show “Stand up Pa’ Los Pavos”, que se presenta todos los miércoles en Pizpa y que se basa en hacer una rutina cada uno y ceder el micrófono a comediantes invitados.

Ellos, a su vez, han sido invitados de otros. Es como una cadena. O un sistema que se retroalimenta. Carlos y Carluis han abierto shows a gente como Emilio Lovera y Chris Andrade. Ahora, luego de lanzar sus especiales en YouTube, están por dar otro gran paso: su primera gira internacional. El 7 de abril se presentarán en Bogotá, el 10 en Santiago de Chile y el 11 de abril cerrarán en Buenos Aires.

Bienvenidos a la “pavineta”…

-¿Cómo fue ese momento en el que dijeron en serio “quiero ser comediante”?

-Carluis: Yo desde siempre supe que era gracioso. En el colegio y en la universidad lanzaba chistes, pero no sabía lo que era un stand up como tal. Y no fue hasta que entré a estudiar en la UCAB que mis amigos me empezaron a mostrar comediantes y me decían: “ellos se parecen a ti”. Abrieron un concurso en la universidad que se llamaba “Se buscan comediantes nuevos”, mis amigos me motivaron a inscribirme, lo hice y me fue normal… y después, me empecé a presentar en Pizpa.

Carlos: Yo me presenté en ese concurso, pero años antes. Para mí, fue más un tema de me gusta escribir, el storytelling, narrativas, el cine, la televisión y el stand up fue una vía rápida que vi de “escribo y lo muestro al público”. Se dio solo y me gustó mucho porque no dependo de nadie para hacerlo.

Carluis: También lo seguimos haciendo porque nos dimos cuenta de que éramos buenos.

-Si no hubiese un sitio como Pizpa, ¿igual hubieran hecho esto?

-Carluis: Puede que recibiéramos más golpes… En Pizpa hay cierta facilidad porque estamos desde el principio, entonces podemos presentarnos siempre. Si no existiese, hay otros circuitos, pero se acaban a los dos días. Entonces, sería presentarnos, ese sitio cierra, encontrar otro y empezar de cero. En cambio, aquí hay comedia de lunes a sábado.

Carlos: Y hay algo con el mercadeo… lo visual. Pizpa es el único lugar dedicado enteramente a la comedia en Venezuela, ya tiene un branding hecho, tener un show ahí certifica de alguna forma, es una chapa.

Carluis: Pasa mucho que comediantes nuevos se presentan aquí en micrófonos abiertos por primera vez y se toman una foto con el logo y la ponen de perfil para decir: “Yo me presenté ahí”.

-Ambos acaban de sacar sus primeros especiales individuales a YouTube. ¿Cómo les ha ido? ¿Tuvieron la respuesta que esperaban?

-Carluis: Nos sorprendió, esperemos que la gente los vaya revisitando y lleguemos a 100.000 reproducciones los dos. Yo sí me esperaba un poquito menos, que te sorprenda siempre es lo mejor.

Carlos: Yo decidí no esperar nada, porque sino me iba a morir. Preferí no ponerme ninguna expectativa.

-¿Y esperan hacer uno juntos?

-Carluis: Una vez surgió la idea de hacer uno de impro.

Carlos: Es una posibilidad. Últimamente no hemos estado pendientes de eso porque hemos estado pendientes de escribir cada quien su siguiente especial.

Carluis: Lo que puede pasar es que de las veces que estemos juntos en tarima en esta gira los dos subamos una recopilación de esas partes a YouTube.

Carlos: Sí, probablemente sea mucho menos escrito y más de improvisación con el público o juegos de improvisación, cosas así que podamos hacer los dos juntos.

-También viene su primera gira internacional. ¿Se sienten preparados para esto?

-Carluis: Creo que nosotros tenemos la calidad, la cantidad lo estamos evaluando… Sin duda estamos preparados: 4, 6 años cada uno dándole duro. Podemos llegar a cualquier lugar y hacer reír a la gente.

-¿Con qué se va a encontrar el público en esta gira?

-Carlos: Con chistes que no están en ninguno de los especiales que salieron.

Carluis: Muchos chistes nuevos. Nadie los ha visto, sólo la gente que ha venido a los shows.

-¿Cómo creen qué será esa dinámica de pasar lo que se ve en Pizpa a una gira?

-Carluis: Ya lo hemos hecho en gira nacional. Estamos llenos de expectativas a ver qué tal reacciona el público venezolano que está afuera.

Carlos: Lo vamos a probar fuera de Pizpa en una gira por Venezuela. Tenemos shows en Valencia, Maracay, Margarita y San Antonio.

-¿Cómo definieron los destinos de esta gira? ¿Cómo midieron el alcance para decidir a dónde ir?

-Carlos: Donde hay mas venezolanos…

Carluis: Donde hay más venezolanos, donde no se necesita visa, donde han ido más los comediantes locales y desde donde nos han escrito. Contactamos al productor, le dimos esa información y él nos mostró los lugares y así fue que se seleccionó.

-¿Esta gira va a ser documentada?

-Carlos: Sí, pero por nosotros mismos. Tenemos los equipos, pero no vamos a tener a nadie en eso. Es nuestra primera gira y no hay un presupuesto para pagarle a alguien.

Carluis: Así lo hicimos en Maracaibo la primera vez que fuimos.

-¿Y tienen miedo de llegar a tener públicos difíciles?

-Carlos: Entendemos que Colombia es difícil para vender y para el show, pero ya pasa aquí a veces, es parte del proceso. Da un poco de miedo. Por ejemplo: si viene un comediante de afuera y yo lo voy a ver, voy a tener una disposición muy buena para el show.

Carluis: Y pasa que nos escriben mucho: “¿cuándo vienen?” desde que el proyecto empezó. Tenemos como un año y medio dándole y la gente ha esperado todo este tiempo que nosotros vayamos. Si ya se cumplió, pórtate bien y vamos a disfrutar.

-¿Qué es para ustedes un público malo? ¿Los que interrumpen o los que no se ríen? ¿Cómo lo manejan?

-Carlos: Los públicos que interrumpen casi nunca lo hacen desde la maldad, a veces sí, pero no por lo general. Quieren ser parte del show, lo que no es malo en su concepción de público, viene de un quiero ayudar, pero hay veces que eso resta un poco.

Carluis: También depende de las condiciones en el lugar que te vas a presentar.

Carlos: Muchas veces el público no viene por el ambiente. Si están muy iluminados, se apenan y les cuesta más reírse. Hay menos sensación de grupo. Si el show arranca cuando la gente está comiendo, se distraen. Si arranca muy tarde, la gente ya va a tener sueño o van a estar rascados.

Carluis: Hay que tener a alguien que evalúe y mida. Y con lo de que el público se sienta parte, al nuestro le gusta muchísimo. Entonces, cuando vienen es “habla conmigo que quiero salir en tu Instagram”.

-¿Alguna vez les ha pasado que han hecho algún chiste y se lo han tomado a mal?

-Carlos: Sí. A mi la campeona y medallista olímpica de BMX, Stefany Hernández, me lanzó un tomate cherry de su pizza de Pizpa en 2019 porque hice un chiste de lesbianas.

Carluis: A mi una vez me gritaron: “¡bájate!”. Ha sido uno de los golpes más duros al ego porque desde que comencé a hacer stand up me ha ido bien. He tenido malas presentaciones, pero mi ritmo y crecimiento han sido rápidos en comparación con otros. Esto fue en una gira con Emilio Lovera y yo abría el show. No llevaba ni un minuto en tarima y eso -el grito- me mató. No me bajé, seguí y me fue bien, pero me destrozó por un tiempo. Después, el mismo Emilio me estaba defendiendo lanzándole muchos chistes cortantes al tipo, pero yo estaba destrozado.

Carlos: En mi segunda presentación me ofrecieron golpes. Era un tipo rascado. Yo no dije nada ofensivo, pero me estaba yendo muy mal y él me estaba gritando “¡bájate, bájate!” y yo le decía, “déjame terminar” y me empezó a ofrecer golpes. Y el tipo estaba en una cita… Si algo no suma para una cita es eso…

-¿Cuando eso ocurre piensan en cambiar la rutina?

-Carlos: Lo que pasa es que tu cambias la rutina dentro de la que tienes. El stand up es como un músico que tiene su proyecto: vas con tu disco y tu setlist, si no está pegando, tu fuiste con tu disco. Uno no empieza a crear chistes. Puedes improvisar un poco con el público, pero no vas a tomar un chiste prestado de alguien más.

Carluis: Modificas cuando el público está prestando atención y los chistes no están calando, pero si ellos no tienen interés, ahí no importa tanto porque digas lo que digas no van a prestar atención.

Carlos: Creo que lo que hace al público difícil es que no sabe que viene a un show, que no se comunica bien que viene a un show y quería comer, conversar y caerse a curda. De repente, le pones un show en frente y dicen “ah, tengo que hacer silencio”. Pasa mucho en los locales porque la mayoría no tienen el branding de los shows de comedia.

-¿Creen que en comparación con otros países la comedia no está bien desarrollada en Venezuela?

-Carluis: Es porque es muy nueva y por la situación del país los comediantes crecen y se van. Entonces, cada cierto tiempo queda virgen otra vez la comedia. A nosotros nos pasó.

Carlos: Se fueron Gabo, Manuel Ángel… que eran quienes estaban creciendo y se fueron en el momento en el que comenzamos.

Carluis: Y a ellos también les pasó cuando se fueron Chucho, Nanutria…

Carlos: Y a su vez a ellos con Led, José Rafael. De alguna forma, la comedia queda huérfana. Igual hay algunos que se mantienen como Samuel, Luis Álamo, Briceño…

Carluis: Si todos esos comediantes estuvieran en el país hubiese sido más complicado crecer, pero habría una industria más grande, cultura, estructura, estuvieran girando todo el año… Y los locales hubiesen visto esa oportunidad y habrían más lugares como Pizpa donde se pueden presentar los comediantes.

-¿Qué hace falta en Venezuela para que se desarrolle más la cultura del stand up?

-Carlos: Dinero. Muchos de los problemas en el país nacen de la falta de dinero. Gran parte de los comediantes aprovecharon una época de difusión mayor porque los medios nacionales eran algo. Muchos venezolanos no tienen dinero para ir a ver a los shows o les cuesta muchas veces el tema del consumo.

Carluis: También hace falta dinero para que haya internet en todos lados. Si hay internet en Güiria, Yaracuy y Delta Amacuro, le puedes llegar a esa gente, puedes anunciar un show y te van a ir a ver, pero si no les llega tu contenido, no van a verte nunca porque no saben quién eres tu. No vas a ir a presentarte a esos lugares sin ganar nada.

Carlos: Creo que hay una narrativa de los venezolanos con los comediantes locales. Es muy marcado el odio a los comediantes venezolanos siendo venezolano, lo que es raro porque es como lo más cercano a tu identidad. Yo creo que el venezolano es muy echador de vaina y demasiada gente cree que puede ser comediante, entonces le restan valor. De ahí también nace el tema económico, que la gente tenga trabajos “reales” de 8 a 5 todos los días y no me da tanto, cómo es que tú contando un chiste sí te da plata…

Carluis: También creo que si la gente pagara las entradas eso haría que los comediantes se queden.

Carlos: O que te dediquen más tiempo. Muchas veces la gente te responde un chiste que no les gustó y te mandan un clip de Dave Chappelle y hay un tema con el comparar. No puedes compararnos con un hombre que tiene 40 años de carrera, porque eso es más que la cantidad de años en los que ha habido stand up en Venezuela. Y el tema del dinero: un comediante gringo con 100.000 seguidores, gira en Estados Unidos, vende tickets a 30 dólares, vende 5.000, 10.000 al año y menos algunos fees, ese tipo puede hacer sus 90 mil dólares anuales. Eso es un trabajo más que decente y se puede dedicar enteramente a eso. Aquí no tienes un país que te pague 10 dólares un ticket, lo tienes solo en ciertas ciudades. Si no creas una fantasía no vendes.

-Hablaban de Chucho, José Rafael, Led… ¿Quién es su inspiración?

-Carlos: Eso cambia regularmente también, pero a nivel local probablemente todos.

Carluis: A toda la comedia local la admiramos: El Cuartico, Escuela de Nada, De a Toque, Emilio Lovera, Nanutria…

Carlos: Mi comediante favorito varía cada dos años, en la actualidad es Taylor Tomlinson.

Carluis: Pero es que vas conociendo nuevos y descubres cosas, y yo lo veo para agarrar referencias.

-¿Cuál es el mejor consejo que les ha dado un comediante?

-Carluis: Gabo Ruiz me dio el mejor consejo. Yo estaba subiendo videos malísimos a Instagram cuando estaba comenzando a hacer stand up y él me preguntó “¿tú quieres ser standupero?”. Yo le dije que sí y me dijo que no me concentrara tanto en subir videos, sino en ser buen standupero y después buscar al público, que eso va a llegar con un poquito de trabajo y ya vas a tener un buen producto en los shows en vivo que ofrecer.

Carlos: Ese es el consejo más repetido en general, primero buscar la habilidad antes que la fama… Si te va mal pasas desapercibido…