«Tenemos un total de 94 personas entre adultos y niños. Tenemos un grupo muy esperanzado de regresar a la patria», dijo a la prensa Arévalo Méndez, embajador de Venezuela en Chile.
Un avión chárter de la aerolínea estatal venezolana, Conviasa, recogió en el aeropuerto de Santiago a los 94 venezolanos de los casi 200 que se inscribieron en este programa abierto en octubre por la embajada venezolana en Santiago.
El programa impulsado por Caracas, bautizado como «Vuelta a la patria», no tiene costo ni requisitos ni plazo para la inscripción, por lo que las autoridades venezolanas no tienen claro cuántos vuelos deberán realizar, según la embajada.
La mayoría de los venezolanos inscritos al plan de Maduro no pudieron alcanzar las expectativas socioeconómicas que esperaban, según explicó Méndez.
«No pudieron insertarse en el mercado laboral, otros que simplemente añoraron su familia, su tierra y decidieron regresar», manifestó.
Una vez en Venezuela, los repatriados serán trasladados a sus regiones y se podrán acoger a un plan social para búsqueda de empleo y reinserción.
Atenazados por una hiperinflación que en 2018 podría llegar a 1.350.000%, según el FMI, escasez de bienes básicos, como alimentos y medicinas, unos 2,3 millones de venezolanos han dejado el país desde 2015, según la ONU.
El año pasado entraron a Chile unos 177.000 venezolanos en un éxodo sin precedentes que se extiende a otros países como Colombia, Ecuador, Perú, Brasil y Argentina donde también se aplicó este programa de retorno.
Las autoridades venezolanas estiman que unas 10.000 personas ya retornaron a Venezuela.
En agosto pasado, 97 venezolanos del medio millón que han llegado a Perú huyendo de la crisis, retornaron gracias al plan. El gobierno peruano lo calificó como una operación de propaganda.]]>