Los productores del sector porcino acordaron con el gobierno la elaboración de una agenda porcina, que estará a cargo del vicepresidente Jorge Arreaza, de Alimentación, Carlos Osorio, y el ministro de Agricultura y Tierras, Yván Gil.
Cudemus explicó que una de las propuestas aceptadas por el Ejecutivo fue la de proceder a un proyecto conjunto con el gobierno para sembrar maíz y soya para la elaboración del alimento balanceado. Se trata de un plan a cinco años, en el se cultivarán 50.000 hectáreas, 25.000 de cada rubro. «La inversión será 100% nuestra», dijo en declaraciones a El Estímulo.
Por su lado, el gobierno brindará acceso a créditos blandos de la banca pública y proveerá las maquinarias y equipos que requieren para el proyecto, así como los fertilizantes. «Queremos ser parte de la solución que requiere el país, en las condiciones que sea», expresó el directivo gremial.
Señaló que el sector ya cuenta con las tierras y que se está evaluando la fecha de arranque. Si el Ejecutivo provee los recursos oportunamente dentro de los próximos 60 días, es posible iniciar la siembra en el próximo ciclo.
Sobre el tema de los precios fijados para la carne de cerdo en sus distintas presentaciones, informó que se ha instalado una comisión con 5 técnicos del sector privado y 5 del ministerio. «Se están evaluando los costos de forma profunda», dijo. Admitió que la aspiración del gremio es que se revisen los precios fijados para este rubro una vez que finalicen los análisis.
«Lo que sí es necesario decir es que, se tomen las decisiones que se tomen, la empresa privada es indispensable», comentó.
Otra de las solicitudes fue la agilización de los trámites para permitir al sector exportar algunos rubros y generar una porción de las divisas que necesitan para operar. No precisó qué porcentaje de esos ingresos serán vendidos al Banco Central de Venezuela.
También se propuso un modelo de gestión mixta de algunas empresas públicas del sector primario «que no han podido arrancar». En este sentido, aclaró que la compañía seguiría siendo propiedad del Estado, pero con gerencia y administración privadas, bajo un esquema que permita compartir los beneficios. «Ofrecemos gerencia y eficiencia», dijo.
Añadió que las empresas del sector han puesto a disposición del gobierno sus inventarios y han abierto sus libros para que pueda constatarse que cuentan con suficientes productos para abastecer el mercado.