Banca y Finanzas

A un año del encaje legal, la banca lucha por sobrevivir

El gobierno de Maduro se propuso frenar la tasa de cambio y la hiperinflación con la restricción del crédito, incluso si esto se convierte en una puerta de tranca para la producción nacional.

encaje legal
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Hace exactamente un año que el Banco Central de Venezuela (BCV) anunció el aumento del encaje legal a la banca. Tanto las empresas como las personas sintieron con la medida un golpe a su posibilidad de acceder a crédito.

Mientras las empresas dejaron de recibir de la banca los créditos para producir, las personas dejaron de pasar las tarjetas de crédito para consumir.

Según el comunicado del BCV del 29 de enero de 2019, la medida buscó “intervenir en el mercado cambiario con la meta de estabilizar el tipo de cambio en alrededor de 3.300 bolívares por dólar”.

Aunque la hipeinflación y el aumento en el precio del dólar se desaceleró en gran parte de 2019, la medida del encaje legal también ayudó a contraer aún más a una economía que acumula una recesión desde hace ya siete años.

¿De qué se trató la medida?

Mientras el encaje legal ordinario pasó de 31% a 57%, el encaje marginal subió de 60% a 100%. La medida que entró en vigencia el 11 de febrero fue un golpe al sistema bancario nacional.

La principal función de los bancos es la intermediación financiera. En una explicación simple, los bancos reciben el dinero de los ahorristas y lo prestan. De esta forma reciben intereses por los préstamos, parte de esos intereses se los dan a los ahorristas y la otra es la ganancia del banco.

Los economistas señalan que el encaje real en Venezuela es de 80%. Esto quiere decir que los bancos deben «encajar» o depositar el 80% del dinero de los ahorristas en el Banco Central de Venezuela y no lo pueden prestar.

¿Cuál fue la consecuencia? Los créditos de la banca cayeron. La caída fue de 92,38% en un año, según las cifras arrojadas en el último informe de la Superintendencia de Bancos  Sudeban.

La producción cae

El país ya acumula seis años en recesión económica, y la economía venezolana se ha contraído a tal nivel que el analistas señalan que el país tiene ahora el tamaño de pequeños países como Panamá, en términos económicos.

Mientras en 2018 la economía del país se contrajo 22,5 %, según el BCV, las cifras de la Asamblea Nacional señalan que la caída en 2019 se ubicó en 43%.

La caída en 2019 fue la mayor que ha registrado el país y la política de encaje legal fue en gran parte responsable de acrecentar la crisis de producción.

Sin créditos, los productores y empresarios señalan que no tienen oportunidad de invertir, por eso han llamado a reducir el encaje legal para obtener créditos.

En recientes declaraciones, el presidente de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios de Venezuela (Fedeagro), Aquiles Hopkins, exhortó a eliminar la política de encaje legal y restituir el crédito a los productores del sector primario.

Lo que desean desde la industria del agro es conseguir los insumos necesarios de manera directa y a través del crédito de la banca.

Desde el sector de construcción también alzan la voz. El presidente de la Cámara Inmobiliaria de Carabobo, Germán Rodríguez pide al gobierno la reactivación del sector a través del financiamiento bancario.

“Vemos con preocupación que alrededor del 95% de la capacidad crediticia, se perdió, no sólo en este sector, sino en todas las áreas productivas del país”, afirmó Rodríguez.

Hasta el momento de parte del gobierno no se muestran vientos de cambio. El encaje legal se mantiene en un año en el que se espera la economía siga cayendo.

Y la hiperinflación continúa

A pesar de las medidas del gobierno por reducir la cantidad de dinero en circulación, a través del encaje legal de los bolívares de la banca, la hiperinflación continúa, aunque en 2019 cerró con menor fuerza, si se compara con 2018.

Sin embargo, el inicio de 2020 podría tener un repunte hiperinflacionario, a pesar que el encaje legal continúa.

El aumento en el flujo monetario con la entrega de petros, a 4 millones de pensionados, inyectó un flujo importante de bolívares sin respaldo de producción lo cual aceleró el recorrido hiperinflacionario por el que atraviesa Venezuela.

El dólar sigue en subida, pero barato

Aunque el Banco Central de Venezuela no logró con su política de encaje legal frenar el precio del dólar a «alrededor de 3.300 bolívares por dólar”, es cierto que en gran parte de 2019 el precio se mantuvo sin volatilidad, en gran parte por el encaje legal de 100% que tiene la banca.

Sin embargo, en enero esto cambió. La volatilidad del tipo de cambio dijo presente y un sube y baja marco las mayorías de las jornadas del tipo de cambio.

El economista Luis Vicente León describe la situación actual del precio del dólar como un comportamiento volátil, «de tendencia alcista».

«A muy corto plazo, su valor puede subir o bajar abruptamente, ante cualquier variación, por pequeña que sea, en la cantidad de dólares o bolívares que se introduzcan en un mercado enanizado. Pero en el mediano y largo plazo su crecimiento es absolutamente imparable y corrige hacia arriba cualquier bache de caída o pico de subida que haya presentado anteriormente en su camino», asegura.

Entonces… ¿Qué está haciendo la banca para sobrevivir?

Se reinventa. Ante la falta de efectivo en el país, los bancos están prestando esencialmente servicios que permiten facilitar las transacciones de sus clientes.

Aunque mantienen aún una cartera de crédito (más limitada), sus estrategias se están centrando en ofrecer servicios en Venezuela para el pago rápido. De esta forma, cada uno de los bancos tiene servicio para el pago interbancario desde el móvil, en algunos casos, incluso sin conexión de internet.

Algo nuevo que se están planteando los bancos es el servicio de custodia de dólares. Ante el manejo de grandes cantidades de dólares en las transacciones comerciales, los bancos plantean en 2020 servir de custodios de ese dinero a través de la apertura de cuentas en dólares en las que se pueden realizar transferencias comerciales.

El Vicepresidente Ejecutivo de Estrategia de Administración de Banplus, Jaime Salazar, señala que la custodia es una solución financiera para evitar que los clientes manejen  grandes volúmenes de dólares en efectivo en sus locales comerciales.

Sin embargo, la reducción del encaje legal sigue siendo una solicitud que suplica la banca, aunque no parece ser algo próximo en darse. El problema es que el gobierno de Maduro espera frenar la tasa de cambio y la hiperinflación con la restricción del crédito, incluso si esto sea una puerta de tranca para la producción nacional.

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