El pequeño "Juego de Tronos" por la presidencia de la Asamblea Nacional
Intereses personales, pugnas internas y hasta la «zulianidad», son factores claves para esta elección. Que no es cualquier trámite tratándose de un año electoral.
De acuerdo al pacto de gobernabilidad suscrito por los principales partidos que integran la Mesa de la Unidad, devenida desde hace unos a meses a simplemente «Unidad», y que tienen representación parlamentaria, la presidencia de esta instancia es rotativa para el llamado G4, es decir, Acción Democrática (AD), Primero Justicia (PJ), Voluntad Popular (VP) y un Nuevo Tiempo (UNT).
Para 2018, le corresponde a la tolda azul, partido que ha tenido difícil definir quién será el sucesor de Julio Borges.
Enrique Márquez, quien ya fue vicepresidente de la Asamblea; la presidenta de la Comisión de Política Interior, Delsa Solórzano; Stalin González, actual jefe de fracción; Timoteo Zambrano y Omar Barboza están en la «pugna» por el puesto.
A dos días de la instalación del nuevo periodo ordinario de sesiones, aún no hay nombre.
Según fuentes cercanas al partido, Delsa Solorzano no contaría con los votos internos amen de ser percibida como «radical» .
Por su parte, Enrique Márquez, que un primer momento pintaba como la opción más lógica, le juega en contra los «roces» que tendría con la cabeza del partido, Manuel Rosales, quien estaría pidiendo su destitucuón como presidente de la tolda azul.
Luego vendría el nombre que ha generado todo tipo de opiniones: el de Timoteo Zambrano. Es considerado como un político con experiencia y con «muchos contactos». En la actualidad, forma parte de la delegación opositora que atiende las conversaciones con el gobierno desde las primeras reuniones en 2016.
Zambrano no se postuló para presidir el Parlamento, sin embargo, su nombre comenzó a sonar. Al parecer, contaría con el apoyo de Rosales pero no con el apoyo político de PJ y VP.
Las mismas fuentes aseguran que una eventual decantación por Zambrano pudiera poner fin al acuerdo de gobernabilidad y con ello, a la «Unidad» en la Asamblea Nacional en un año electoral.
Una de las principales críticas sería la ausencia de Zambrano dentro del Parlamento estos dos años.
Entran en el juego Omar Barboza, quien también contaría con el apoyo de Rosales, y Stalin González. Ambos son reconocidos por no ser radicales y porque no generan «antipatías» en el resto de partidos.
González es quizás el más subestimado de todos los posibles elegibles. Pero también el que podría tener más cartas bajo la manga, debido a su capacidad de maniobra y negociación.
Ante un eventual «retorno» del oficialismo al Parlamento -si las cosas caminan en República Dominicana- Barboza y González pudieran ser piezas claves para «llevar la fiesta» dentro del Hemiciclo. UNT cuenta con 19 diputados.
Otro punto, motivo de discusiones internas dentro de varios partidos, ha sido la actitud del Parlamento con la presidencia bajo el brazo de UNT y la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) pues se trata de la organización cuyo líder, el ex candidato a la gobernación del Zulia, estaba dispuesto a juramentarse ante ella.
A muchos les preocupa una posible «políticos de cohabitación» que tratarían de evitar equilibrando las fuerzas.
La presidencia de la Asamblea para este 2018 no es un mero acto administrativo contrario a lo que muchos consideran. Puede marcar un factor clave de alianzas – o divisiones según las decisiones que se tomen- en un momento de definiciones para gobierno y oposición.
Este jueves pudiese desvelarse el misterio.
