Economía

Por falta de azúcar los venezolanos se quedan sin refrescos en Navidad

A pocas semanas para que los venezolanos reciban la Navidad, los refrescos están desaparecidos de neveras y anaqueles de establecimientos comerciales por falta de azúcar, coinciden empleados y dueños de algunos locales del este y oeste de Caracas. A la falta de uno de sus ingredientes se suma la escasez de plástico para embotellar el producto, lo que afecta la distribución de los que no llevan azúcar.

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Coca Cola
Texto: Roximar Tovar @RoxiTovarDiaz / Foto: Archivo / AFP

En un recorrido de El Estímulo este lunes 4 de diciembre por panaderías, abastos, supermercados, farmacias, licorerías y restaurantes en el sector Los Palos Grandes, del municipio Chacao, y Vista Alegre, en el municipio Libertador, se constató la inexistencia de inventarios de la popular bebida gaseosa.

Farmatodo de Santa Eduvigis amaneció sin refresco. Uno de los empleados comentó que esperaban por el camión en el transcurso de la tarde. “Pero la semana pasada nos dijeron que iban a distribuir durante toda la semana y el camión solo llegó el viernes. No estamos seguros si llegará hoy”, dijo un empleado a El Estímulo.

El encargado del bodegón Tuparrilla.com comentó que la explicación que le dan los distribuidores es que no hay azúcar ni botellas de plástico. “Desde hace tres semanas no nos llegan refrescos y este problema es por toda la zona”, expresó el encargado.

En otros negocios como el restaurante Orleon Café, la panadería 4ta avenida y el local Revista prensa y algo más tienen Coca-Cola en botella de vidrio y Chinotto en botella plástica. “Los refrescos se acaban rápido porque no llega la cantidad suficiente”, aseguró el encargado del comercio.

El Excelsior Gama de Santa Eduvigis solo ofrece Coca-Cola en botella. «No ha llegado refresco desde hace varias semanas, supuestamente es por la falta de azúcar», dijo una empleada del supermercado.

Los pocos refrescos que se ven son en botella de vidrio o en lata, pero la oferta tiende a desaparecer con el paso de los días.

Los refrescos y particularmente las colas negras acompañan las festividades decembrinas en los hogares del país. A menos de tres semanas para que llegue la Navidad, nada hace prever que esta situación se revertirá rápidamente.

Fuentes de la industria de bebidas consultadas por El Estímulo aseguran que la escasez de azúcar es la causa que explica la desaparición de los refrescos de vitrinas y neveras.

«No hay azúcar», dijo una de las fuentes quien precisa que la producción se ha limitado a los refrescos sin azúcar, fórmula que las empresas embotelladoras comenzaron a incorporar como parte de su portafolio regular desde julio de 2016, luego que en distintas ocasiones se paralizara la producción por falta de azúcar.

«Tengo días buscando una Coca Cola de dos litros y no la consigo», dijo a las afueras de una cadena de supermercado, Ilene, una estudiante universitaria que pensó que la ausencia del producto era porque iba a subir nuevamente de precio. Ahora cuesta Bs 19.000.

Las principales marcas de bebidas gaseosas de las más grandes embotelladoras del país –Pepsico Venezuela y Coca-Cola Femsa Venezuela– están desaparecidas de distintos puntos de venta.

La falta de azúcar responde a la baja producción local. El presidente de Fesoca, José Ricardo Álvarez, informaba haca casi dos meses que apenas se procesa 25% de lo que se producía hace 10 años en el país.

Entre los motivos de la caída en la producción de azúcar está la inflación y que  los precios de venta al consumidor del producto nacional no cubre los costos de producción.

Pero además de que no hay zafra nacional, hay poca importación del producto, dijo Álvarez en rueda de prensa en su momento, por lo que el mercado se ve afectado.

En mayo de 2016, la Asociación Asociación Nacional de Bebidas Refrescantes se vio obligada a emitir un comunicado en el que señalaba que las empresas del sector presentaban “importantes fallas en el suministro de materias primas”, principalmente azúcar.

No es una situación nueva, pero en esta ocasión se da en la temporada del año de mayor consumo.

Preocupa también que si la falta de azúcar persiste y no se resuelve el problema con las insuficientes resinas para la elaboración de los envases plásticos, la situación se prolongue mucho más allá de diciembre.

En general, la industria de envases, alimentos y bebidas comienza a advertir que la paralización de Pequiven mantiene a muchas empresas con materias primas para producir, pero no con inventarios suficientes para envasar los alimentos y bebidas.

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