De acuerdo a la información, la Administración Estatal para la Industria y el Comercio solicitó a Microsoft que aclare “importantes problemas” en los datos electrónicos facilitados a las autoridades durante el curso de esta investigación.
Según la Ley Antimonopolio china, los problemas de incompatibilidad de nuevos productos con los anteriores, y sin aviso previo a los clientes, podrían ser una práctica irregular y contraria a las normas de libre competencia.
La investigación se inició en 2014, cuando funcionarios chinos realizaron visitas sorpresa a oficinas de Microsoft en varias ciudades del país, aunque hasta ahora no se había confirmado que aquellas operaciones respondían a la aplicación de la Ley Antimonopolio.