Llevaba ya un año presentándose en teatros y Francisco Granados, el entonces jefe de redacción de UB, me dio esa encomienda que fue también un regalo: entrevistar a Norkys Batista.
Me tocó esperarla un rato y todavía recuerdo el efecto de su entrada. Así lo escribí en ese momento:
«Llega al apartamento de su manager con una maleta y todo empieza a oler dulce acá. Viste un pequeñísimo conjunto, un atuendo breve y ligero más apropiado para irse a la cama que para andar por Caracas. Pero es Norkys Batista y ese cuerpo hay que mostrarlo así como es ella: sin falsos pudores.
De pronto se saca las botas que la hacen ver altísima en sus espigadas piernas. Toda la visión del espacio comienza a ser la piel de Norkys, morena y brillante como el pelaje de un animal portentoso y seductor. Pero su actitud es seria, resuelta, es de “vamos a darle que el tiempo corre”. Y por estos días lo que le falta es justamente eso, tiempo: “Estoy entregada a mi nueva línea de accesorios, en una nota de empresaria”. Sin embargo, hay una palabra mágica que activa a una Norkys intensa, que no se toma a broma y sobre la que se explaya con una generosidad casi vehemente: orgasmo».
Eso fue en 2010. Orgamos se estrenó en 2009. Así que Norkys es la patrona del orgasmo desde hace ya 9 años y va camino a coronar la década enseñando -a su manera- a la gente una simple pero compleja lección de vida: hay que acabar bien. ¿No?
Desde el año 2006 cada 8 de agosto de celebra el «Día internacional del orgasmo femenino», lo que se traduce en la práctica en una fecha para hablar sobre el placer femenino sin tabúes ni falso moralismo.
Y vuelvo a citar a Norkys:
“La gente piensa que cuando tienen o no tienen orgasmos, alguno de los dos es responsable: o tu pareja, o tu novio, pero resulta que el único responsable de lo que sientes eres tú, nadie más. El orgasmo es individual. El orgasmo dura apenas segundos, 8, 10, 12; el menos afortunado dura 3 segundos, pero también es bueno, son segundos de gloria”.
“En las relaciones tienes la opción de hacer o dejar de hacer, pero todo se tiene que comunicar. Hay tres razones por las cuales las mujeres no tienen orgasmos: 1) cero conocimiento de su cuerpo 2) baja autoestima y 3) cero comunicación en la pareja”.
“Mujeres, compren su vibrador, mastúrbense que no van a ir a la quinta paila del infierno. En la medida en que conoces tu cuerpo puedes decirle a la otra persona qué te gusta y qué no”.
Y si te conoces bien, podrás decir como Norkys: “He sentido orgasmos de esos que se me van los ojos pa’tras, que es lo máximo: te relajas, se te quita todo…”.
(Morena patrona del orgasmo, si lees esto: te queremos otra vez en UB, no nos dejes desamparados)