«Hoy volvieron a tomar un conjunto de sanciones unilaterales totalmente ilegales e inmorales, ahora contra una institución que es sagrada como el Banco Central de Venezuela», afirmó Maduro en un acto televisado.
Washington anunció que prohibirá las transacciones estadounidenses con el emisor venezolano.
El asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, John Bolton, afirmó que las sanciones buscan «revertir las consecuencias de las desastrosas políticas de la era Obama y acabar con la glorificación del socialismo y el comunismo».
«Déjeme decirle, señor imperialista John Bolton, que sus sanciones nos dan más fuerza», agregó Maduro, cuyo gobierno atraviesa serios problemas de liquidez debido a las medidas punitivas del gobierno de Donald Trump.
El mandatario socialista dijo que el BCV se defenderá «con la ley en la mano».
Su gobierno está sometido también a restricciones para acceder a fondos venezolanos en bancos europeos, y a partir del 28 de abril enfrentará un embargo petrolero de Estados Unidos, que lo desconoce como presidente.
Maduro reclamó a Trump «todo el dinero, los 30.000 millones de dólares que le ha robado al pueblo de Venezuela» mediante las sanciones.