López propone una «hoja de ruta» y llama a los venezolanos a una «escala de presión de calle pacífica y democrática». Citando a Mahatma Gandhi y a Nelson Mandela, el fundador de la tolda naranja convoca a una «lucha no violenta e irreverente» al advertir que habrá represión por parte del régimen.
La hoja de ruta que se plantea se fundamenta en tres ejes: internacional, político y calle.
En el internacional, López llama a «redoblar» los esfuerzos que se vienen haciendo y agradece los pronunciamientos de distintos ex presidentes y presidentes. También pide solicitar a la Organización de Estados Americanos (OEA) y al Mercosur activar la Carta Democrática y todos los mecanismos regionales contra lo que califica de «dictadura».
«La dictadura tendrá que tomar sus decisiones. Nosotros ya tomamos la nuestra», dice López en la carta.
En lo político y social, llama a una «desobediencia activa» y a realizar una consulta nacional a los venezolanos para preguntarles si quieren elecciones presidenciales». Pide debatir la realización de esta consulta en el seno de la Mesa de la Unidad Democrática, así como de una «toma de las calles de Venezuela» en marzo para pedir elecciones generales.
López insiste en una «rebelión de votos» y exhorta al Consejo Nacional Electoral (CNE) a «rectificar o el pueblo les pasará por encima».
El dirigente advierte en la carta que si el Consejo Nacional Electoral y el Tribunal Supremo de Justicia no permiten elecciones, «haremos elecciones nosotros mismos. No permitiremos más cronogramas de plastilina. Hemos decidido romper las cadenas».
A juzgar por la convocatoria de este sábado, la oposición tendrá que superar un obstáculo, quizás más difícil de los que le pone el gobierno: el desinterés de sus seguidores para apoyar las actividades que organizan.
– Unidad por Leopoldo –
La manifestación tuvo como destino final la autopista Francisco Fajardo a la altura del distribuidor Altamira en Caracas, tras concentrarse en cuatro puntos: Santa Fe, Chacaíto, Caurimare y Parque del Este, pero estos quedaron grandes pues la convocatoria no tuvo mucha acogida. Todos confluyeron en la autopista donde los esperaba una camión que sirvió de tarima.
Los diputados Henry Ramos Allup, Miguel Pizarro, Stalin González, Jorge Millán, Richard Blanco dijeron presente para rechazar los 1.095 días que lleva preso López en una cárcel militar.
Personas de distintas partes del país también fueron a expresar su apoyo al dirigente político, intención que fue «premiada» al conseguir productos de primera necesidad que no se ven con frecuencia en el interior. Ese fue el caso de José Sánchez quien llegó a Caracas junto a su familia desde el estado Barinas.
Ellos salieron desde Santa Fe y aprovecharon que llegó jabón a un automercado cercano para comprarlo, ya que en su región lo consiguen a Bs 12.000, mientras que aquí pudieron adquirirlo en Bs 3.900. Los integrantes de la familia Sánchez hicieron todo el recorrido con sus bolsas de jabón y gritando «no más dictadura», la consigna de la movilización que repetían todos los presentes.
El alcalde del municipio El Hatillo, David Smolansky pedía a la gente no desmoralizarse ni desesperanzarse porque «eso es lo que quiere el gobierno de Nicolás Maduro».
El ambiente en la autopista distaba mucho de anteriores concentraciones. Se percibía un aire distinto y hasta el ambiente musical no era el mismo. Las canciones opositoras que se utilizaban cedieron su lugar a pedazos de discursos de López y hasta a una música que el propio Ramos Allup calificó de «luctuosa» y pidió cambiar por un «joropo».
Uno de los discursos que más conmovió a los presentes fue el de una joven que narró cómo asesinaron a su tío y meses después, a su novio para robarlos.
«Es indescriptible lo que es estar en un cementerio despidiendo a un ser querido. Me siento desesperada en un país sin oportunidades», decía la joven quien tuvo que hacer varias pausas para secarse las lágrimas.
Por su parte, el ex presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, llamó a los distintos partidos a «estar más unidos que nunca» mientras calificaba al gobierno de «misógino» por atacar a Lilian Tintori, esposa de López, quien el martes se reunió con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Bajo un fuerte sol, pasaban las horas. La actividad se extendió por más de tres horas mientras los presentes armaban un mosaico con la cara de Leopoldo López en el piso.