El documento señala que la denuncia es contra «quien ocupa ilícitamente la función de Presidente de la República Bolivariana de Venezuela».
Asimismo, incrimina a los funcionarios que conforman el gobierno de Nicolás Maduro, «por ser autores de los delitos de encarcelación y tortura en perjuicio de Juan Carlos Requesens Martínez, y el delito de persecusión en perjuicio del ciudadano Julio Andrés Borges Junyent».
Según Ortega Díaz, estas acciones demuestran que en Venezuela hay un ataque sistemático contra los ciudadanos que se encuentran en contra del gobierno, algo que previamente ya había denunciado ante esta instancia.
Con este escrito, la Fiscal en el exilio asegura que el Estado está enviando «una vez más un mensaje claro a la disidencia, afirmando que de cualquier forma quienes son sus adversarios serán objeto de procesos penales, sometidos y disminuidos en su integridad humana».
Desde su exilio, Luisa Ortega Díaz ha denunciando al gobierno de Nicolás Maduro por la ruptura del hilo constitucional en Venezuela, incriminándolos además de estar relacionados con corrupción, lavado de dinero, narcotráfico y torturas a personas que se encuentren detenidas por causas políticas.