Trump, que será juramentado como mandatario en menos de dos semanas y nunca antes había ocupado cargos electivos, ha hecho de la creación de empleos una promesa clave de su administración entrante el 20 de enero.
Su equipo de gobierno dijo que la reunión entre el magnate inmobiliario de 70 años y el hombre más rico de China se centró en cómo Alibaba puede crear un millón de empleos en Estados Unidos al permitir que un millón de pequeñas empresas estadounidenses vendan bienes a China y el resto de Asia.
«Tuvimos una gran reunión», dijo Trump a periodistas después de acompañar a Ma de regreso a la recepción de la Trump Tower, sede de trabajo del republicano.
Trump elogió al multimillonario chino de 52 años de edad como «un gran, gran empresario, uno de los mejores del mundo».
«Le encanta este país y le encanta China», dijo.
«Jack y yo vamos a hacer grandes cosas, pequeños negocios, ¿verdad?», acotó.
Ma, presidente ejecutivo de Alibaba, dijo que había sido una reunión «productiva» y que el foco estaría en las pequeñas empresas y los productos agrícolas estadounidenses.
El futuro mandatario también se encontró con Bernard Arnault, presidente de LVMH, fabricante de objetos de lujo como perfumes y bolsos, de quien Trump dijo que también formaba «parte de los grandes hombres».
Arnault hizo referencia por su parte a la posibilidad de «agrandar» sus fábricas Louis Vuitton, a causa del éxito de algunos productos fabricados hoy en California, con nuevas plantas «en Carolina o en Texas», sin dar más precisiones.