Cultura

Los pasos sincopados y en clave pop de La Pequeña Revancha

Falsos Hermanos (2013), el EP debut de La Pequeña Revancha, el dúo liderado por Claudia Lizardo y Juan Olmedillo, se colocó como uno de los mejores trabajos musicales de ese año. Una placa que en tan solo en 23 minutos de duración de sus iete tracks, mostró una exquisita faceta compositiva por explorar: folk-rock, guiños al bolero y un poco de inspiración en los western italianos daban cuenta de este lanzamiento.

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Casi tres años después, reaparecen con un segundo EP, la misma cantidad de temas que su predecesor y en 29 minutos, seis más que su debut, presentan Pasos Sincopados (2016). El pop es la constante, incluyen secuencias electrónicas y el bolero aún tiene cabida.

Juan Olmedillo y Claudia Lizardo, sus compositores, comparten las voces, hacen guitarras y manipulan la organetta. Ahora La Pequeña Revancha se muestra más al formato de banda, en parte gracias a la participación de músicos como los bateristas Tony Maestracci (Tomates Fritos) y Rafael Cadavieco (Atkinson), Luis «Druppy» Pulido (Los Mentas, El Pacto) en el bajo. Se suma la participación de Jesús Vásquez (Percucello) en el cello, el violinista Bairon Marchan y el trompetista Julio Carrasquel.

Pasos Sincopados tiene un halo de oscuridad sonora en sus composiciones, un trabajo introspectivo que se percibe en sus letras nostálgicas, gestadas desde la zona de confort y seguridad del dúo. «La Fiesta del señuelo» figura como una conexión entre sus dos producciones, con todo y el hecho de que cuenten un solo de guitarra. Sin duda el tema más digerible y concreto de esta entrega.

La segunda producción de La Pequeña Revancha asoma una gran apuesta al pop, consciente o inconsciente, comenzando con «Yo era el sol«, sencillo experimental con el que asomaron este EP. La efervescente «A mi pesar«, se acerca al pop sureño y absorbe toda una estructura melodiosa . «Temporal» se decanta por notas melancólicas de una inocente balada que se soporta en sus coros.

Asumen un riesgo musical hacia el final del EP con «Rojo», track que contiene una carga histrionismo y drama, incluyendo la historia que cuentan y  que tiene mayor impacto en directo, ya que pierde fuerza en su registro de estudio.

La Pequeña Revancha emprende su búsqueda, se sumerge en la experimentación consciente, cargando el peso de un debut aclamado que al final termina ostentando el valor de una producción de transición.  De alguna manera Pasos Sincopados muestra mas tiempo de escucha que Falsos Hermanos pero convence menos musicalmente. No tiene la misma magia.

A pesar de esto, la expectativa en vivo, dada la concepción de este trabajo, sin duda tiene la disposición de dejar mejor parado el esfuerzo en estudio.

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