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"The Glory": final explicado de la serie surcoreana que está triunfando en Netflix

La venganza se cuece a fuego lento en este exitazo de Netflix que está dando mucho de qué hablar. En esta nota explicamos el final de la primera temporada y todas las preguntas que dejó la serie de Corea del Sur

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The Glory

Que Corea del Sur es una fuente de éxitos en las plataformas de streaming no es una novedad. Las series y películas que provienen de este país siempre tienen un dramatismo y un giro importante en las tramas que seducen al universo entero. «El Juego del Calamar» probablemente sea el epítome de esa constancia. Pero en este momento, un nuevo show está consumiéndose como pan caliente aunque sin hacer mucho ruido: «The Glory».

«The Glory» cuenta la historia de Lala Moon Dong-eun (Song Hye-Kyo), quien fue víctima de terribles abusos físicos y mentales en su etapa escolar y de adulta decide vengarse, siguiendo el viejo adagio del «ojo por ojo». Pero contrario a la tradicional secuencia de las producciones que se basan en el subgénero Revenge, este personaje se toma las cosas con calma. Esto tiene un efecto profundo en el espectador, que espera con ansias conocer cómo sufrirán los antiguos verdugos.

En su primera temporada, que consta de ocho episodios, los usuarios de Netflix se verán seducidos por un guion que sabe jugar sus cartas. Aunque puede ser excesivamente dramático, si estás acostumbrado a los K-dramas, rápidamente le encontrarás el jugo a la serie. Dicho esto, en las próximas líneas vamos a analizar algunos puntos de la trama y encontrarle un sentido a la escena final que dejó a muchos de los fanáticos con un signo de interrogante en la cabeza. Por supuesto, vienen spoilers.

La serie es dirigida por Ahn Gil-ho («Watcher», «Stranger», «Happiness») un realizador muy exitoso en la televisión y escrita por Kim Eun-sook («Tae-yang-eui hoo-ye»), una mujer que sabe llegarle muy bien al público. Entonces, los dos nos cuentan una historia de una venganza que se cuece por 20 años.

Aunque no se dice, comprendemos que la protagonista ya pasó de los 30 años, al igual que sus excompañeros de escuela. El tiempo no es un tema baladí, pues solo si tomamos en cuenta que cada paso que Dong-eun dio en su vida (trabajar en talleres de poca monta, sacar su licenciatura, ahorrar) está pensado para conseguir un triunfo final, es que podemos comprender la planificación de su vendetta.

Básicamente ella estudió a cada integrante del grupo que abusó de ella. El tiempo le permitió encontrar detalles que le ayudarían a minar la confianza de los abusadores, no solo entre ellos, sino entre otras personas que habían ingresado a sus vidas, como esposos, hijos y familiares.

¿Quiénes son el blanco de la venganza de Dong-eun?

Empecemos por los más obvios: Park Yeon-jin (Ji-Yeon Lim); Son Myeong-oh (Kim Gun-woo), Lee Sa-Ra (Kim Hieora), Choi Hye-jeong (Joo-Young Cha) y Jeon Jae-joon (Sung-Hoon Park). Por supuesto que hay otros más, pero vamos a centrarnos en la pandilla, responsable de haberle dejado muchas cicatrices, físicas y emocionales, a Moon Dong-eun.

Yeon-jin era la líder del grupo en la escuela. Todos hacían lo que ella decía. Siempre encontraba una estudiante a la que le encargaba las responsabilidades escolares, como limpiar el baño de la institución. Y luego su maldad fue creciendo, al punto de usar secadores de pelo en la piel de sus víctimas. Como vemos en la serie, cumple su sueño de casarse con un millonario. Es una madre que no está presente en el día a día de su hija y trabaja como presentadora del clima en la televisión, sin tener ningún talento. Permanece en el puesto porque el millonario esposo invierte mucho dinero en la publicidad del canal.

Myeong-oh es el matón o mano derecha de Yeon-jin durante la época escolar. Hacía todo lo que le pedían sus amigos millonarios a cambio de dinero. Esto no cambió al madurar, pues era el chófer y mandadero de Jae-joon. Es el más inseguro y por lo tanto vulnerable de todo el grupo.

Hye-jeong proviene de una familia obrera. Sus padres regentan una tintorería, de donde ella saca prendas para lucir un status que no tiene. Por ello le dicen en determinado momento que si Dong-eun no hubiera existido, ella habría sido la víctima del bullying. Era azafata y finge ser rica en las redes sociales. Como cuenta su vida usando su teléfono, Dong-eun encuentra una manera muy fácil de averiguar los secretos de ella y todo el grupo al robarle el móvil.

Sa-ra es quien se convierte en una artista, cuyas obras son vendidas en parte por la influencia de su madre, que deja pasar las adicciones de la hija mientras siga pintando y acudiendo a las presentaciones de las obras. Esa adicción le será muy favorable a la protagonista más adelante. Al mismo tiempo, Sa-ra ha heredado de su madre una extraña devoción por la religión.

Jae-joon es el dueño del campo de golf. Cuando es adolescente se menciona que lo heredará. Es el jefe de Myeong-oh, amante de Yeon-jin y también mantiene relaciones sexuales con Choi Hye-jeong, aunque a esta última la humilla con regularidad. Con el avance de los capítulos, se conoce que es el verdadero padre de la hija de Yeon-jin, Ha Ye-Sol.

Como advertimos, hay otras víctimas, como la propia madre de Dong-eun, profesores y autoridades policiales. Sin embargo, esto será material para otro post, una vez que lance la segunda temporada.

¿Cómo consigue Dong-eun su puesto de maestra?

Dong-eun alquila un apartamento frente a la casa de Yeon-jin. La razón no es solo vigilarla. Cree que puede encontrar algo importante en la basura de su enemiga y en efecto es así. Encuentra un testamento de Kim Shin-tae, el suegro de Yeon Jin. En él, Cho Su-hyeon (esposo de Yeon-jin) no sería el único beneficiario. Se habla en el escrito de otro hombre, que también recibiría su parte, Jo Soo-Hyeon. Este último resultó ser el amante de Kim Shin tae, la máxima autoridad de la primaria Semyeong.

Así las cosas, Dong-eun chantajea a Shin tae con ese documento para que le permita dar clases en la institución y así darle rienda suelta a parte de su elaborado plan. Por un lado, como maestra, está cerca de la hija de su máxima rival, Yeon-jin. Y por otro, consigue que los dos padres de Ha Ye-Sol, el biológico y el de crianza, se enfrenten. Obviamente todo esto perjudica a la hasta entonces madre millonaria.

¿Por qué Kang Hyun-Nam a Moon Dong-eun?

Hyun-Nam trabajaba como empleada de Park Yeon-jin. Ella notó que Dong-eun robaba la basura de la casa y una noche la confrontó. Le dijo que le había tomado fotos para tenerlas como pruebas de que hurgaba en la basura de extraños, pero no la denunciaría si le ayudaba con un tema personal.

Hyun-Nam entiende rápidamente la misión de la protagonista y quería estar de su lado una vez que comience la venganza. De hecho se ofrece a ayudarla. Pero, a cambio, desea que Dong-eun se encargue de su esposo, pues ella también ha sido víctima de violencia, en este caso, doméstica. Así es como este personaje pasa de ser una empleada a una especie de detective, que sigue a los miembros de la pandilla, aprender a manejar y tomar fotos y videos.

Al final de la serie, vemos que Hyun-Nam y Dong-eun comparten un vínculo que va más allá de lo profesional. Las dos han aprendido a confiar y aunque no son amigas, se tienen afecto.

Final explicado

Hay demasiado puntos para analizar en este final de la primera temporada. Y seguramente iremos ampliando esta nota en la medida que sigamos sacando más conclusiones. Pero, por ahora, aclaremos las cosas más difíciles de comprender. La primera: ¿murió Myeong-oh, el matón y mano derecha de Yeon-jin en la escuela? La respuesta inmediata es: parece que sí y que la ejecutora fue su antigua líder. ¿Por qué? Repasemos lo sucedido.

Dong-eun convenció a Myeong-oh para que se convierta en su recopilador de pruebas (los cabellos de la niña Ha Ye-Sol) para que la verdad sobre la paternidad salga a la luz. Con esta situación, el matón creía que podía conseguir mucho dinero y dejar para siempre a sus compañeros. Por eso compró un boleto a Rusia que nunca usó. Lo único que vemos de este sujeto antes de que se desaparezca de la serie es su rostro ensangrentado y … unos zapatos verdes de tacón que salen de la escena del crimen.

Es muy probable que Myeong-oh haya querido chantajear a Yeon-jin, pidiendo dinero para no revelar quién es el verdadero padre de la pequeña y su excompañera de escuela resolvió matarlo, con ayuda de los policías corruptos y otros matones que tiene en su nómina. Para que esto tenga más sentido, debemos recordar las palabras de Yeon-jin al final de la primera temporada cuando descubre la pared llena de fotos, en la que están todos los objetivos de venganza de la protagonista: «Debí matarla».

La siguiente pregunta es: ¿por qué el cirujano Yeo-jeong, cuando visita la morgue, no encuentra el cuerpo de So-he? Por si no lo recuerdas, So-he fue la primera víctima fatal de los castigos que el grupo en la escuela. Se cree que se suicidó para no enfrentar más dolor, pero la familia no creía en esta posibilidad y por eso no retiraba el cuerpo, esperando algún tipo de investigación.

Lo que parece indicar esta escena es que Yeon-jin, con su dinero y contactos, consiguió que la familia retirara el cuerpo y aceptara la versión del suicidio. Tenemos una pista al respecto. Cuando Myeong-oh hacía investigaciones para Deng-un, pidió ver el cadáver de la joven y le dijeron que no podía porque no era familia directa. También le contaron que la familia de la fallecida adeudaba un monto muy grande por mantener el cuerpo en este lugar, sin darle cierre al caso. Así que, con el agua al cuello, Yeon-jin está tratando de resolver todos los entuertos a punta de dinero y cometiendo más delitos.

Luego, la revelación más importante de los últimos capítulos es el pasado de Yeo-jeong. El pretendiente de Deng-un sufrió un gran trauma al perder a su padre, quien murió asesinado a puñaladas. El asesino, un psicópata, además enviaba cartas al aspirante a médico para perturbarlo. Y en efecto lo conseguía. Por eso Yeo-jeong estaba en terapia psicológica.

En este contexto, cuando Deng-un le cuenta a Yeo-jeong sus planes, el enamorado decide ayudarla. Comprende todo el sufrimiento de la maltratada porque él también ha sido víctima. De alguna manera siente que puede llevar a cabo la venganza que no pudo ejecutar contra el verdugo de su padre. Además, está demasiado prendado de su misteriosa amiga como para oponerse. Al menos hasta ahora.

Finalmente, llegamos a la escena en la que Yeon-jin y su esposo, Cho Su-hyeon, coinciden en el apartamento de Deng-un. A ella le quedan pocas artimañas y él le tiene cada vez menos confianza, pues en este punto ya sabe que no es el padre de Ha Ye-Sol. Por si fuera poco, ella misma le ha dicho que lo mejor que puede hacer es «no abrir la caja de Pandora». En referencia a que ella en efecto tiene un pasado muy oscuro. La pregunta entonces es, ¿qué decidirá él?

Cho Su-hyeon es un jugador nato de Go, el juego tradicional japonés, que básicamente se trata de estrategias. Así que en ningún momento lo hemos visto tomar decisiones irracionales, ni siquiera cuando recibe burlas de Jae-joon, el padre biológico de Ha Ye-Sol.

En conclusión. Lo más importante que debes tener en cuenta al término de esta temporada es que el objetivo principal de Deng-un es Yeon-jin. Como lo dijo insistentemente, quiere aislarla. Que pierda absolutamente todo: a su hija, marido y riqueza. Pero además, que pague por sus delitos. Lo lógico sería que Cho Su-hyeon se enfrentara a su esposa. Sin embargo, eso solo lo podremos descubrir en la siguiente temporada.

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