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"Los crímenes de la academia": final explicado de la película gótica de Netflix

La película protagonizada por Christian Bale tiene un final que plantea varias interrogantes. Igual, su desarrollo puede confundir al espectador. Aquí respondemos todas las preguntas de este thriller gótico

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Titulada originalmente «The Pale Blue Eye», la cinta que se puede ver en Netflix cuenta con un gran elenco: los ganadores del Oscar, Christian Bale («The Fighter») y Robert Duvall («Tender Mercies»), el vencedor en Cannes en 2014, Timothy Spall («Mr. Turner») y el multipremiado en Europa, Toby Jones («Berberian Sound Studio») y la siempre destacada Gillian Anderson («The X Files»). Además introduce a un personaje que caló en la cultura pop más allá de su obra literaria: Edgar Allan Poe (Harry Melling).

La premisa de «Los crímenes de la academia» es bastante sencilla: el respetado detective Augustus Landor (Bale) es reclutado para investigar el espantoso asesinato de un cadete en la academia militar en West Point, Nueva York. En pleno invierno de 1830, la investigación contará con un aliado inesperado: el también cadete Poe. El seguimiento de las pistas traerá a la luz pública secretos que la familia Marquis, bajo la cabeza del Dr. Daniel Marquis (Jones), ha querido enterrar.

Por supuesto, cuando llegamos al final, se nos informa que el mayor secreto lo guardaba el propio Landor. Pero de esto hablaremos más adelante. Por ahora, veamos el tráiler y recordemos que para explicar el final, se harán spoilers. Así que están advertidos.

¿Quién asesinó realmente a los cadetes?

A pesar de que en un principio se nos hace creer que la culpa de todo este entuerto la tiene la familia Marquis con sus ritos de magia negra para garantizar la salud de Lea (Lucy Boynton), la realidad es que el único asesino es el propio investigador, Augustus Landor. ¿La razón? Todo tiene que ver con el suicidio de la hija del detective, tras haber sido violada por tres cadetes.

Mattie (Hadley Robinson), en el día de la fiesta de graduación de los militares, fue atacada por el cadete Fry (Steven Myer), al que le logra arrancar la placa, y sus compinches. Precisamente por esa placa, Landor logra reconocer a la primera de sus víctimas. Para que no sospecharan de él, desvió la investigación, asociando el crimen con la brujería, aprovechando que casualmente la familia Marquis le había quitado el corazón al cadáver para un ritual que ayudaría supuestamente a Lea con sus problemas físicos.

La extracción del corazón de Fry no estaba en los planes de Landor, sin embargo le cayó como anillo al dedo para confundir al resto de autoridades. De esta manera existía un motivo: rituales satánicos y un chivo expiatorio: la familia Marquis.

¿Cómo se revela quién es el asesino?

Es el joven Poe quien hace confesar a su «mentor». Para el joven cadete es muy doloroso descubrir que Landor fue el asesino de los cadetes en la Academia. ¿Cómo lo hace? Realmente no fue muy difícil, lo cual es bastante decepcionante si tomamos en cuenta todo lo que hace el asesino en la película: caza a los abusadores, los mutila e incluso involucra a animales para despistar a las autoridades de la institución.

En este contexto, en un monólogo que dura una eternidad, Poe explica que comparó el fragmento encontrado en la mano del ahorcado Fry con una nota que Landor le había dejado antes y descubrió que la escritura era «prácticamente idéntica». Así de sencillo fue el «descubrimiento».

¿Landor lo planeó todo, incluso que Poe lo descubriera?

Este es un tema para la discusión: ¿deseaba Landor ser descubierto? ¿Por qué sería tan tonto como para no encubrir la letra del fragmento que tenía Fry? Las respuestas no son fáciles y muestran algunas grietas en este guion, que es una adaptación de la novela de Louis Bayard.

«Tú eras a quien me entregaría todo el tiempo. Lo supe desde el momento en que te conocí, y aquí estamos», dice en el tramo final de la película, Landor a Poe. Esto parece contradecir todo lo que el detective ha hecho, por ejemplo, interrogar al hombre que descubrió el primer cuerpo, para saber si guardaba alguna información que lo conectara con el crimen.

Al mismo tiempo, Landor involucra a Jean Pepe (Duvall), un «experto en símbolos y rituales», quien explica todo el esquema del «círculo mágico», lo que está asociado al cazador de brujas Henri Le Clerc, quien escribió en un libro perdido, detalles de un ritual para «asegurar la inmortalidad». Eventualmente, esto lleva a que todas las sospechas recaigan en la familia Marquis.

También, Landor mutila el cuerpo del cadete Randolph Ballinger (Fred Hechinger). «Tenía que hacer que pareciera obra de satanistas», dice. Incluso usa a Poe para descifrar una nota de manera que sospeche de una mujer. Resulta extraño pues, luego de todaaa esta parafernalia, esa confesión hacia su amigo. En todo caso lo que importa es que el aspirante a escritor decide quemar las pruebas (la notas). De alguna manera ha desarrollado un sentimiento muy fuerte hacia su mentor, a quien ve como una figura paterna.

A pesar de que las decisiones de Landor le han generado mucho dolor a Poe, pues lo culpa por la muerte de su amada Lea, sabe que revelar lo sucedido no cambiará las cosas. Ella no resucitará y además, en el fondo, comprende lo que llevó al detective a actuar de esa forma. Como lo vemos en escenas anteriores, Poe confiesa que ha sido víctima de bullying y maltrato de la Academia. De tal forma, que comprende las motivaciones del asesino, aunque no justifique el asesinato.

¿Landor se suicida?

Es un final abierto. Luego de que Poe se despide de Landor, el asesino se dirige hasta el acantilado, donde se lanzó Mattie. Allí suelta una cinta de su hija. ¿Qué significa esto? Básicamente que el investigador ha dejado ir el último recuerdo físico de su pequeña. La venganza, oficialmente, ha terminado. Sin embargo, dejan a interpretación del espectador rellenar lo que sucede después.

Pero hay una pista que habla sobre lo cansado que llega Landor a este tramo final. A pesar de que mata a dos de los agresores de su hija, uno sigue vivo: el cadete Stoddard (Joey Brooks), quien realmente se escapó. El investigador confiesa que ya no tiene «la fuerza o la voluntad para perseguirlo». Y agrega: «Solo espero que pase el resto de su miserable vida mirando por encima del hombro». Entonces, sin motivos para continuar su venganza, es probable que el detective decida morir en ese acantilado o… apreciar la segunda oportunidad que Poe le ha dado. Usted decide cuál opción le agrada más.

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