Médicos y docentes denuncian vulneración de contratos colectivos

Con la consigna “la salud y la educación en una misma lucha”, docentes, médicos, enfermeras y demás trabajadores dependientes del Ministerio del Poder Popular para la Salud, se tomaron la avenida Lucio Oquendo de San Cristóbal, adyacente al Hospital Central, para exigir al gobierno nacional respeto a las categorías y escalafones profesionales, así como a las contrataciones colectivas que se estarían violentando.

“Nos violentaron, con el nuevo aumento decretado, alrededor de 10 cláusulas del contrato colectivo, tanto variables como fijas que durante tantos años de lucha gremial pudimos obtener los trabajadores de la salud. Evadieron toda la tabulación de nuestro contrato colectivo y eliminaron casi todas las clausulas. Ahora un médico o un trabajador profesional va a ganar igual a lo que gana cualquier otro trabajador no profesional, eso es algo ilógico”, dijo Luis Quero, Secretario de Profesionales y Técnicos de la Salud.

Llamar la atención del ejecutivo nacional, señaló el representante gremial, es lo que buscan los trabajadores de la salud con la protesta de calle que ya se eleva a 88 días de calle a nivel nacional.
“Las protestas las vamos a continuar a nivel nacional hasta lograra un salario digno. Vamos a permanecer en la calle hasta que no seamos escuchados”, aseguró.

Por su parte, el médico representante del Comité Sectorial e Intergremial de Salud, Omar Vergel, exigió en nombre también de los educadores el respeto a Constitución Nacional.

“Este régimen borró de un plumazo todos los derechos ganados por los empleados públicos en 65 años de lucha”, comentó.

Con la nueva tabla salarial de los médicos en mano, Vergel explicó que un médico, director de hospital tipo IV con 20 años de servicio y ocho horas de trabajo, estará devengando un sueldo de bsS 3.193.

“Ayer (martes) se dañó el silenciador de mi carro y comprarlo me salió en bsS 8.500, es decir que un director de hospital con más de 20 años de estudios y servicio, en el escalafón más alto de la escala médica tienen que trabajar tres meses sin comer para pagar el silenciador de su carro”, manifestó.

Una salida pacífica a la crisis, abrir el canal humanitario y recobrar la democracia en el país, son también parte de las exigencias que piden los médicos a “un gobierno sordo, ciego y mudo que mantiene a la gente sometida en colas de dos tres días para comprar comida o combustible. Aquí no estamos exigiendo solo un salario o salud, ya esto es un problema de país (…) llamamos a la consciencia ciudadana”.

Vulneran derechos

La vulneración de los derechos contractuales movió a los docentes de varias escuelas de la región a unirse a la protesta.

“Nos acaban de pagar la mitad del sueldo mínimo con los descuentos pero aún no sabemos cuánto será nuestro salario real. Las mejoras en la infraestructura escolar, el pésimo servicio de transporte, las colas para la gasolina, para comprar gas y comida son temas que también nos preocupan y no llevan a salir a exigir nuestros derechos y mejor calidad de vida. No nos queremos ir de Venezuela. Queremos quedarnos aquí, luchando por el país”, dijo Karelis Sánchez, docente de la escuela Ramón Buenahora de San Cristóbal.

Por su parte, la docente Belkis Valera, una de las más antiguas de la escuela Buenahora, con lágrimas y sosteniendo un cartel donde exigía respeto a la labor docente, comentó a El Estímulo que lo devengado como salario no alcanza para cubrir ni la cuarta parte de su alimentación mensual.

“Es inconcebible que nuestro contrato haya sido vulnerado y no se ajusta a las categorías. Soy categoría III y el salario que me acaban de depositar no concuerda con lo establecido en la contratación colectiva”, denunció.

La docente reveló en medio del llanto que puede solventar en parte la crisis económica gracias a los aportes que mensualmente le hace una hija que vive en Colombia.

“Mi hija es la que me ayuda porque mi salario no compensa mis necesidades… no alcanza y aun haciendo colas de seis y ocho horas para comprar regulado solo puedo adquirir tres o cuatro productos y me quedo sin comprar verduras, ni carnes. El gobierno debe sacar cuentas porque lo que paga no es suficiente para comprar lo que está en la calle”, agregó.

Eduardo Rey, del Movimiento “Desarrollo Sociedad y Democracia para Venezuela”, formó parte de la protesta que cerró el paso por unos minutos en la importante arteria vial de la capital tachirense.

Rey dijo a El Estímulo que ya las protestas no son exclusivas del estado Táchira, “se están viendo en toda Venezuela, como las colas por gasolina se ven en varios estados del país, (Barinas, Lara y Portuguesa). Nosotros buscamos que los ciudadanos se unan en medio de la protesta pacífica y organizada para que se hagan valer sus derechos para salir de la crisis en la que se encuentra el país”, precisó.