Kimberly Clark suspende sus operaciones en Venezuela indefinidamente

La empresa estadounidense de productos de higiene Kimberly Clark  suspendió sus operaciones en Venezuela indefinidamente, «debido al persistente deterioro de las condiciones económicas y de negocio», informó en una nota de prensa.

«Esta decisión es tomada después de años en los que la compañía ha procurado hacer frente a complicadas circunstancias más allá de su control, como la inhabilidad para comprar materia prima, lo que en los últimos dos meses ha ocasionado que la mayoría de las líneas de producción cierren, así como la carencia de divisas y el rápido aumento de la inflación. La combinación de estos factores hace imposible operar nuestro negocio en este momento», señalaron.

La empresa agregó que «todas las operaciones en las oficinas en Caracas, junto con las de la planta y el Centro de Distribución de Maracay, han sido suspendidas indefinidamente y Kimberly Clark no seguirá produciendo, comercializando ni vendiendo sus líneas de productos de consumo masivo e institucionales, mientras esta suspensión esté en vigor. Sin embargo, si las condiciones económicas cambian, Kimberly Clark evaluará sus opciones en relación a la viabilidad de operar en Venezuela».

Kimberly Clark comercializa en Venezuela pañales, toallas sanitarias, pañales para adultos y otros productos de higiene personal, con sus marcas Huggies, Kleenex, Scott, Kotex, Plenitud y Poise. Y según su sitio web, sus ventas promedio son de más de $200 millones anuales y una fuerza laboral de 1.000 empleados.

Una parte de los productos elaborados por esta empresa tenían precios controlados desde el año 2011, con incrementos poco frecuentes desde entonces, como es el caso de las toallas sanitarias y los pañales.

Señalaron que «debido a la larga historia que tiene Kimberly Clark operando en Venezuela, la decisión anunciada hoy es muy difícil, particularmente por el esfuerzo de nuestros colaboradores que han trabajado diligentemente, frente a crecientes retos, para mantener el negocio funcionando».

Indicaron a sus trabajadores que deben llamar al 0-800-612-3796 para obtener información. Al macar ese número una grabación les indica que quedan liberados de sus responsabilidades con la empresa y que su indenmización sería depositada vía transferencia este mismo sábado.

En el mensaje telefónico la compañía agradece el esfuerzo de sus colaboradores y señala que «todo lo que se pudo haber hecho se intentó».

La grabación recomienda a los trabajadores «por su propia seguridad», mantenerse «de bajo perfil hasta que pase la tensión mediática».

Este viernes un grupo de trabajadores solicitaba al gobierno que vendiera las divisas a la empresa para la adquisición de material prima y reactivar la producción paralizada parcialmente desde mayo. En enero de este año la empresa había declarado como pérdida más de $100 millones de sus operaciones en el país y advirtió que se mantendrían hasta que recibieran las divisas para cancelar insumos y productos terminados.

En 2014 esta compañía había movido los cálculos de su contabilidad en el país a la tasa de Sicad 2 y luego a comienzos de 2015 a Simadi. Siempre declarando las pérdidas por estos cambios y sin poder repatriar a su casa matriz el equivalente en dólares de sus actividades en Venezuela, como muchas otras empresas transnacionales.