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Trabajadores de Inparques denuncian ante la Fiscalía la situación de Canaima

Para el Sindicato Unitario Nacional de Empleados Públicos del Instituto Nacional de Parques (SUNEP-INPARQUES), los pañitos calientes no serán suficientes para erradicar el “grave problema” que embarga al Parque Nacional Canaima. Esta semana acudieron ante el Ministerio Público para denunciar que sí existe Minería Ilegal en Canaima y que los trabajadores de la institución se ven atados, ante los atropellos de la directiva de esta misma.

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Este viernes 12 de junio el SUNEP-INPARQUES acudió a la Fiscalía General de la Republica, para ampliar una denuncia que mantienen desde el pasado 25 de agosto de 2014. En esta ocasión consignaron pruebas de la minería ilegal que deteriora al Parque Nacional Canaima, la cual somete a un “grave riesgo a la salud de los pueblos indígenas que habitan allí y la sostenibilidad de los recursos estratégicos que se preservan en nuestro Parque”.

Los documentos consignados tratan de una extensión del expediente que el Sindicato ha abierto para denunciar el “descuido en que se encuentra nuestro medio ambiente, donde el abandono de áreas naturales ha diluido la capacidad que tenía Instituto Nacional de Parques (INPARQUES) para conservar y preservar los Parques Nacionales, Monumentos Naturales y Parques de Recreación”.

Marlene Sifontes, líder gremial de Inparques, declaró para El Estímulo que la gestión del Instituto es “opaca”, pues la precariedad en los equipos e insumos, las irregularidades en materia laboral y contractual, además la dirección de autoridades que no son expertas en la materia, mitiga la efectividad de los Guardabosques.

Sifontes explica el caso de Canaima es más complicado por los altos costos de manutención de los Guaradabosques y la falta de orden en asuntos como la minería ilegal: “No hay ley. Si tratas de ejecutar una medida, pueden incluso matarte. La solución debe ser una política completa e integrada de Estado”. El documento consignado señala que el caso del Parque Nacional Canaima “viene a ser otro episodio de desastre ambiental” que se suma a una serie de situaciones que el Sindicato viene denunciando desde hace un año. Entre ellas Sifontes destaca la construcción de casas para usos particulares en los Parques Nacionales Henry Pittier y Médanos de Coro o la edificación de una “ciudad inteligente cinco estrellas” que afectaría considerablemente el Parque Nacional Morrocoy.

Señala que estas son evidencias de que “no se están cumpliendo con la protección de estos espacios estratégicos para la nación que son fuentes de agua potable, hidroelectricidad, garantía de aire puro, salvación del planeta, en líneas generales”.

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