Venezuela

Vivir en Maracaibo

En Zulia actualmente sólo se producen 300 megavatios, lo que cubre un 15% de la demanda eléctrica y es de suponer que eso es lo que genera la crisis / por Saúl Jiménez

Publicidad
Maracaibo a oscuras. Archivo AP
Archivo AP

A comienzos del año, fui a visitar a Patricia, amiga de origen maracucho y residenciada en Valencia desde hace varios años, pero que tiene el compromiso de pasar todos los fines de año con su familia en su querido Maracaibo, allá en Sierra Maestra. Me imagino que el nombre es un homenaje a la revolución cubana y que en sus inicios, hacia los años 50 y 60, se instalaron allí muchas invasiones en diferentes ciudades de Venezuela y que le pusieron esa denominación  dada la efervescencia de dicha gesta para la época.

Luego de los saludos y parabienes, le pregunté sobre el estado de su familia  y a partir de allí se inició un relato triste de personas alegres como son los maracuchos, Patricia comenzó diciendo que Maracaibo es toda una calamidad, pues los servicios están por el suelo y hay zonas donde muchas veces pasan hasta 12 y 14 horas sin energía eléctrica ni internet. Explicó que en su casa se han quemado dos neveras por los bajones de electricidad y poco a poco se han dolarizado la economía y la vida, ya que no se consiguen bolívares. Solo pesos, dólares o euros.

Gasolina a precios internacionales

Le pregunté si esa gasolina la venden así en las bombas surtidoras y me respondió que no: “Tú vas a un barrio que se llama El Hediondo, cerca del terminal de pasajeros o en la C3 vía Los Bucares, y ahí consigues las pimpinas con la gasolina que trafican clandestinamente, pero en forma pública porque eso todo el mundo lo sabe”.  Es decir, el Gobierno y las autoridades se hacen la vista gorda y ven para otro lado, de modo que los que viven de traficar las necesidades de sus semejantes  hacen lo que quieren y trastornan la vida a toda una población.

Lo más triste de esta situación es saber que Zulia fue el primer estado del país donde se inició la explotación petrolera en gran escala cuando el 31 de julio de 1914 arrancó el pozo Zumaque I en Mene Grande, llegando a tener el estado Zulia la mayor producción petrolera del país cuando en 1971 llegó a la cantidad de 3 millones 65 mil barriles diarios, pero que actualmente está bombeando apenas 249 mil barriles diarios.

Aún así, podemos señalar que es el estado que le genera mayor riqueza petrolera al país por cuanto esa producción tan baja significa el 25% de la producción nacional en los actuales momentos, y sin embargo es una de las entidades más golpeadas y abandonada dentro de la crisis que vivimos en Venezuela.

Industria deteriorada

Es muy triste toda esta situación del Zulia y Maracaibo. Al revisar las cifras nos encontramos que el estado es el primer productor de diversos rubros agrícolas y pecuarios como queso, ganado bovino, ovino, aves, la palma aceitera y uva. También ocupa el segundo lugar en huevos y el tercer puesto en cambur, plátanos y ganado caprino, además de los demás cultivos como caña de azúcar, coco, yuca, auyama, ocumo, algodón, frijol, melón y sorgo. Podemos afirmar, pues, que Zulia es un estado con capacidad de autoabastecerse.

Agua y electricidad

Otra situación absurda vivida en Zulia se relaciona con la electricidad, campo al que se han destinado  una gran cantidad de inversiones fuertes o por lo menos aprobaron los recursos para el parque eólico por 220 millones de dólares y con capacidad para generar toda la demanda de La Goajira; y por otro lado la construcción de 11 termoeléctricas con una capacidad de producción de 2000 megavatios cuando el estado tiene una demanda de 1900 megavatios. Es decir que si estuvieran funcionando todos estos equipos el Zulia estuviera autoabastecido y con un pequeño excedente; pero la realidad es otra y actualmente sólo se producen 300 megavatios, lo que cubre un 15% de la demanda y es de suponer que eso es lo que genera la crisis.

La otra calamidad que viven los zulianos, especialmente Maracaibo es la situación hídrica, ya la región cuenta con 13 cuencas generales como Socuy, Cachirí, Machango, Río Palmar y otras que son productoras de agua para los embalses. O sea que el Zulia, siendo privilegiada por la naturaleza por su posición geográfica, no goza de un óptimo servicio de agua producto de la falta de mantenimiento de las plantas potabilizadoras.

Con toda esta realidad, los zulianos se preguntan por qué la autoridad regional y las municipales no se abocan en conjunto y con el gobierno nacional a buscar una solución definitiva a los problemas de los servicios del estado, especialmente de Maracaibo, de modo que la población pueda mejorar su calidad de vida y lograr repotenciar su capacidad productiva para volver su estado a lo que otrora fue: Una potencia económica que aporte al desarrollo del país.

Publicidad
Publicidad