Más de 20 heridos, ocho detenidos, un negocio saqueado, vehículos destrozados, puertas y ventanas rotas fue el resultado que dejaron más de siete horas de ataques a los habitantes de la avenida Rotaria, por parte de cuerpos de seguridad del Estado (Guardia Nacional, Policía del Táchira y Policía Nacional Bolivariana).
Los habitantes de la zona relataron que desde tempranas horas del martes 18 de julio, salieron a protestar en contra de la Asamblea Nacional Constituyente y del gobierno nacional, acción que fue dispersada a los pocos minutos por las autoridades, llevándose a ocho jóvenes de la “resistencia”, detenidos.
“Manifestábamos contra la constituyente cuando llegó la Guardia Nacional a arremeter en contra de los muchachos que pacíficamente cerraban la vía. Se llevaron a ocho de ellos presos y están incomunicados, no los ha podido ver ni la familia, ni los abogados”, dijo Clebys Duque, vecina de la urbanización Rómulo Colmenares.
Con casquillos y restos de bombas lacrimógenas en la mano, Duque indicó que la edad de los jóvenes detenidos oscila entre los 17 y 19 años.
La actuación de los cuerpos de seguridad fue calificada de “brutal” por los testigos de los hechos. “A uno de detenidos le pasaron tres veces una moto por encima y a otro que está recién operado de la mandíbula (es futbolista) le dieron un golpe que le sacó los retenedores. A todos los golpearon brutalmente”, dijo Erika Soto, también habitante del sector.
La acción de los organismos de seguridad dejo 22 heridos en la zona, precisaron testigos.
“A un muchacho le dieron un perdigonazo en un ojo. No sabemos cómo se encuentra porque se lo llevaron a otro lugar a curarlo y resguardarlo. Otra joven fue atacada no solo de perdigón sino que los cuerpos de seguridad dispararon a un panal de abejas que estaba cerca y ella fue víctima del enjambre. Un niño al ver la represión salió corriendo y por temor de no ser alcanzado por un perdigón, se cayó y se sacó el hombro”, denunció.
Relató que la Guardia Nacional dejo un mensaje a la comunidad: “Nos amenazaron y dijeron que la cosa se pondría peor para quienes estábamos protestando, amenaza que no va a detener nuestra lucha porque a los muchachos no los dejaremos solos».
Por su parte el diputado al Consejo Legislativo del Táchira, Gustavo Delgado, aseguró que no solo fueron detenidos y golpeados, también los despojaron de algunas de sus pertenecías entre ellas celulares y dinero, además que hay un joven desaparecido.
“Dicen que los detenidos están en buenas condiciones y es mentira, los jóvenes fueron maltratados por los cobardes de la Guardia Nacional. Hay un joven que nadie sabe de su paradero y yo mismo pude ver cuando ingresaron a la sede del Zonal 21 de la Guardia Nacional, a tres manifestantes de Táriba, venían golpeados y a uno de ellos le sangraba la cara”, precisó.
Otra de las preocupaciones manifestadas por Delgado es que a los detenidos los mantienen durmiendo dentro de una patrulla. “Hay cientos de personas detenidas que tienen hasta un año durmiendo en las patrullas en el Zonal 21”, denunció.
Daños colaterales
En recorrido hecho en la comunidad El Estímulo, pudo constatar que las puertas y ventanas de las viviendas de la zona han sido reforzadas con láminas de aluminio y cartón para impedir que se rompan más vidrios y evitar el paso de bombas lacrimógenas y los perdigones lanzados por las autoridades.
Las puertas y garajes reflejan los signos de la represión, ya que en su mayoría están marcadas con rastros de perdigones y balas.
“Los uniformados agarraban a patadas las puertas y los portones, pretendían ingresar a las viviendas”, señaló una vecina.
Con los motorizados llegaron los robos
Cuando ya creían que habían cesado los ataques, una lluvia intensa cubría la zona y los vecinos se disponían a dormir. Cerca de las 9:00 PM, un grupo de civiles armados llegó disparando, acompañado de la Guardia Nacional, dijo Erika Soto, habitante del lugar.
«Se había garantizado la seguridad de las unidades de transporte público, que de manera voluntaria se sumaron a nuestra protesta y estaban cerrando la avenida. Pero no se pudo resguardarlas más porque cuando llegaron los motorizados les rompieron los vidrios, les robaron las baterías, golpearon a uno de los choferes y encima les dispararon para asustarlos», narró.
“Nos amenazaron, nos decían que a las mujeres nos iban a violar. Nos estamos asesorando con abogados para ejercer acciones en contra de la Guardia Nacional que vienen y en vez de defendernos de estas personas lo que hacen es amedrentarnos”, señaló.
A Nelson Cortez, el vendedor de lotería del barrio, le saquearon el kiosco. “Se llevaron la impresora fiscal, las conexiones de cable y tres cajas de refrescos de los que yo vendo. La pura maquina me cuesta 12 millones de bolívares. Eso fue cuando llegaron los colectivos, estaba lloviendo mucho y lo único que se escuchaba era plomo limpio. Mi llamado es a seguir luchando porque las cosas no pueden seguir así”, dijo.
A pesar de las acciones sufridas, los vecinos aseguraron que no van a desistir de la protesta hasta alcanzar la salida tanto del Presidente, como del gobernador del Táchira, José Gregorio Vielma Mora.
“La urbanización Rómulo Colmenares seguirá en la calle porque no queremos constituyente, queremos un país en democracia”, sentenciaron los vecinos.]]>