Economía

Los Roques, paraíso que no escapa de la crisis

El gobierno declaró al Archipiélago de Los Roques en estado de emergencia con el fin de poder garantizarle a la población el suministro de servicios básicos: alimentos, energía eléctrica, agua potable y combustible, de acuerdo con el Decreto Presidencial N° 2.556, publicado en Gaceta Oficial Nº41.035 de fecha 21 de noviembre. 

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Por Pierina Sora (@pierast )
La medida presidencial se aplicará por 60 días prorrogables debido al fenómeno natural denominado mar de fondo que el pasado 5 de octubre de 2016, ocasionó daños considerables en parte de las infraestructuras de la isla del Gran Roque.
El gobierno asegura que distintos ministerios trabajan de manera conjunta para solventar la situación.

Paradisíacas playas, hermosos paisajes y las mejores comidas a base de pescado y langostas atraen cada año a miles de turistas a Los Roques, uno de los destinos favoritos de los venezolanos, de clase pudiente, y de extranjeros. Pero este sitio de ensueño que depende económicamente del turismo, no escapa de la escasez de alimentos, de la crisis eléctrica ni del racionamiento de agua.

Las palabras del expresidente Hugo Chávez se quedaron atrás y se convirtieron –quizás–en un castigo para los habitantes de Los Roques cuando, en aquella alocución en el año 2011, declaró que una vez tuvo que explicar en Europa a alguien que creía que Los Roques era un país y que no pertenecía a Venezuela. «Mucha gente en Europa habla de Los Roques como si fuera un país, yo una vez tuve que aclararle a alguien que Los Roques es de Venezuela, con mapa y todo, no me quería creer», afirmó Chávez en el Palacio de Miraflores.

Definitivamente, uno de los paraísos que tiene Venezuela, y que está a solo treinta minutos desde el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar, se convirtió en otro país.  Dos lancheros que no desean identificarse y tampoco permiten grabar sus declaraciones apuntan que su zona es diferente a las demás de Venezuela. “Aquí todo está dolarizado. Para acá vienen muchísimos turistas”, dice el primero. Lo único que tiene el archipiélago desigual al resto de Venezuela es que no hay inseguridad. El primer lanchero, a quien llamaremos Daniel, asegura que lo bueno de vivir allí es que puedes caminar hasta las cinco de la mañana si deseas y que los restaurantes que trabajan hasta las tres de la mañana amenizan el lugar con música y deliciosos tragos.  “Aquí los extranjeros se gozan la música. A la gente tú la ves luciendo su iPhone. ¿Qué caraqueño puede hacer eso?” se pregunta mientras limpia su patrimonio, que es la lancha.

La crisis general en Los Roques no es muy diferente a la que se ve en el resto del país: hay bachaquerismo, la inflación está disparada, hay racionamiento de luz y de agua.

El otro transportista, a quien mentaremos Luis, asegura que el problema del agua siempre ha existido –y está más grave– que en todo el país, y que también la escasez los ha golpeado duramente y que son por estos factores por los cuales los turistas cancelan sus reservaciones. “Durante 2015 y lo que va de este año el número de turistas ha bajado en comparación con otros años. Aquí ya no vienen tantos extranjeros como antes, es que la inseguridad desde que llegas al aeropuerto aterra a cualquiera. La harina pan y el arroz que son los productos con los que más trabajan en las posadas cuesta conseguirlos, pero hay que pagarlos en el mercado negro”, relata entre sonrisa para lucir las piezas de oro pertenecientes a su dentadura.

Ambos trabajadores de la zona aseguran que los productos de higiene personal también son un dolor de cabeza. “La oferta de productos de cuidado personal es insuficiente para la cantidad de personas que vivimos aquí. A veces el Gobierno realiza operativos de abastecimiento, pero con la misma que llegan, con la misma se acaban muy rápido. Cueste lo que cueste el producto hay que pagarlo. Pero nosotros no somos Cuba, a nosotros nos da vergüenza decirle a algún pasajero mira regálame un desodorante si tienes. Es mejor no hacer eso”.

Ante estas dificultades de abastecimiento indican que al turista hay que tratarlo como un “rey” y que hay que ofrecerle un buen menú y servicio, pues algunos por su buen trabajo reciben propinas en moneda extranjera y esto para ellos es más que suficiente.

Sobre quiénes son los que más ingresan a Los Roques, Luis indica que, a pesar de la crisis económica que hay en el país los venezolanos ocupan el primer lugar entre los visitantes. Luego le siguen los brasileros, argentinos e italianos.

Mientras toma un respiro por el ajetreo de atender a los turistas, Dany Marquina, quien tiene 15 años trabajando como operador turístico en Los Roques, asevera que el promedio de visitantes desde el año pasado ha variado mucho en comparación con 2014. Marquina señaló que durante la temporada alta de 2015 el porcentaje de visitantes bajó 60%, mientras que en la temporada baja fue de 20%.

Para este año, durante los asuetos de Carnaval y Semana Santa la asistencia fue de 80% y para las fechas siguientes las cifras bajaron a 30%, pero en años anteriores -cuando no había fallas de servicios- el promedio rondaba entre 80 y 85%. Al preguntársele el por qué sobre las cifras de turistas, Marquina concuerda con los lancheros e indica que todo se debe al mal estado de los servicios básicos, lo que ha limitado las ventas de las posadas. A esto le añade la poca oferta de vuelos, los altos costos de los boletos y estadía. “La inflación va incrementando y también aquí todo va subiendo para la gente”, agrega a sus declaraciones.

“Los servicios principales como la luz y el agua han sido afectados principalmente por la mala gestión de la administración pública. Cuando no hay agua se usan las cisternas que son trasladadas en barcos. El precio de un camión, que contiene 38.000 litros de agua, por traerla hasta acá tiene un valor de 780 mil bolívares. La cisterna solamente cuesta 380 mil. El traslado de ese barco que lo paga el Estado por medio de la empresa Petróleos de Venezuela (Pdvsa) cobra 400 mil bolívares. Todo es dinero, pero el suministro de agua es responsabilidad del Estado”, dice Marquina.

El operador informa que las comidas también provienen de las embarcaciones. “Los comerciantes, que ellos normalmente consiguen en algunos sitios, traen los productos y aquí los venden y uno debe pagarlo hasta diez veces más de lo que pueda marcar el empaque. Aquí todo se paga al 1.000% porque son por muchas manos por las que pasan esos bienes para poder llegar hasta aquí”.

María Alejandra, una turista venezolana que paseaba por el cayo, no titubea al afirmar que Los Roques es “hermoso», pero que hay problemas de agua y asegura que solo dos posadas trabajan con plantas desalinizadoras, mientras que las otras usan en los baños agua de mar, y las que no, tienen sus tanques. También dice que durante su estadía en la posada ha tenido fallas de electricidad. “El día domingo se fue la luz un buen rato. El encargado de la posada puso unas velitas. Igual allí estaban preparándonos la cena porque la cocina era de gas”, agrega.

En Maiquetía, el lanchero Hugo Marín también se queja de la situación que viven los roqueños. Comenta que se encuentra en Vargas buscando los alimentos para llevárselos porque en el archipiélago lo que no hay es “ná”.

Marín porta un pantalón desteñido, una camisa blanca y un maletín negro. Llega a las diez de la mañana, pero al día siguiente tiene que retornar nuevamente. Sus viajes, ida y vuelta, se hacen más comunes por el tema de la escasez de comida. “Estoy buscando por aquí para ver que hay, allá no es nada, voy a ver que consigo bachaqueado, ¡yo qué sé! aquí nosotros conseguimos la comida y los barcos del Gobierno son quienes trasladan esas cosas, pero como digo, no está llegando es nada, ni siquiera el combustible de gasolina que también lo trasladan en barcos. Las posadas actualmente están sufriendo, ya más bien no están llevando a los turistas. La luz, el agua, allá todo eso está pésimo”, indica desesperado.

Para obtener los precios sobre los barcos que trasladan la comida a Los Roques se preguntó a la dirección del Instituto Nacional de Aeronautica Civil (INAC) en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía Simón Bolívar. Sin embargo, alegaron que no poseían ningún tipo de información.

¿Y cuánto cuesta viajar a Los Roques?

La mayoría de los venezolanos que viaja hacia el archipiélago lo hace a través de un day tour o un full day o se quedan dos días y una noche para poder disfrutar del lugar. El rango de precios depende de la coquetería de la posada. Visitar el Gran Roque es uno de los destinos más costoso dentro del país. Por un pasaje, es necesario pagar desde 150 mil bolívares en adelante. Para un extranjero el costo sería de 300 dólares y para el roqueño 10 mil bolívares.

Hace tres años, en una nota publicada en Últimas Noticias, Laura Weffer refirió que era necesario pagar 2.200 bolívares por persona por un pasaje y hasta Bs 8.350 por un full day. En la actualidad, el full day se encuentra en el rango de los 200 mil bolívares, es decir, 13 salarios mínimos. Para una estadía por noche se requiere de 50 mil bolívares.

Si usted desea practicar snorkeling la hora cuesta 4 mil bolívares. El kitesurf o kitesurfing, que es un deporte que practican los extranjeros en Los Roques, se paga a 140 dólares la hora.

*Oriana, encargada de una posada en la isla, asegura que el lugar merece que sea así de costoso. “Esto es un espectáculo, por supuesto esto es para un target muy específico. Sí se nota que estamos pasando por una crisis bastante fuerte. Sí se siente que hay personas que solicitan presupuestos y te responden los correos de manera muy triste diciendo muy francamente que muchísimas gracias, pero que ahorita no se puede. Hay solicitantes que dicen que les gustaría llevar a su mamá, papá, primo, pero no me da el bolsillo».

De los paquetes que más le piden los viajeros a Oriana en su posada son los de 3 días y 2 noches. “Eso tiene un valor de 164 mil bolívares por persona y te incluye tu desayuno, tus cavas para que te la lleves a los cayos y las cenas, los traslados a las islas cercanas, todo menos las bebidas alcohólicas”.

Desde La Guaira son solo tres los prestadores de servicios aéreos, entre ellos están empresas como Albatros, Chapi Air y Conviasa, cada uno de ellos manejan cifras diferentes que van desde 150 mil hasta 162 mil bolívares.

Comer langosta es otro lujo que se dan los excursionistas. Marín nos comenta que el kilo de crustáceo sale desde 10 mil bolívares, mientras que las otras comidas que están a base de pescado varían desde 5 y 8 mil.

* Los precios reflejados en este texto corresponden a junio de este año, cuando se publicó por primera vez. El trabajo vuelve a salir a raíz de la medida de la declaratoria del estado de emergencia en Los Roques.

* Algunos de los nombres utilizados fueron modificados por razones de seguridad

 

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