Economía

¿Beneficia al turista extranjero el Convenio Cambiario N°36?

En un intento por flexibilizar el mercado cambiario el gobierno experimenta con convenios que buscan llevar a sectores no prioritarios de la economía a la tasa oficial más alta,  pero que termina introduciendo mayores obstáculos.

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servicios turísticos

Lejos de favorecer al turista extranjero, el Convenio Cambiario Nº36 parece alejarlo de cualquier posibilidad de visitar Venezuela por las trabas que pone al cambio de moneda dura en el país.

El convenio publicado en  Gaceta Oficial 40.881, establece las normas que regulan las operaciones en divisas efectuadas por prestadores de servicios turísticos que operen turismo receptivo y los pagos de mercancías destinadas a la venta a pasajeros.

La medida obliga al prestador del servicio (agencias de viaje, alojamiento -4 estrellas o más- o de transporte) a facturar y cobrar en dólares a la tasa flotante, que si bien es una suerte de despenalización del pago en divisas para los establecimientos que se ubiquen en cualquiera de estas categorías, no lo es ni en hoteles de menor categorización, ni en otros hostales ni en tiendas comerciales.

El tipo de cambio complementario, que cerró este miércoles en 349,39 bolívares, rige desde el 10 de marzo en el país, mientras que en el mercado paralelo la tasa triplica la oficial.

Para el presidente del Consejo Superior del Turismo, José Yapur, esto es un impedimento que amarra al turista a sus divisas, porque además sólo podrán ceñirse a la norma los prestadores de servicio inscritos en el Registro Turístico Nacional, que tengan licencia para operar como tal.

«La situación cambiaria sigue siendo una traba porque no tienes la libertad. Lo único que hay que hacer es eliminar el control cambiario, de resto es un obstáculo para el visitante y el uso de divisas en el país. Ningún otro país tiene limitaciones para el uso de divisas a turistas», dijo Yapur a El Estímulo.

Por otro lado, para quienes ofrecen los servicios se traduce también en un proceso engorroso, pues obliga a realizar la transacción en dólares, lo que conlleva a hacer una nueva relación contable. «Son más personas llevando controles del Estado que es para la administración propia de la empresa que hacen que las cosas se hagan sumamente complicada. Será mucho papeleo», aseguró el empresario.

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