"Chokehold": final explicado de la película turca disponible e Netflix

«Chokehold» (Boga Boga en su lengua original) es una película turca, que se ha posicionado rápidamente entre lo más visto e Netflix. La sinopsis oficial es la siguiente: una pareja de Estambul empieza de cero en un pueblo de la costa egea para huir de un escándalo. Pero pronto descubre que los lugareños se han propuesto librarse de ellos.

La cinta está dirigida por Onur Saylak, un realizador que se enfoca en los problemas sociales y económicos de su país, con un guion de su regular colaborador, Hakan Gunday. El peso de la trama recae en el actor Kivanç Tatlitug, muy conocido por su papel en la novela turca «Amor prohibido» («Ask-i Memnu»).

Ahora bien, si ya viste esta producción, en las siguientes líneas vamos a explicar algunos detalles de la trama y el enigmático final. advertimos que vienen spoilers.

¿Qué hizo Yalin?

Yalin (Kivanç Tatlitug) trabajó en una empresa que usó el esquema Ponzi (piramidal) para estafar a la gente. Muchas personas invirtieron sus ahorros en esta compañía. El protagonista, para salvarse de la cárcel, denunció a sus socios. Como testigo en la demanda, recibe impunidad y le dan la oportunidad de rehacer su vida. Él decide establecerse en Assos, donde vivió parte de su juventud. Allí era venerado porque venía de una familia rica. Pero al haber malversado fondos, rápidamente se da cuenta de que es odiado en su antiguo pueblo.

¿Por qué el hombre de la tienda intenta matarlo?

El primer indicio de que Yalin ha escogido un mal lugar sucede cuando el dueño de una tienda de alimentos decide que no le va a vender ningún producto. Y se hace más evidente cuando intenta comprar un regalo para una reunión y es atacado con una soga por Cevdet, el dueño del local de antigüedades, que perdió los ahorros de su madre en la compañía del protagonista.

La lucha entre ambos deriva en una muerte irónica ya que Yalin golpea al agresor con una estatua de Aristóteles. Al principio de la película se explica que Assos fue refugio de la filosofía socrática. Aristóteles huyó de Atenas para que no se «pecase dos veces contra la filosofía», haciendo referencia a la condena a muerte a Sócrates.

Finalmente, Yalin esconde el cadáver en unas montañas, apartadas de todos los lugareños.

¿Por qué Yalin no acude a la policía?

En un paseo con su esposa, Beyza (Funda Eryigit), Yalin se topa con el jefe de policía, Selami Tokar, quien le comenta sobre la desaparición de Cevdet y le advierte que durante su estancia en Assos, no recibirá ninguna ayuda de las autoridades. Peor aún, le subraya que espera que «tenga su merecido». ¿Por qué? Porque el propio policía invirtió en la empresa del protagonista.

¿Por qué Yalin alucina?

Después de asesinar Cevdet, Yalin cree verlo rondando la casa, tiene pesadillas con el cadáver. No solo eso, tras la advertencia del policía, vive paranoico, por eso duerme con un machete en la mano. Además, también tiene que preocuparse por los exsocios, quienes le enviaron la cabeza de una serpiente que vemos en el barril. Un amedrentamiento por soplón. A eso hay que sumarle la imagen en el noticiero del maestro de escuela que se inmola por haber perdido sus ahorros en el esquema Ponzi.

Por último, el protagonista no ha conseguido saber quién lo delató. Todo esto confluye en una gran paranoia que le irá llevando a su destino final. Cuando más lugareños intentan acabar con su vida, Yalin comprende que debe encontrar una solución radical a su presente.

Cuando le cuenta su plan a su esposa, Beyza, deciden dejar Assos. Ella comprende el temor de él, porque lo ama. Pero todo se desmorona cuando Yalin muestra el millón de euros que tenía escondidos. Beyza creía que su marido se había quedado sin dinero y por eso recibía una ayuda económica del padre. Sin embargo entiende ahora que ha estado con un hombre codicioso y amoral, que no siete nada por las personas que fueron estafadas.

Así que Beyza confiesa dos cosas importantes: fue ella quien lo delató, con la idea de que pagara sus crímenes, aunque le esperaría al finalizar la condena. Y luego, que de nuevo llamaría a las autoridades por el dinero escondido. En este punto, Yalin ya ha perdido todo nivel de cordura y la mata. Prefiere acabar con la vida de su amada que perder la libertad, una demostración más de su egoismo.

¿Yalin se sale con la suya?

Después de matar a su esposa, Yalin debía encontrarse con los hombres que lo transportarían al otro lado de la bahía. Pero toma otra decisión, deposita el millón de euros en la cesta donde vio la cabeza de serpiente y la deja frente a un restaurante local. El propietario llama a la policía, quien levanta la tapa del recipiente para conocer el contenido. A partir de allí, todo cambia.

Yalin regresa a su casa y se sienta en su jardín. Selami Tokar, el jefe de policía, se sienta a su lado y «concluye» en un monólogo que las personas desaparecidas seguramente se fueron hacia otro lugar y por eso no se sabe de ellos. Luego, poco a poco se suman al encuentro los aldeanos locales y una amiga de Beyza, quien ni se inmuta al saber del supuesto abandono que cuenta el protagonista y se ofrece a preparar té.

En conclusión, el dinero ha comprado la lealtad y silencio de los habitantes. Incluso el perro, una metáfora de la conciencia, que estuvo presente en cada mal paso de Yalin, se recuesta cerca de él. «Chokehold» termina con una toma que rompe la cuarta pared. Todos los personajes miran directamente a la audiencia. «Ese no es final que esperaban, ¿verdad?», parece decir esa toma. Pues en efecto, el asesino se ha salido con la suya, algo imposible de prever.