Chile anunció que retomará las expulsiones masivas de migrantes en situación irregular, en su mayoría venezolanos, que ingresan por pasos no habilitados.
El ministro del Interior, Rodrigo Delgado, anunció la reanudación de los vuelos de expulsión, luego de haber completado cuatro entre febrero y agosto de este año. En ese lapso expulsaron a 547 personas, mientras que durante todo 2020 los expulsados sumaron 1.365 migrantes.
El último vuelo de deportación que realizó el gobierno fue en agosto pasado, luego que la ONU expresara su preocupación por esta medida. Tribunales chilenos detuvieran estas expulsiones tras admitir decenas de recursos de amparo auspiciados organizaciones que las critican porque vulneran los derechos de los migrantes.
Los migrantes venezolanos, la mayor colectividad extranjera en Chile con 455.000 personas registradas, encabezan la lista de ingresos clandestinos de enero a julio, con 17.914, cifra superior a los 12.935 casos de 2020.
Frenar la ola de migrantes
«Hemos tomado nota de las recomendaciones, hemos revisado nuestros procesos, somos respetuosos de los fallos, pero en ese contexto durante las próximas semanas vamos a retomar las expulsiones», dijo Delgado, en declaraciones a la prensa en Santiago.
El anuncio se produce también en medio de un creciente aumento del ingreso de migrantes por pasos clandestinos en la frontera con Bolivia, en el norte chileno, por donde han cruzado 23.673 migrantes en los primeros siete meses de 2021, casi 7.000 más que en todo el año pasado.
«Chile es hoy día un destino migratorio atractivo para muchos (por) la situación sanitaria, las vacunas (en contra del covid-19), la situación económica, la necesidad de emplear a personas que, muchas veces, no se están empleando en distintos rubros», afirmó el ministro.
La localidad chilena de Colchane, a unos 3.650 metros de altitud, concentra el mayor número de migrantes que cruzan el inhóspito Altiplano, donde las autoridades locales sostienen que a inicios del año sufrió un colapso por la llegada de miles de indocumentados y donde al menos han muerto 11 migrantes por las duras condiciones climáticas de la zona.
Desde Colchane al sur
«En esto quiero ser muy claro, si uno revisa la estadística mientras pudimos expulsar nos fue bien con el flujo migratorio en la frontera con Colchane. Lamentablemente cuando tuvimos que dejar de expulsar subió el ingreso clandestino», explicó Delgado.
Solo en agosto, 331 extranjeros, de ellos 260 venezolanos, llegaron hasta Colchane. El resto son de nacionalidad boliviana, peruana y colombiana, precisaron las autoridades.
Los migrantes venezolanos, la mayor colectividad extranjera en Chile con 455.000 personas registradas, encabezan la lista de ingresos clandestinos de enero a julio, con 17.914, cifra superior a los 12.935 casos de 2020.
«Venezuela sigue siendo el país con el mayor porcentaje de residentes en Chile en las nueve regiones, siendo la más alta en le Región del Biobío, que concentra un 49,1%» de los venezolanos.
Le sigue Perú, con un 36,9% residiendo en la Región de Arica y Parinacota y los nacionales de Haití que viven mayormente en la Región del Maule, con 35,0% de su población migrante asentados en esa región, según informes del Departamento de Extranjería y Migración de Chile.