Pastrana: "Lo que pasa en Venezuela le duele a Colombia"
"No venimos a inmiscuirnos en los asuntos internos de Venezuela, venimos a hablar de democracia en un país hermano", dijo este lunes durante su visita en Caracas.
Venezuela
El expresidente de Colombia, Andrés Pastrana, aseguró este lunes durante su visita al país que, como «demócrata», fue importante poder «oír, sentir y ver» personalmente la situación actual por la que atraviesan actualmente los venezolanos.
«Es muy distinto ver en las noticias o escuchar en la radio lo que está pasando. No venimos a inmiscuirnos en los asuntos internos de Venezuela, venimos a hablar de democracia en un país hermano», dijo.
«Fascinante» poder
Durante el foro «Poder ciudadano y la democracia de hoy», llevado a cabo en Caracas, el exmandatario aseguró que «es imposible» dejar de ver los problemas, y menos aún cuando si se trata de un país latinoamericano.
«No podemos taparnos los ojos ni los oídos cuando un país hermano pasa por un momento de dificultad«, sostuvo. Quien fuera presidente de Colombia entre 1998 y 2002, también centró su discurso en el significado de «poder».
«Es algo extraño y fascinante para el ser humano. Es el motor de la historia, de la civilización y la barbarie. El ejercicio del poder, en cualquiera de sus facetas, es esencialmente humano. Para ejercerlo responsablemente no basta detentarlo, algunos gobiernos fracasan por su falta de convocatoria».
«Hermana Venezuela»
Pastrana reconoció durante su discurso sentirse «a gusto» hablando de poder ciudadano, habiendo sido convocado por el poder moral de una «hermana» Venezuela. «Es revolucionario en la democracia», dijo.
Recordó que el poder ciudadano también es el «voto limpio» y la expresión popular, garantizada por «amplios» mecanismos y con elecciones cuyos resultados puedan ser contados «voto por voto» por todos los ciudadanos. Afirmó que es el foro clásico que hoy en día está tanto en las calles como en las redes sociales.
«El poder ciudadano es la expresión libre e igualitaria, no la imposición de unos cuantos. Es transparente y sus líderes no temen porque tienen las manos limpias, es sutil y respetuoso. Es la voz del empleado, del deportista, del estudiante, de la ama de casa. Es la capacidad de los ciudadanos de movilizarse con libertad para defender la causa común de la democracia».
