Coche lució como un domingo cualquiera. La gente aprovechó de hacer sus compras para la semana, la mayoría de los transeúntes caminaban con ropa deportiva y con bolsas en las manos. Otros lucían ropa alusiva a su parido político (Psuv). Cada cierto tiempo pasaban camiones con música a todo volumen haciendo propaganda por cualquiera de los 12 candidatos que participan en las primarias del partido del Gobierno en esa parroquia.
En el Liceo José Ávalos de Coche hay un poco más de 13.130 inscritos. Aproximadamente a las 3:30 de la tarde, habían votado 1.092 personas. La primera impresión al entrar al centro de votación es que la participación de ciudadanos era importante, pero al consultar a los votantes el panorama cambiaba. Lo que había era largas colas en las tres mesas habilitadas en dicho centro y pocos votos.
La lentitud a la hora de ejercer el voto fue lo que predominó en el transcurso de la mañana y parte de la tarde de este domingo. Muchos de los votantes se quejaban entre ellos por el retraso. Otros mostraban su descontento, quejándose en voz alta o cuando notaban la presencia de la prensa en el lugar.
Carmen Marcano, una militante del Psuv que votó en el José Ávalos, dijo que ella sabía de al menos tres personas que se habían ido a sus casas por el largo tiempo de espera para votar.
«Se quejaron de la lentitud que hay, y por eso se fueron a sus casas y no votaron. Los organizadores de este centro no tomaron en cuenta a las personas de la tercera edad y nos metieron a todos hacer una misma fila. Una de esas personas que se fueron está enferma y no podía esperar mucho tiempo parada», dijo.
En lo mismo coincidió José Decker, un hombre también de la tercera edad, que pegaba gritos diciendo que llevaba una hora en cola por culpa de los miembros de mesa.
«Tengo una hora en cola y esto no se mueve. Esto es culpa de la incapacidad de los miembros de mesas y los organizadores, ni que estas elecciones fueran presidenciales para haber tanto retraso. Tanto que criticamos a la cuarta y no hacemos nada por ser diferentes. Son unos incapaces», dijo Decker al tiempo en que recibió una llamada telefónica en la que pidió le guardaran una «cervecita bien fría» porque seguía en cola.
Molesto comentó que un amigo que lo acompañó a escoger a su candidato a las elecciones parlamentarias, se fue sin votar por el tiempo en que demoraba en avanzar la cola en la mesa 3 del José Ávalos.
Otro hombre que pidió no ser identificado, gritaba molesto que tenía más de una hora en cola y solo habían pasado a votar 15 personas en la mesa 2 del mismo centro.
«Yo también trabajo para el Psuv como muchos de estos miembros de mesa, pero no se justifica que sean tan incapaces y no agilicen el proceso, por el contrario, lo que hacen es retrasarlo. Yo vengo de repartir 600 comidas en varios centros de Catia, porque también estoy trabajando para el proceso, y resulta que llevo más de una hora para poder votar y aquí lo que hay es pura trabas. Le dan un carnet a cualquiera y lo que hacen es abusar y empañar el proceso», dijo el señor a quien enseguida lo rodearon dos uniformados de la milicia para preguntarle qué ocurría.
En medio del alboroto, unas personas apoyaban al que se quejaba de la lentitud en la votación, otros comenzaron a decir que era un «adeco infiltrado» que «venía a alborotar» lo que ellos consideraban un éxito por la participación que había.
Morella Moya, otra votante consultada, criticó que en las afueras de los centros estuvieran personas del Psuv haciendo propaganda política. «Hoy es un día para salir a votar, no para hacer propaganda ni campaña, y esto es una autocrítica que yo hago a los militantes del partido. Debemos ser conscientes y dejar de hacer lo que nos nos gustaría que hicieran otros. Después dicen que ganó fulanito porque estaba haciendo propaganda el propio día de las elecciones. Debemos ser transparentes», expresó.
Por su parte, Verónica Soto, una joven que fue a votar al José Ávalos porque en algún momento vivió en esa parroquia, pero actualmente reside en Guarenas, manifestó estar impresionada por la participación que hubo en estas elecciones internas. «Creo que la gente tiene miedo de que otros tomen decisiones dentro de la Asamblea Nacional, por eso salieron a votar y escoger a quien los representará en el Parlamento», dijo.
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