Un total de 200 funcionarios, de distintos cuerpos de seguridad, utilizando tanquetas, motos patrullas y hasta un helicóptero, peinaron la zona, en busca de las casas que servían de guarida al hampa.
Se presentaron varios enfrentamientos en donde cayeron abatidos 15 hombres, calificados por el gobierno como «antisociales», fueron recuperados 20 vehículos que había sido robados, se incautaron 12 armas de fuego largas, dos cortas y dos granadas. Durante el operativo fueron arrestados 134 personas, 32 de ellas extranjeras, según el parte policial.
El presidente de la República Nicolás Maduro, en una transmisión en Cadena Nacional ofreció todo su respaldo a las acciones policiales “cuenten con mi apoyo para depurar los cuerpos de seguridad y luchar por la vida y la paz en Venezuela”, señaló.
El alcalde del municipio Libertador y el Jefe de Gobierno del Distrito Capital, Juan Carlos Dugarte, visitaron la comunidad dos días después y se comprometieron a desarrollar obras de mejoras, desde la reparación de casas por la misión Barrio Nuevo, Barrio Tricolor, hasta remodelar escaleras, caminerias, construir un polideportivo y otra escuela.
Cuatro meses más tarde, los propios vecinos cuentan cómo se encuentra la comunidad en materia de seguridad. Varios líderes comunitarios cuentan sus impresiones.
“Yo te puedo atender, pero no te digo nada por teléfono, eso es muy peligros, te doy la entrevista en algún lugar fuera de la comunidad, donde nadie nos vea, aquí la cosa sigue ruda con los delincuentes y por favor no se te ocurra poner mi nombre por ninguna parte”, fueron las peticiones con el periodista de El Estímulo, para acceder a entablar la conversación.
Acordado el lugar y la hora, nuestro vecino llegó, cauteloso. Nos comentó que desde el 13 de julio no han cesado los enfrentamientos entre los policías y los ladrones en la Cota 905.
“Los sectores más problemáticos son los de la parte alta entre ellos Las Brisas, Las Torres y Las Quintas, allí se han escucha el plomo parejo. Han muerto delincuentes, policías, vecinos inocentes y hasta un niños de 8 años de edad, por los tiroteos que se pueden presentar en cualquier hora del día y la noche”.
Después de la primera acción de la OLP, se han registrado otros enfrentamientos, uno de ellos el 19 de Agosto con la banda del “Koki”, en donde fueron abatidos siete delincuentes. “Un mes después se presentó otro incidente con otra banda en el sector Las Quintas y murieron seis hampones más, también cayó un funcionario de la Policía Nacional”, señaló nuestra fuente.
En la Cota 905, después de ser activada la OLP, destacan el asesinado de una madre y su hija. La señora Alicia Cristina Maza de 64 años de edad, perdió la vida de varias puñaladas, en una casa ubicada en las Torres. Karina Cibides Maza de 32 años, hija de la señora Maza, fue asesinada de un disparo en la cabeza en la avenida Guzmán Blanco, ambas fueron supuestamente asesinadas por haber denunciado algunos delincuentes de la zona como culpables de la quema de siete casas.
También destaca la muerte de otra dama, Maritza Sánchez, de 55 años de edad, coordinadora de la Misión Barrio Nuevo, asesinada de varios disparos mientras participaba en una asamblea de ciudadanos.
“Aquí vivimos en un solo susto, vivimos con miedo que nos pueda pasar algo a nosotros o a cualquiera de nuestros familiares, no estamos seguro ni dentro de nuestras propias casas, como así quedó demostrado con el asesinato del niño de 8 años que recibió un tiro en la sien mientras que caminaba por una pasillo de su casa”, indicó esta fuente.
Señaló que las autoridades han cumplido con su compromiso de llevar a cabo el arreglo de las viviendas, las caminerías, se ha hecho de atención social, mejoras de las canchas, se construye el polideportivo, se acondiciona un espacio para el estacionamiento, se construye una escuela y hay más vigilancia. También cuentan con un nuevo servicio de metrobús, que ha venido a mejorar el servicio de transporte público.
“Pero aún así nuestro principal problema sigue siendo la inseguridad, los vecinos vemos cosas, pero no nos atrevemos a denunciar por terror a correr el mismo destino que las mujeres asesinadas”, explicó.
En la Cota 905, guardan la esperanza que se logré erradicar a los delincuentes que han impuesto su ley desde hace muchos años. “Pero la policía tiene que tener mucho cuidado, estos integrantes de las bandas tienen muchos contactos, poseen armas de todos los calibres y hasta se dicen que guardan varias granadas, que ya han intentado usar contra los funcionarios, por los momentos seguiremos pidiendo a Dios, que no nos desampare”, dice la fuente.
