Economía

¿Subirán los precios del petróleo?

Una serie de eventos inesperados afectaron la extracción de petróleo y provocaron un alza pasajera en sus precios. Los incendios forestales en Canadá, el sabotaje a oleoductos por los rebeldes en Nigeria, así como los problemas en Venezuela derivados de la escasez de divisas y las fallas en taladros redujeron la producción global de petróleo en más de 2 millones de barriles por día. Pero se trata de eventos coyunturales razón por la cual pocos son los expertos que proyectan un precio mayor a 50 $/b en 2016, 60 $/b en 2017 y 70 $/b en 2018.

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Petróleo cinco
FOTO: ARCHIVO EL ESTIMULO

Para evitar un exceso de extracción de petróleo que deprima aún más los precios, Venezuela propuso un sistema de rangos de producción para toda la OPEP. Es una alternativa al mecanismo de las cuotas de producción que fija volúmenes máximos de producción por país, el cual luce cada vez más obsoleto e ineficaz para defender los precios del petróleo. Se trata de convenir un mínimo y un máximo para cada miembro hasta lograr un rango total de producción OPEP. Así, cuando un país no logre su máximo nivel, los demás miembros podrán aumentar su producción hasta completar la cuota de mercado que debe defender la OPEP.

Otros países como Irán y Ecuador prefieren volver al sistema de cuotas y rechazan un tope global de 30 millones de barriles diarios para la producción conjunta de la OPEP. Este rango está vigente desde 2011, pero no es respetado por varios países miembros de la organización. De hecho, los informes de la propia OPEP revelan que los trece países miembros han llegado a bombear diariamente 32,44 millones de barriles, un tercio de la producción mundial.

– La caída de la producción en Venezuela –

El reporte oficial del Gobierno de Venezuela a la OPEP registra caídas en la producción. El promedio en mayo fue de 2 millones 370 mil barriles por día; es decir, 120.000 barriles menos que el promedio de abril de 2.490.000 b/d. Si a este volumen se resta el consumo interno de 600 mil barriles, más los 350 mil barriles con los que se paga el préstamo chino, el volumen de petróleo que se exporta y genera caja está alrededor de un millón 420 mil barriles diarios.

Si estimamos un precio promedio de 40 $/b para el resto del año, los ingresos en el segundo semestre apenas superarán los $ 10 millardos. Y a este monto hay que descontarle las importaciones de crudos livianos, diluyentes, equipos y servicios que necesita Pdvsa para no afectar aún más su nivel de operaciones. Datos del BCV revelan que en 2014 el monto de estas importaciones superaron los $ 10 mil millones para caer a menos de $ 7 millardos en 2015. Pero ya no hay margen de maniobra para reducir aún más estas importaciones sin afectar la producción.

De hecho, la escasez de diluyentes afecta el transporte y procesamiento de los crudos pesados en las refinerías convencionales. Otras causas que explican la caída de la producción van desde la poca eficiencia de los taladros chinos hasta los problemas derivados del reemplazo de contratistas especializados por personal de Pdvsa con poca experiencia, pasando por los problemas con el gas que era reinyectado en los pozos y se destinó a las plantas térmicas para enfrentar la crisis eléctrica. Los mejoradores de petróleo pesado pueden procesar 600 mil barriles diarios, insuficiente para una extracción mayor al millón de barriles.

Este cuello de botella se agrava debido a que varios mejoradores no están trabajando a plena capacidad. Por si fuera poco, compañías especializadas como Halliburton y Schlumberger pueden reducir sus operaciones hasta que Pdvsa se ponga al día con el pago de las facturas pendientes.

– Reingeniería en Pdvsa –

Según el informe de auditoría de KPMG: “En diciembre de 2015, como parte de un plan de revisión de procesos y estructuras, en el cual la compañía está orientada a concentrar esfuerzos principalmente sobre sus filiales petroleras, la Asamblea de Accionistas aprobó la segregación de gran parte de las filiales no petroleras y su transferencia al accionista, a su valor en libros”.

Pdvsa ha distraído cuantiosos recursos en programas no consubstanciales al negocio petrolero. Los gastos de esas filiales aumentaron 94% en comparación con 2014, al pasar de Bs. 136.246 millones a Bs. 246.382 millones. Pero el colapso de los precios del petróleo ha obligado a la compañía a reducir su aporte a los programas sociales y a transferir esas filiales a los ministerios que tengan la competencia en cada materia.

En un año prevé desincorporar Pdvsa Industrial, Pdvsa Naval, Pdvsa Salud, Pdvsa Agrícola, Pdvsa Gas Comunal, Pdvsa Desarrollos Urbanos S.A. y la Empresa Nacional de Transporte. Se trata de un proceso de reingeniería para concentrar a Pdvsa en sus actividades medulares de extracción y refinación y aliviar la carga que ha significado dedicar tiempo y recursos a otras actividades ajenas a la actividad petrolera.

Levantar la producción y mejorar la eficiencia exige concentrar sus capacidades y recursos en las actividades esenciales de la industria. Esto le permitirá a Pdvsa enfocar sus menguados ingresos en optimizar la extracción de crudos medianos y livianos, incrementar el factor de recobro y repotenciar su capacidad de refinación.

– La reconversión energética mundial –

El impacto estructural sobre los precios del petróleo de la reconversión energética llevará tiempo. Hasta ahora los cambios en el balance energético mundial no han desplazado al petróleo de manera significativa. Su participación ha disminuido de 36% en 1960 a 34 % en 2014. Y quienes apuestan a una rápida difusión de las energías renovables prevén que caerá a 28,4% en 2035.

En consecuencia, no se prevén cambios radicales sino una alteración gradual de las proporciones en las que participan el petróleo, el gas y las nuevas energías en el balance energético mundial. Más impacto tendrán los factores geopolíticos en el precio de los crudos.

El principal factor catalizador de estos cambios será el rigor con el que se cumplan los acuerdos internacionales para evitar la emisión de gases de efecto invernadero que agravan el calentamiento global. Pero esto requiere la voluntad política de las grandes potencias consumidoras para lograr una creciente sustitución de los combustibles fósiles en la generación de energía, aun cuando el petróleo abundante y barato haga poco rentable el desarrollo de nuevas fuentes de energía.

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