Cultura

Burriquitas de Pacairigua: una parranda de fe que busca ser patrimonio de la humanidad

A Guatire llegaron las burritas de Pacairigua con antelación, pero con ritmo y alegría. Esta galería muestra una tradición que busca convertirse en patrimonio no material de la humanidad. Los motivos se ven en cada foto

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Colas, vestidos floreados, sombreros para cubrirse del sol y mucha música y algarabía tomaron las calles del pueblo de Guatire: eran más de 100 burras y burriquitas bailando al compás para rendirle honor, con antelación, a la Santísima Cruz de Pacairigua el pasado lunes 1 de mayo.

Unas ya eran conocidas entre los espectadores: la burra de Carlos Marrón de Marizapa, la de Ernesto Mongues de Caucagua, las que bajaron de El Valle y Chacao, en Caracas; las burriquitas de Guarenas y las de Guatire, lideradas por Funbutraga.

Niños y adultos fueron los encargados de poner una sonrisa en la población de Guatire. Lo primero que hicieron fue acercarse a El Calvario, donde se agruparon para visitar la zona más vieja del pueblo: la calle Concepción.

El paseo fue largo y caluroso. Por un momento, las gotas de sudor ya no solo era de los guatireños, sino de los visitantes que llegaron a ponerle color a un Día del Trabajador que parecía ser común.

La muestra de que el ambiente cambió fue el sabroso sonido de las trompetas y las cajas, tocadas por músicos de Caucagua y Guaruru de Guatire.

Aunque no era algo que se repitiera, detrás de la alegría había un secreto a voces: lograr convertir la fiesta de burras y burriquitas en patrimonio no material de la humanidad.

En esta galería fotográfica, mostramos parte de la experiencia:

El sol implacable del pueblo de Guatire no redujo las ganas de bailar de las burriquitas . Foto: Daniel Hernández.
Los pequeños cultores se refrescaron con helados. Foto: Daniel Hernández.
A las afueras de la plaza 24 de Julio se agruparon las burriquitas, la gran mayoría eran de Guatire. Foto: Daniel Hernández.
Las fachadas de los viejos negocios de la calle Concepción sirven de fondo para las imágenes de las burriquitas. Foto: Daniel Hernández.
Más de 21 años de tradición: este es Carlos Marrón, el hombre que baila a la burra de Marizapa, mejor conocida como la burra mecánica de Venezuela.
Ernesto Mongues lleva a La Burra de Caucagua. Él representa un patrimonio cultural de Venezuela y su tradición también llegó a Guatire para rendir honores a la santa patrona. Foto: Daniel Hernández.
Las niñas y niños cultores, amantes de la tradición de la burra, crecen y se multiplican. Foto: Daniel Hernández.
Magdalena Istúriz toma mi mano con cariño después de tantos de amistad. Esta dama es abuela de uno de los nilños cultores que bailan la burriquita de Guatire. Además es quien crea las Rosa Ignacia que muchas parrandas bailan junto al San Pedro cada 29 de junio. Foto: Daniel Hernández.
Este es el pequeño nieto de Magdalena Istúriz, él es una de las burriquitas del CEA, Foto: Daniel Hernández.
Estas son las mujeres que llevaron las burriquitas de Guarenas esperando el inicio del recorrido. Foto: Daniel Hernández.
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