Venezuela

Observatorio Venezolano de Prisiones denuncia muerte de preso por desnutrición

Humberto Prado, director del OVP, señaló que la crisis penitenciaria pasa por su peor momento, no solo al destacar los hechos violentos que en los centros penitenciarios, sino por la escasez de medicinas y alimentos, el hacinamiento y demás actos que atentan contra los derechos humanos

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comisionado presidencial
Fotografía: Prensa Observatorio Venezolano de Prisiones

El martes, Alberto Jesús Caraballo murió en el Hospital Central de Maturín. El hombre, portador de VIH y paciente de tuberculosis, presentaba un cuadro de desnutrición, motivo por el que ingresó al centro de salud el 28 de febrero, proveniente desde la comandancia de la Policía del Estado Monagas.
La causa que lo obligó a ser atendido y que terminó por acabar por su vida fue denunciada por el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP).
Humberto Prado, director del OVP, señaló que la crisis penitenciaria pasa por su peor momento, no solo al destacar los hechos violentos que en los centros penitenciarios, sino por la escasez de medicinas y alimentos, el hacinamiento y demás actos que atentan contra los derechos humanos.
Antes de fallecer, la víctima, de 54 años de edad, confesó a sus familiares que solo recibía agua de yuca. Además, apuntó que en donde se encontraba detenido las autoridades dijeron que no se hacen responsables por los alimentos de los presos.
Caraballo fue detenido en septiembre de 2017 luego de robar 43 de cable telefónico. Meses después, seguí esperando por ser procesado por los tribunales.
Prado también manifestó su rechazo a otra baja ocurrida.
Carlos Enrique Pérez, de 21 años de edad, murió a manos de sus compañeros de celda en los calabozos de la Policía Nacional Bolivariana ubicada en Boleíta, estado Miranda.
El occiso despertó el malestar de los que se encontraban junto a él luego de hacer sus necesidades dentro de la celda, esto causado por un fuerte problema estomacal que acusaba. Inmediatamente fue golpeado por ellos hasta quedar inconsciente.
Minutos después, fue ahorcado para fingir que se había suicidado.
“La situación se escapó de las manos del Estado y la titular del ministerio de Servicios Penitenciarios prefiere hacerse de la vista gorda, pues es evidente que no sabe cómo solucionarlo”, expresó Prado.]]>

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