Burriquitas de Pacairigua: una parranda de fe que busca ser patrimonio de la humanidad
A Guatire llegaron las burritas de Pacairigua con antelación, pero con ritmo y alegría. Esta galería muestra una tradición que busca convertirse en patrimonio no material de la humanidad. Los motivos se ven en cada foto
Colas, vestidos floreados, sombreros para cubrirse del sol y mucha música y algarabía tomaron las calles del pueblo de Guatire: eran más de 100 burras y burriquitas bailando al compás para rendirle honor, con antelación, a la Santísima Cruz de Pacairigua el pasado lunes 1 de mayo.
Unas ya eran conocidas entre los espectadores: la burra de Carlos Marrón de Marizapa, la de Ernesto Mongues de Caucagua, las que bajaron de El Valle y Chacao, en Caracas; las burriquitas de Guarenas y las de Guatire, lideradas por Funbutraga.
Niños y adultos fueron los encargados de poner una sonrisa en la población de Guatire. Lo primero que hicieron fue acercarse a El Calvario, donde se agruparon para visitar la zona más vieja del pueblo: la calle Concepción.
El paseo fue largo y caluroso. Por un momento, las gotas de sudor ya no solo era de los guatireños, sino de los visitantes que llegaron a ponerle color a un Día del Trabajador que parecía ser común.
La muestra de que el ambiente cambió fue el sabroso sonido de las trompetas y las cajas, tocadas por músicos de Caucagua y Guaruru de Guatire.
Aunque no era algo que se repitiera, detrás de la alegría había un secreto a voces: lograr convertir la fiesta de burras y burriquitas en patrimonio no material de la humanidad.
En esta galería fotográfica, mostramos parte de la experiencia:
El valor del trabajo fue una constante en la vida de los hermanos Fernández, los hijos de Antonio, un portugués que se hizo conocido en Guatire por prestar un buen servicio en la barbería Zamora. Esta es la historia de una familia que convirtió un oficio en un lenguaje de amor
Desde este fin de semana, personas dela comunidad y grupos artísticos muestran sus mejores fachas para celebrar los carnavales. Celebramos esta iniciativa con una hermosa galería de imágenes
La tarifa es de 500 mil bolívares, solo de ida. Una persona que viva en Guarenas y trabaje en Caracas debe pagar 20 millones de bolívares al mes. Los transportistas aseguran que la tarifa debería ser "un dólar"